El hilo rojo

XLV

"Los secretos entre los que se quieren no son buenos" - Anónimo

Al terminar de tomarse las pastillas, la rubia se alejó lo más posible de dónde se encontraba su madre y FP. Ver tanta gente comenzó a alterarla, todos hablaban al mismo tiempo y de cosas diferentes por lo que todos comenzó a juntarsele en la cabeza. Mientras caminaba chocó con Reggie.

- Perdón - el la tomó del brazo

- ¿Qué pasa hermosa? ¿A dónde vas?

- Emmm... Tengo que buscar a Betty, nos vemos luego - se safó y con la mirada buscó a su hermana hasta que la encontró con Archie hablando y corrió a ellos - Que bueno que te encuentro

- ¿Qué pasa? ¿Te sientes bien?

- Si, pero... Tengo que irme, necesito ir a la casa por una carpeta de la escuela que se me olvidó darle a - se quedó pensando un nombre y que mejor que su mejor amiga - a Lucrecia, va a pasar a la casa y tengo que estar ahí

- Pero ¿Estás bien? - preguntó el pelirrojo - si quieres te acompaño y regresamos

- No gracias, estoy bien, no creo regresar para que avises Betty. Me despiden de todos - se pasó la mano por el cabello y se fue corriendo

- ¿No está bien verdad?

- No seas tonto Archie, es obvio que algo el pasó, pero si vamos detrás de ella se puede enojar y va a ser peor

- ¿Qué le dirás a tu mamá?

- Que se fue a la casa y le diré lo que ella me dijo, para no preocuparla

Alice y FP regresaron con los demás pero ahora se dispersaron, la rubia de fue con sus amigas y él con los suyos, mientas que los adolescentes se despersaron por toda el lugar. Nadie notó que faltaba la hija menor de Alice, ya que siempre que había gente solía alejarse de todos.

- Ya pasó el baby shower, creo que ya podemos planear la boda

- Penélope, tranquila - contestó la rubia - ¿Porqué tanta presa en querer que me case?

- Fui tu confidente por años, te conozco a la perfección, te quieres casar con FP - la castaña habló

- Tienes razón

- Ahí está, hay que planear la boda - la latina sonrió

- Si me quiero casar con él, pero tengo muchas cosas que hacer, no creo tener tiempo de planear una boda. En dos meses y medio nacen mis hijos. Falta menos de un año para la graduación de los chicos, estoy saturada de trabajo, aún no consigo que Jellybean me tolere mínimo

- Yo me encargaré de eso, solo que es igual de terca que FP y si está costando trabajo, pero tú olvídate de Jellybean - dijo la madre de la niña

- Penélope deja de atosigarla con eso de la boda, lo principal es que nazcan los bebés bien y ya después con más calma ya podemos organizar la boda - Sierra dijo

- Tienes razón, dejaré de insistir con eso. Cuando te quieras vas ay estés lista nos llamas y nos juntamos en la casa de cualquiera de nosotras para ver cómo te ayudamos

- Gracias - vió pasar a Juguead, con Betty y Reggie, así que comenzó a buscar a su hija con la mirada por todos lados - un segundo ¿Han visto a mi hija?

- ¿Cuál de las dos? - Hermoine miró a todos lados

- A Kristell

- No la he visto, tal vez está afuera tomando aire o en la habitación de Verónica, no sé ¿Porqué?

- Ahorita vengo - fue a dónde estaba FP con los demás - ¿Alguno de ustedes ha visto a Kristell?

- No ¿Pasa algo? - preguntó preocupado FP

- No está. ¡Elizabeth! - llamó a su otra hija y fue enseguida

- ¿Qué pasa mamá?

- ¿Tu hermana dónde está?

- Se fue a la casa, me dijo que Lucrecia iría a verla por algo de una carpeta de la escuela y que ya no regresaría, que nos esperaba en la casa

- ¿La viste bien?

- Si, estaba tranquila

- Okey. Nada más nos quedamos un rato más y nos vamos a la casa. ¿Reggie sigue aquí?

- Si, ahí está - miró a dónde estaban Cheryl y Toni con el chico

- Okey

Cuando todo terminó, la rubia de ofreció a ayudarle a limpiar a Hermoine pero ella no quiso, le dijo que se fuera a su casa y que Gladys se había ofrecido a ayudarle y mientras limpiaban tratarían de limar las asperezas, pues la castaña estaba poniendo de su parte para recuperar la amistad de todos.

Kristell dejó pasar unos días, en lo que juntaba las piezas del rompecabezas que tenía en su cabeza. Las acciones de FP hacía ella comenzaron a encajar en el estereotipo de un padre, acciones que Hal en algún punto tenía con ella y por fin las piezas estaban acomodadas, no había delirado, FP era su papá.

Todos estaban en el comedor cenando, hablando de cierta cosa que a ella no le había llamado la atención por lo que no se involucró en la conversación, pero ¿Cómo podían metirle? Ser tan descarados para mirarla a los ojos, mientras ellos habían desatado más demonios de los que tenía en la cabeza ya al escuchar eso que FP había dicho.

- Son tan hipócritas - dijo elevando su voz y sin quitarle la mirada a su comida

Juguead se pasó un pedazo entero de comida la escuchar lo que su hermana había dicho, al igual que los adultos y Betty, miraron a la rubia que se encontraba viendo las mangas de su suéter negro.

- Cariño ¿De qué hablas?

- Toda mi vida ha sido una puta mentira y a ustedes no les importó - golpeó la misa y se giró a FP - Era obvio que había algo más por como me tratabas, pero fui una idiota que no me di cuenta

- ¿De qué hablas?

- De qué los escuché hablar el otro día en el baby shower y decías que era tu hija y tú - señaló a su mamá - le dijiste que no podía decir nada porque alguien podía escuchar y tenías razón, jamás debió abrir la boca, porque para su mala suerte los escuché

- Debió ser una alucinación cariño, escuchaste algo y ya sabes que tu mente luego crea historias

- ¡Mamá! - habló Betty

- ¿Tú lo sabías? - dijo con lágrimas en los ojos

- Yo...

- No digas nada, por tu reacción es lógico que lo sabías y supongo que tú también - miró al chico de gorro que solo miraba

- Si, también lo sabía

- ¡Juguead! Cierra la boca - regañó a su hijo

- ¿Porqué no me dijeron nada?

- Porque estás enferma - respondió la rubia mayor

- Estoy enferma - gritó - pero no soy una idiota. Me hiciste vivir en una mentira por 17 años - se levantó de la mesa - para confirmar todas mis teorías, tuve que ir a la cárcel a visitar al asesino en serie que yo pensaba que era mi padre y él no queriendo, me lo confirmó - las lágrimas no cesaban - Me contó que le fuiste infiel y yo fui el producto de esa infedelidad, por el amor de Dios, fui un error que resuto de un momento de debilidad entre ustedes dos. Papá, perdón, Hal o el enmascarado como quieran decirle me dijo que el día que tú lo engañaste, fue el mismo día que Juguead nació, suena enfermo de solo escucharlo y pensarlo - el vaso que tenía en la mano lo estrelló contra la pared y miles de pedazos de vidrio cayeron al suelo - Creí en ti - sollozó mientras miraba a FP - son unos hipócritas - empezó a subir las escaleras

- No, espera - FP quiso ir detrás de ella pero Alice lo tomó de la mano

- No vayas, déjala no es recomendable hablar con ella ahorita. No sé si me esperaba una reacción peor o qué, pero maldita sea - lloró y Juguead se acercó a abrazarla