Christopher Vélez, cree que lo tiene todo, es rico, guapo, y está felizmente casado.
Pero alguien llegará... Alguien que cambiará el orden de su vida, que lo hará darse cuenta de que es lo que realmente desea...
⚠️Historia adaptada, aunque a partir...
Después de haber hablado con Joel, colgué. Me dirigí a la cocina, abrí el refrigerador y saqué un poco de vino. Lo terminé y luego dejé el vaso en el lavaplatos. Subí, abrí la puerta lentamente, sonreí al verla durmiendo.
//Alessia Cruz//
Seguí intentando zafarme, pero me fue inútil. Maldije incontrolables veces a Christopher, esto sin duda no era divertido. Escuche pasos, así que me hice la domida para no tener que hablarle. Sentí como se subió a la cama, y comenzó a acariciarme.
—Que linda te ves así, eres tan bella, ¿Por qué no te conocí antes? Todo habría sido perfecto, tal vez ahora tu y yo ya estaríamos casados.
¿Casados? Vaya... No aguanté y abrí los ojos.
—¿Casados? —pregunté tierna.
—¿Estabas despierta? —sonrió nervioso.
—Mentira, estás hablando con mi fantasma —respondí sarcástica.
—Jaja, que graciosa.
—¿Me puedes desamarrar? —pregunté.
Me dolían mis manos.
—Oh cierto.
Me desamarró, miré mis manos las cuales estaban moradas con la seña de las esposas. Christopher me comenzó a tocar.
«Venganza»
—Christopher ahora no, estoy cansada y me duelen las manos.
Me ignoró. Siguió besando mi cuello y mis pechos.
—Oh bueno, pensaba hacerte esto mañana, pero estas cansada —paró de besarme.
«Venganza» mi mente aclamaba venganza y no me iba quedar con las ganas.
—¿Qué me vas a hacer? —pregunté poniéndome encima de él.
—¿Qué me vas a a hacer tu a mi? —sonrió coqueto— hazme lo que quieras —susurró.
«Venganza, dulce y excitante venganza»
Comencé a deshacerme de su ropa, lentamente quité su camisa, mientras no pararme de tocarlo. Tenía cerrados los ojos. Perfecto. Sin que el se diera cuenta, tomé las esposas, que anteriormente había tenido y las acerqué a la mesa. Lo besé con fuerza y de un jalón saqué sus pantalones y su bóxer, luego sin entrar, fingí las penetraciones.
—Tengo una fantasía que quiero cumplir contigo —logró decir.
—¿Cuál? —pregunté de la misma manera.
—Tocate, quiero que te toques.
No lo dudé. Si quería hacer mi venganza tenía que hacerlo.
—Si eso quieres —respondí entre jadeos.
Moje mis dedos con la boca y poco a poco los bajé hasta llegar a mí sexo, jugué con mi entrada mientras que con mi otra mano tocaba mis pechos. Dejé de hacerlo y me acerqué a besarlo con fuerza. Tenía cerrado los ojos, en un ágil movimiento tomé las esposas las cuales había dejado anteriormente en la mesita de noche, y se las puse.
—Ahora, sufre mi amor.
Lo besé cortamente y me paré, no sin antes guiñarle el ojo.
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Feliz San Valentín atrasado bell@s❤️
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