Soy como quiero ser (Terminada)

La Cena

Juliana abrió los ojos de tal manera que parecían iban a saltar de sus órbitas. Su tono de voz cambió por completo,

- Amiga? O sea que cuando sales de la habitación a eso vas, a buscar amiguitas- preguntó exaltada Juliana.

- No, no voy a eso! Pero soy un ser social y si se presenta la oportunidad no le niego el saludo a nadie- trató de calmarla- además tú sabes que estoy enamorada de ti! En otros tiempos, yo actuaba diferente, ahora no.

- Seguro es una mujer guapa!

Valentina se quedó pensativa, luego añadió,

- Pues fíjate que sí! Es una mujer muy atractiva! Cabello oscuro, rizado, tiene una sonrisa... wow! Pero lo más atrayente de ella es su personalidad. Su manera de pensar y de ver la vida. Es una mujer que sabe lo que quiere y está segura de quien es ella.

Juliana interrumpió las palabras de Valentina.

- Te gusta verdad? - Juliana respiraba más rápido y de una manera pesada. La ira se estaba apoderando una vez más de su cuerpo.

- Me cae muy bien! - respondió Valentina.

La cara de Juliana se descompuso por completo,

- Te la cogiste ya, verdad? - preguntó enojada. Se acercó, apretó fuertemente sus hombros, causando un fuerte dolor en ellos.

- Suéltame! Me lastimas! - pidió Valentina con voz ahogada por el dolor y más sorprendida por la reacción.

- Yo te lastimo? Por favor! Y que piensas que tu no me lastimas cuando te coges a otra estando conmigo? Eres tan puta Valentina! - respondió iracunda Juliana.

De repente su mirada cambió, la empujó sobre la cama, y luego se dejó caer sobre ella,

- Eres tan puta, Val! No entiendo.... - comenzó a besarla, mordió sus labios, haciendo que Valentina gimiera por el dolor no por placer- Te voy a coger como lo que eres.

Sin mediar más palabras, abrió su camisa haciendo saltar sus botones y comenzó a chupar su cuello, con ira. Y con una mano apretó un seno, y la otra la dirigió hacia su centro,

- Abre las piernas! - ordenó.

Valentina que era una mujer de poco llorar, en ese montón soltó el llanto, con voz trémula dijo,

- Juls, me estás abusando. Te das cuenta? Te tengo miedo!

Al escuchar la palabra abusando, Juliana la soltó. En ese momento fue como que cayó a la cuenta de sus actos, se levantó y se sentó en el diván, sus codos apoyados en sus rodillas, sus dedos entraron en su cabello,

-Yo... - su voz sonó entrecortada por el llanto- no sé porqué actué así. Me altera pensar que puedes estar con alguien más. De verdad perdóname! Fue una estupidez de mi parte.

Valentina se levantó de la cama, buscó una bata para cubrirse. Se la puso,

- Juliana mejor vete a tu habitación- pidió Valentina.

- Val, de verdad perdóname! No era yo! - trató de explicar.

- Retírate! - sonó la voz de Valentina decidida.

- Me voy, pero nos vemos en la cena.

Valentina la vio dubitativa, cena? De verdad que Juliana seguía insistiendo con eso.

- La verdad que no me place- respondió sinceramente.

Juliana la vio suplicante, y sin mediar más palabras le dijo,