POV Alba
Después de almorzar me dirijo a la parte trasera de los jardines, cómo de costumbre. Llevo cuatro dias reuniéndome en secreto con Madara. Al principio pensé en contárselo a Tobirama, pero es un hombre muy estricto y seguramente querría interrogar a Madara.
Al fin y al cabo, estoy segura dentro de la barrera, y Madara no me parece mala persona.
Es callado, reservado, serio e imponente, pero de cierta forma me reconforta su presencia. El primer día preguntó por la gente de aquí, cuántos había, a qué se dedicaban... Vaya, información en general, nada extraño.
El segundo día, cuándo llegué, el ya estaba ahí. Sentado en el suelo, cómo si estuviera meditando. Nos miramos a modo de saludo y simplemente me tumbé en la hierba frente a él, descansando ambos.
Apenas hablamos, sencillamente disfrutamos de la compañía del otro, hasta que me levanté para irme, puesto que ya era mediodía y Tobirama vendría a buscarme si no me veía en el comedor.
El tercer día, me preguntó por mi novio, por Tobirama, vaya. Le hablé un poco de él, de cómo pasábamos el tiempo y detalles sin importancia.
Él me contó, que contrario a Tobirama, él puede usar el fuego. Dijo que puede usar más elementos, pero que ése es su favorito.
Hoy me he quedado dormida y voy un poco más tarde, pero seguro que Madara está allí.
Y efectivamente, así lo compruebo cuándo llego al lugar. Está sentado en el suelo, con los ojos cerrados. Sonrío ante la apacible escena y me siento frente a él, justo en el límite de la barrera.
- Buenos días, Madara. - saludo con una sonrisa en cuánto le veo abrir los ojos-.
- Ya pensé que no vendrías.
- Lo siento, anoche me acosté tarde y me había quedado dormida.
- Lo sé, andaba cerca y te ví con... Tobirama... Cerca de aquí.
- ¿Andabas cerca? ¿Y qué pasa si te ven? ¿Ya te has decidido a pedir permiso para entrar?
- La verdad es que no. Pero no te preocupes, nadie va a detectarme si así lo quiero.
- Madara, llevo días queriéndo hacerte una pregunta.
- ¿Hmpf?
- ¿Porqué estás aquí?
- Estoy buscando a alguien.
- ¿Y crees que esté aquí?
Sus ojos rojos no se separan de los míos, parece estar pensando si responderme o no.
- Quién sabe. - responde con un suspiro-.
- No conozco apenas a nadie pero si me das un nombre o una descripción tal vez pueda ayudarte.
- ¿Siempre has vivido aquí? - preguntó esquivando mi oferta-.
- No, antes vivía con mi abuelo.
- ¿Hace mucho de eso?
- Pues algo más de un año... Creo.
- ¿Crees?
- Si... Bueno, no sabría decirte exactamente cuánto hace.
Ambos nos mantuvimos en silencio unos instantes, mirándo al cielo. Pensé en mi abuelo, en los lobos y en mis amigas, las cuáles seguramente hará horrores que no saben nada de mí.
- Me pregunto qué estará haciendo ahora mi abuelo... Le hecho de menos. - suspiré perdida en mis pensamientos-.
Sentí la intensa mirada de Madara posarse sobre mí y me dí cuenta de que había pensado en voz alta.
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Ore wa... Uchiha Madara.
FanficDespués de los hechos acontecidos en Naruto Shippuden, incluso años después de la generación de Boruto, ciertos sucesos hacen que un grupo de historiadores e investigadores japoneses revivan por accidente los restos de los ninjas a los que estaban e...