Baño en el lago

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POV Itachi

Llegamos al lago que hay bajo la cascada. En cuánto llegamos, Alba, Konan, Hidan, Deidara y Kisame, tiran su toalla al suelo y hacen una carrera para tirarse los primeros al lago.

Todos se ríen excepto cierta jovencita a mí lado, que permanece con la toalla enrollada  a su alrededor cómo si no llevar nada debajo.

- ¿No vas a ir a bañarte? El agua está tibia en ésta época del año.

- Yo... Si, supongo... A lo mejor de aquí un ratito...

- Entonces me quedaré fuera contigo hasta que te apetezca entrar.

- ¿Eh? No es necesario...

- ¿Hm? ¿Te encuentras bien? Vuelves a estar roja. A lo mejor no tendrías que bañarte en el lago, podrías estar empezando un resfriado.

- No... Siento preocuparte, de veras... Es, es sólo... Yo...

Mira a todos lados cómo si tuviera miedo de que alguien más la escuchara y dice algo que no logro entender, entre susurros y hablando rápido.

- Disculpa, no he podido entender lo que has dicho.

- Yo.... Es que... Medamuchaverguenzaquemeveanenvikini.

Lo dijo tan rápido que de nuevo me costó entender lo que dijo, pero lo entendí. No pude evitar que me sacara una media sonrisa su timidez. Me agaché un poco para quedar a su altura.

- Una vez dentro del agua ya no habrá problema no?

- Bueno... Supongo, pero esperaré un poco. Por favor no me tires. - dice mirándome a los ojos, nerviosa-.

- Tranquila, voy a cuidarte, no haré nada que no quieras.

Toqué con dos dedos su frente y ambos reímos. Activé mi sharingan, y antes de que ella se diese cuenta, la metí en un genjutsu.

- Vamos Fran, ya podemos ir a nadar. - le dije ofreciéndole mi mano-.

La tímida chica mira confundida a su alrededor, pero termina por sonreír y coger mi mano.

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POV Fran

Itachi tocó con dos dedos mi frente, justo igual cómo lo había hecho antes en la habitación.

De repente sus ojos se tornan rojos, pero lo ví tan sólo un instante, tal vez lo haya imaginado.

La hierva del campo se empieza a volver gris, cuando llega al resto de amigos de Alba, parece como si quedaran petrificados y se vuelven grises cómo la hierva, también después el agua y Alba junto al resto de sus amigos dentro del lago.

Lo observo todo sorprendida, parece cómo si el tiempo se hubiera parado, excepto por el chico que hay frente a mí, que me tiende su mano.

- Vamos Fran, ya podemos ir a nadar.

Abro los ojos de más, sorprendida.

- ¿Has hecho tú esto? ¿Ellos están bien?

- Sólo he parado el tiempo para que puedas meterte en el agua sin que nadie te mire, así te sentirás más cómoda.

Me dedica una sonrisa que me es imposible no devolver y tomo su mano.

Dejo caer mi toalla mientras caminamos y siento el calor en mis mejillas, pero Itachi respeta mi pudor y no me mira. Suelta mi mano cuando llegamos a la orilla.

Mojo mis pies en el agua y tenía razón, está tibia. Me meto de golpe remojando también mi pelo y buzeando un par de metros disfrutando del agua.

Al salir observo a mi alrededor y sigue todo igual. Itachi se acerca nadando hacia mí y vuelve a tocar mi frente con dos dedos. Cierro los ojos y cuándo vuelvo a abrirlos todo ha vuelto a su color original.

- ¿Cómo has hecho eso?

- Secretos de un ninja. - me dice con una sonrisa-.

- Esto... Gracias, Itachi.

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POV Alba

Ví a Itachi meter a Fran en un genjutsu. Apenas hubiera sido apreciable por otra persona, pero mantenía un ojo sobre Fran todo el rato y conozco de sobras los genjutsu de Itachi.

Después me sorprendió ver a Fran dejando caer su toalla, pues normalmente no se la abría quitado hasta llegar a la orilla.

Hidan y Sasori la miraron con la boca abierta. No les culpo, es una chica delgada pero con buen cuerpo, y con una especialmente buena delantera. Con su estilo de vestir no se nota que tenga tanto pecho, pero con vikini es inocultable.

Itachi la tomó de la mano hasta que ambos estuvieron en el agua y deshizo el genjutsu. Comprendí que lo hizo para eliminar sus inseguridades y pudiera disfrutar del baño, así que le sonreí a Itachi y dije un "Gracias", que seguramente leyó en mis labios.

Sentí una presencia débil en lo alto de la cascada, y al levantar la mirada ahí estaban Loba, Lobo y sus cuatro cachorros, que ya eran unos hermosos lobos grises más altos que sus padres.

- Chicos si me disculpais un ratito, creo que han venido a verme.

Miraron hacia arriba miraron confundidos a los lobos.

- Ve. - dijo simplemente Madara.

No me lo pensé dos veces, además que dejo a Fran en muy buenas manos. Camino por encima del agua y cuando estoy frente a la cascada acumulo el chakra en mis pies y de un salto llego arriba del acantilado dónde me espera mi familia lobuna.

Les abrazo a cada uno de ellos me dan lametones a modo de besos. Los cachorros, aunque ya son adultos, saltan cómo cabritas, juguetonamente pidiéndome que les siga.

Les sigo hasta su cueva para saludar a los demás lobos de la manada y una vez allí me doy cuenta de que una de las lobas jóvenes de la manada está en cinta.

La acaricio, paso mis manos por su vientre y compruebo con mi chakra que el embarazo vaya bien. Efectivamente tanto la madre cómo los pequeños están sanos.

Me siento a gusto con ellos, así que decido quedarme un rato a relajarme cómo en los viejos tiempos.

Me siento con las piernas cruzadas en medio de la cueva y aprovecho para renovar mi chakra cómo me enseñó Madara. Siento la energía en los árboles, en la tierra, incluso en los lobos. Siento toda esa energía fluir a través de mi cuepro, el hormigueo en la palma de mis manos.

Siento... Otro chakra. Aún está lejos, pero viene a toda velocidad hacia mí. Éste chakra, lo recuerdo a la perfección.

- Mierda... Los lobos...

Corro para salir de la cueva antes de que llegue a dónde estoy y encuentre su guarida. Debería ir hacía dónde están los chicos, su poder es demasiado para mí, pero si sigue mi chakra llegará a los lobos y podría usarlos en mi contra o hacerles daño, debo protegerles.

Hecho a correr en la dirección en la que siento ese fuerte chakra, que aunque intente ocultarlo, en mi tierra, en mi bosque, no puede esconderse.

Veo un relámpago, luego otro. Me detengo cuándo tengo la certeza de que no me hace falta acercarme más. Y efectivamente, con el último rayo, aparece frente a mí ese pelo blanco desordenado y esos ojos rubíes.

- Tobirama.

Ore wa... Uchiha Madara.Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu