El hilo rojo

XXXIV

Alice había preparado la comida favorita de su hija, pues a la ojiverde jamás le había gustado la comida que le daban en el psiquiátrico, porqué según ella estaba muy condimentada y con demasiada grasa. 

— ¿Te gustó?

— Está delicioso — se metió un bocado de comida a la boca — de por sí, siempre me ha gustado tu comida. Créanme que la comida del hospital está mejor que la de un psiquiátrico

— Reggie estuvo preguntando mucho por ti — el pelirrojo informó

— ¿Con qué Reggie? — preguntó FP mirando a su hija que estaba comiendo — Estaba celoso y se le notaba en la mirada. Hermoine y Alice lo vieron y casi escupen el agua que estaban tomando

— ¿Qué tiene o qué? — respondió la rubia menor

— No nada, solo digo. Jamás pensé que tú y Reggie

— Reggie y yo nada. Gracias por avisar Archie, lo iré a buscar tal vez mañana

— Como no va a haber nada entre ustedes, yo los vi el otro día besándose en la boda del papá de Kevin. Son amigos con derechos, dilo con todas sus letras, no te sientas mal por eso

— Cheryl — Toni regañó a la pelirroja. El día de la boda ella y Cheryl andaban buscando un lugar para darse cariño, ya que se habían escapado de Penélope, cuando creyeron llegar al lugar adecuado sin  querer habían descubierto a Kristell con Reggie hundidos en un beso — Te dije que no dijeras nada, de haber sabido que hablarías te hubiera traído con cinta en la boca

— T T, no dije nada malo

— Señorita, tienes mucho que explicar ¿Qué es eso de amigos con derechos? Te he educado bastante bien

— Es lo más normal de mundo, sin compromisos. Deberías probarlo — FP soltó una risa

— Si Reggie te hace algo, no te preocupes, mis puños lo pueden golpear — el niño de gorro raro habló

— Evitemos el tema de Reggie

— Preferible. Luego me platicas a mi, yo no soy como tu mamá — Hermoine le dijo en un susurro a la rubia de ojos verdes — Créeme, deberías probar las relación poliamorosas, por si en algún momento no te decides por uno — por suerte Alice no escuchó lo que la morena dijo, si no ya estaría muerta

— Eso ya es mucho, con lo de Reggie estoy bien

Todos se fueron retirando de poco a poco, el único que se quedó fue FP a ayudar a recoger las cosas de la bienvenida de su hija. El castaño moría por gritarle al mundo que esa niña rubia era su hija, tenía dos hojas ya, Jellybean y Kristell.

FP bajó después de haber visto un episodio de una serie con su hija, pudo ver a Alice sentada en la mesa del comedor colocándose sus anteojos, la había visto estar sentada desde la tarde escribiendo un artículo pero prefirió no acercarse a preguntar. Pudo ver a Alice moverse incomoda, así que terminó de bajar las escaleras.

— ¿Al, te sientes bien? — se acercó a ella

— Me asustaste — brincó en su lugar

— Perdón, yo no quise. Te vez incómoda ¿Estás bien? ¿Te llevo al hospital?

— No, eres un exagerado

— Entonces ¿Qué tienes?

— Tu esposa te debe estar esperando, ya estuviste aquí todo el día

— No me iré si no me dices que pasa y Gladys entiende porqué estoy aquí

— Okey, tú ganas, me duelen los pies, los tengo hinchados, es horrible — hizo un puchero

—  Muy bien, se acabó el dolor de pies — jaló una silla y se sentó al lado de ella — pásame tus pies, te voy a dar un masaje

— No FP

— Dame tus pies, es mi hijo después de todo y te dije que iba a estar siempre, eso incluye si te tengo que masajear los pies

— Solo por esta vez, porque si lo necesito — alzó sus pues y FP los recibió

El castaño comenzó a masajear los pies de Alice, la vio relajarse y mirar con anhelo su vientre mientras dibujaba círculos en él con sus dedos, ante esa imágen sonrió.

— ¿Se siente bien no?

— Demasiado

— Siempre que quieras masajearé tus pies. Créeme que me muero por saber si va a ser una mini versión tuya o una mía — le sonrió a la rubia

— Somos unos tontos ¿No?

— ¿Porqué lo dices?

— Vamos a tener un hijo y somos amigos

— ¿Y eso qué? Tú me amaste una vez, yo... — se quedó callado — algo hubo que nos hizo llegar a dónde estamos ahorita, ya vamos por nuestro segundo hijo sin...

— Tener una relación estable — terminó la frase que FP iba a decir y ya tenía lágrimas en los ojos

— Alice, no te pongas así

— No es por lo que pasó o pudo haber pasado, si no que son las hormonas — se abanicó con las manos y se soltó a llorar

— Alice, no — se paró y la abrazó — Shh, ya, tranquila porfavor

La rubia de pronto sintió algo en el vientre, que la hizo apartar a FP de ella.

— ¿Qué pasa? ¿Qué hice? ¿Te lastimé?

— No — le regresó la mirada — ven, rápido, dame tu mano — agarró la mano de FP y la puso sobre su vientre, su bebé había dado su primer patada — Esto es increíble Forshyte 

— No lo puedo creer ¿Es la primera vez?

— Si — asintió y le sonrió

— ¿Puedo? — FP preguntó haciendo referencia a que si podía tocar otra vez. Estaba la pendiente de ella pero nunca se había dado la oportunidad de acercarse y tocar su vientre

— Si, es tu hijo, no tienes que preguntar — pudo ver a FP arrodillarse y con miedo agarrar su vientre. Sintió sus mando grandes sobre ella

— Bebé, yo soy tu papá, no sé si puedas oírme pero quiero que sepas que te quiero mucho y al igual que tú mamá ya quiero conocerte — sin preguntarle a Alice, con extremada delicadeza levantó su blusa, dejando a la luz su abultamiento de cuatro meses de embarazo — aún no sabemos si eres un niño o una niña, pero ya iré pensando en nombres junto con tu mami. Todos te estamos esperando con ansias, serás un bebé muy querido. Tus hermanos también te quiere conocer, aunque creo que será complicado explicarte algunas cosas, se que las entenderás — comenzó a dejar varios besos en el veintre de la ojiazul — te amo