Café Mentolado || VOLKACIO

IX

[V]

Volkov se quemó la lengua al estar distraído, pero no le tomó importancia. Tal vez ni siquiera lo notó...

Un nuevo mensaje llegó.

"¿Que diablos estas diciendo?, la comida japonesa es mucho mejor que la tailandesa". Decía el mensaje.

Volkov frunce el ceño y después ríe con levedad. Comienza a escribir rápidamente.

"De acuerdo, tal vez lo es, pero el Pad Thai es lo mejor que puedes probar" Responde.

Segundos después un nuevo mensaje llega.

"Bien, entonces debes llevarme a probarlo. ¡Puedo únicamente los lunes! ¡Y tu debes pagar!" Decía el mensaje del contrario.

Volkov se recarga en el respaldo de la silla y da un pequeño trago a su taza ya casi vacía.

"¿Lunes?". Pregunta dentro del mensaje.

"Mi tiempo es dinero, tomalo o déjalo!".

Volkov ríe de forma simpática de nuevo.
El sonido retumbante de algo saca de sus pensamientos a Volkov, unas pisadas que logran escucharse desde lo lejos, acercándose lentamente mientras resuenan en la madera del suelo, cuando finalmente se encuentran frente a la mesa, toman una silla y la arrastran hasta poder sentarse en ella.

Volkov alza la mirada al notarlo, encontrándose con una dama con el cabello hacia el lateral, los hombros descubiertos y una gesto alegre en el rostro.

-¿Por qué estás sonriendo? -Pregunta la chica, recargandose en la mesa e inclinándo su cuerpo hacia el contrario.

-Paola... -Volkov apaga su teléfono y aclara la garganta -, ¿Qué estás haciendo aquí?

-Oh, -Ella ríe, señalando por la ventana el edificio frente a la cafetería -, bueno, la empresa de nuestros padres está prácticamente enfrente así que...

-Ah, cierto. Fue una pregunta estúpida.

La chica ríe leve e inspecciona su alrededor con tal solo un vistazo sencillo y corto, el lugar era una mezcla rara entre algo moderno y algo rústico, pero a ella eso no pareció molestarle. Mira la taza de Volkov y la toma con una de sus manos para acercarla a ella y oler un poco lo que hay dentro.

-¿Café... mentolado? -Dice la chica dudando de si esta en lo correcto o no, da un sorbo mientras que es rodeada por los ojos del contrario.

Frunce y el ceño y después vuelve a dar un trago un poco más grande.

-Es un poco... -Se detiene para considerarlo y después continúa -... ¿extraño?, es un sabor... extravagante.

-No tenías que probarlo -Le responde el contrario de una manera burlona, paola ríe.

Ella no tan solo era su prometida, era (junto a volkov) la futura heredera de la empresa que estaba siendo dirigida por los padres de ambos (el padre y la madre de Volkov, y el padre de Paola), se suponía que ambos debían dirigirla juntos, no era necesario el compromiso, pero la familia de ambas partes decidió que era mejor si se mantenían de esa manera. Fue así como ambos terminaron en aquella situación.

La situación de... comprometidos.

Bastante egoísta, ¿verdad?.

A pesar de aquella situación, y de aquel extraño "arreglo" entre las familias, Volkov jamás se había enamorado en serio.
Él había tenido amores platónicos y ídolos, pero durante su adolescencia jamás conoció a nadie que llamara su atención. Al ser amigo de una persona tan extrovertida y acelerada como lo era Jack, se volvió popular tan solo con pasar los almuerzos y compartir algunas clases con él, aunque también cabe decir que desde la pubertad hasta la graduación en preparatoria, Volkov era el guapo y Conway un sujeto promedio; cuando llegó la joven adultez todo se volteó patas arriba y Conway y Volkov cambiaron de puesto rápidamente.