｢ᴇɴᴄᴇʀʀᴀᴅᴏꜱ」

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Argentina y Chile estaban demasiado aburridos, ya le habían gastado una broma a México, ya les había asustado Bolivia y Paraguay. Y ahora sin saber o sobre que hablar se decidieron en jugar un rato.

Lanzando huevos.

Recién sacados del gallinero,comenzaron una pequeña guerra con eso. Cada uno tenía la misma cantidad, pero Argentina se las acabó mucho antes quedando en desventaja contra Chile (y en deuda con las gallinas).

Por lo tanto le toco esconderse en donde pudiera, pero el chileno parecía no querer dar compasión al Argentino.

— ¡Aguanta pelotudo, ya no tengo...!—antes de terminar su oración el chileno le había arrojado un huevo a la cara— A con que esas tenemos...bien

Inmediatamente sin importar que Chile le arrojará huevos se armó de valor para saltarle encima y ensuciarlo con lo mismo que le había tirado. Cuando ya no había más y los dos estaban hechos un desastre con la sustancia viscosa en algunas partes de sus cuerpos; finalmente se recostaron en el suelo riéndose un poco por el estado del contrario.

A Argentina se le ocurrió poner más huevo en el cabello de chile y empezó a hacerle una cresta— Ahora pareces un gallo.

A ese comentario Chile rió y se bufo un poco— de ser lagartija a ser un gallo quién lo diría.

En ese momento Argentina se confundió, no sabía sí lo decía en serio o en broma, pero de todos modos soltó una risa confundida— ¿Porqué lagartija?— pregunta curioso.

Chile apretó los labios y dice— ¿Prometes no reírte po, ni contarle a nadie más?

— Lo prometo— dice sin dudar y pone el meñique para asegurar la promesa, el chileno le sigue.

— Bueno, es que tengo cola¹— revela

— Todos tenemos cola— dice Argentina algo confundido y se mira sus posaderas— bueno, unos más que otros.

— No, cola de culo, cola de colita, tengo una colita— dice, pero Argentina no le entendía, es más lo miraba con cara de "¿te sentís bien washin?"

— No entiendo...— dice el argentino por lo que Chile se acerca a su oído y le susurra su secreto.Argentina abrió los ojos muy sorprendido y se queda mirando al chileno un buen rato— ¿Es en serio?

Chile asiente tímido y nervioso— Si

—¡QUIERO VER!— Grita Argentina para sorpresa del chileno y se le lanza encima por lo que Chile empieza a forcejear para quitárselo— déjame ver, quiero ver, ¿esa cosa se mueve a voluntad, es grande o pequeña?, tengo interés de saber cómo es!

— ¡No te voy a dejar ver mi culo!— Grita, pero parece que Argentina no se iba a detener con eso.

— ¡Pero quiero verlo!, tengo curiosidad, solo bajate los pantalones un poco y...— y Chile pego un grito interrumpiendo de inmediato.

— NO!— inmediatamente se fijó que no estaban solos. Cuba los estaba mirando desde que Chile le empezó a susurrar a Argentina.

Ambos (aún embarrados de huevo) se quedaron mirando al cubano quién los miraba muy raro, casi que peturbado , entonces se dirigió a Argentina.

— Por favor, por favor, no violes a Chile.

Inmediatamente se retiró.

[...]

Y Venezuela llegó al dormitorio de España, para escucharlo hablar con alguien, casi de inmediato México salió de allí y casi que choca con Venezuela.