El hilo rojo

XXXIX

Por la reacción de Jellybean, tuvieron que dejar solas a las Smith en el restaurante. Los Jones llevaron a la niña a casa, no les había dirigido la palabra en todo el trayecto.

Jellybean y entró y le cerró la puerta a su papá y a su hermano en la cara.

— ¿JB qué te pasa? — Gladys saltó del sofá, estaba dormida y por el sonido de la puerta despertó

— Mi papá

— ¿Qué pasó? ¿Está bien?

— Nada está bien — comenzó a llorar y se acercó a Gladys. La puertas fue abierta de golpe dejando ver a Juguead y a FP enojados — ¿Alguien me puede explicar qué está pasando?

— Pasa mamá, que Jellybean reaccionó como una niña de siete años

— Con razón ¿Qué hiciste JB?

— Yo te digo — irrumpio el mayor de los que estaban ahí — pasamos por la hija de Alice a la escuela, fuimos a comer y después le dije lo que ya sabes y se enojó

— ¿Tú ya sabías?

— Si, ya sabía, yo fui la que dió por terminado nuestro matrimonio. JB — la tomó de la mandíbula y con cuidado la levantó para que la mirara a la cara — Jellybean, tu papá no es feliz conmigo y no lo puedo forzar a estar conmigo, cuando quiere a Alice, es lo mejor para todos

— No mamá, tu amas a papá

— Jellybean, mi mamá ya te dijo que las cosas se acabaron entre ellos

— Mira Jellybean, te quiero mucho, nunca va a cambiar, pero no tenías porque hablarle así a Alice y mucho menos ponerte con Kristell, a ella no se le puede llevar la contra nunca — adoraba a su hija, peor su comportamiento había sido muy infantil

— Pues vete con ella, el bebé y la rubia loca esa de ojos verdes

— ¡Jellybean! — regañó Gladys — no te refieras así a Kristell y el bebé no tiene la culpa de nada — hizo que se sentara en el sofá — JB mira, las parejas se separan y en algunos casos vuelven a encontrar a una persona y está bien, te voy a poner un ejemplo; si yo llego a conocer a alguien más ¿Qué harías? O si tengo otro hijo que no sea de tu papá

— Lo mismo

— Hija, son cosas que pasan. Muchos matrimonios no duran como el mío con tu mamá. Tú viste que hice de todo porque las cosas funcionaran, pero no se pudo. No quedó ni en mi, ni en tu mamá. Estoy muy agradecido con ella de que me haya dado la oportunidad de estar con Alice

— Juguead, Jellybean, miren, su papá y yo cometimos muchos errores desde la primera vez que empezamos a salir, fue error tras error, hicimos sufrir a personas que no se lo merecían, y créanme que fueron varias, pero principalmente nos hicimos daño mutuamente — miró a FP y él asintió — Que no les quede la menor duda de que si yo o en este caso su papá que ya tiene a alguien, jamás, los vamos a dejar de querer, son todo para nosotros

— Pues si, pero eso no quita que papá vaya a tener otro hijo — se puso a llorar en el pecho de Gladys y ella comenzó a acariciar su cabello — Dale tiempo — susurró a FP y vio como su hijo y el castaño salían

— Y eso que no sabe que Kristell es su hermana. De verdad, pobre bebé dos de sus hermanos saliendo y también ser cuñado mío y Kristell también es mi cuñada — soltó una risa

— Si así se puso por lo del bebé imaginate si se entera que Kristell es su hermana — se llevó las manos a la cabeza — No podemos decirle a Jellybean de Kristell, es capaz de decirle y me da miedo que vaya a tener una crisis, que le digan que es el resultado de una infedelidad podría matarla

— Tranquilo, te entiendo, aunque si fue raro que mientras yo estaba a punto de nacer, tú y Alice la estaban procreando — se empezó a reír

— Creo que por algo yo fui el que la salvó de que se aventara al río Sweetwater

— Han conectado muy bien y eso es bueno — sonrió y se sentó en los escalones

— Es increíble como nos llevamos tan bien desde el principio y eso sin saber que éramos padre e hija. Ahorita tampoco sabe, daría todo por decirle hija y que no se siga acordando de Hal

— Hal no se merece a Betty ni a Kristell. Pero mejor cambiemos de tema... ¿Qué se siente saber qué dentro de poco vas a empezar a volver a cambiar pañales?

— Raro y bonito — Juguead lo miró con una ceja alzada — siempre fui muy torpe con ese tema, tu mamá era la que siempre se encargaba de cambiar los pañales. Un día tu mamá tuvo que salir y te dejó conmigo, no sabía que hacer y tuve que ir a buscar a Fred para que te cambiara el pañal

— Papá — se rió — ¿De verdad el papá de Archie me cambió los pañales? Milagro que no me mataste ¿Dónde tenía la cabeza mi mamá para dejarme contigo?

— No lo sé, pero confió en mí y cuando regresó tuvo que ir por ti y por mi a casa de Fred. Soy un caos como papá cuidando bebés. Siento que Alice me va matar. Me da curiosidad saber cómo era Kristell de bebé, tu hermana es hermosa — sonrió

— Lo sé, es muy bonita. A veces pienso que no solo tus hijos. Hay que agradecerle a mamá y a Alice que no ella, Jellybean o yo, nos parezcamos a ti

— Oye muchacho — soltó una risa — di lo que quieras, pero yo estoy guapo, si no porque tu madre y Alice se fijaron en mi. Cuando tenía tu edad le gustaba a casi todas las niñas de la escuela

— Alice y mamá estaban ciegas, bueno Alice sigue

— Alice — suspiró

— El amor — empezó a cantar

— Cálmate Betty — su hijo sonrió

— Estoy agradecido con la vida. Con ese bebé que viene en camino voy a poder hacer todo lo que no hice con Kristell, cuando nació y poder verlo crecer