Nuestro Lado Oculto II

La verdad que aniquiló

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Este es un capitulo un poco más corto que otros y les advierto que trae un salto de tiempo, haber como lo toman...

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Luego de gritos e insultos que Jessica repartió a los dos hombres, su padre y el supuesto padre biológico de Nayeon, fue convencida por esta de dejar el asunto y mejor ir tras Tiffany. Jessica se fue por su cuenta pidiéndole a su hija únicamente que no vaya a decir nada al respecto a SinB o Jaehyun, que es algo que tiene que ser mentira.

Jessica es la única en dudar, mejor dicho en no aceptar aquella verdad por cruda que resultó. La propia Nayeon no cree que su abuelo sea capaz de inventarse algo de esa magnitud, lo cierto es que le genera mucho malestar tener que plantearse una vez más quienes son sus verdaderos padres biológicos.

No puede alegrarse ni siquiera de la parte en que sí es hija de Tiffany, porque le resulta perturbador que alguien aproximadamente de la edad de su abuelo sea su padre biológico, que sea un Jung no reconocido con un parentesco familiar que le cambia todo. Sus hermanos ya ni siquiera comparten la misma sangre con ella, antes por lo menos tenía eso.

Sin poder desahogarse prácticamente con nadie pues considera que esa información no tiene que ser ventilada, elige acudir a un bar a pasar el rato para sentirse mejor. Lo único bueno de todo esto es que se incentiva más a ser la heredera para cambiar esas locuras, no permitiría algo así para su persona y futura descendencia.

Después de dos tragos, decidió contactar a Jeongyeon para que le hiciera compañía y mientras esperaba, una cara conocida y desagradable la encontró. Él comenzó a caminar hacia su dirección, con lo que hace una expresión de disgusto ante su estúpida sonrisa.

—Hola Nayeon Jung. —La saluda para que ella le de la espalda— Sé que me desprecias por el pasado pero te aseguro que he cambiado. Escucha, ya ni siquiera le hablo a mis hermanos, soy completamente diferente.

—Jackson.... Convenceme. —Como sea nada pierde y necesita distraerse.

Jessica regresó a casa y no encontró a Tiffany por ninguna parte, la llamó, le dejó mensajes y consiguió uno solo de vuelta que no le dijo mucho. De allí se pasó la noche en el sofá, esperándola y teniendo ideas asesinas en contra del supuesto padre de Nayeon, del que ya no recuerda el nombre, para ella ese sujeto es un bastardo mentiroso que no merece vivir.

Pero de ser cierto, ese hombre como padre biológico de su hija y ella únicamente como la que la gesto, es perturbador, le arruina todo lo que se planteó en los últimos meses, la ambición de alcanzar la herencia para dejarla en manos de su hija legítima y más inteligente. Es como si ella estuviera criando al hijo de otro, como si le hubieran puesto el trabajo de educar al próximo heredero, y le molesta, le enfada saber que fue utilizada en lugar de tomar las decisiones de su vida.

Al final no fue libre de elegir su camino, de algún modo le impusieron que hacer.

Una larga noche para Jessica Jung, apenas y concilio el sueño pero tan solo al escuchar voces, se levantó de inmediato en busca de donde provenían, así halló a su esposa, quien cruzó a su lado para ingresar a la casa.

—Fany ¡¿Dónde demonios pasaste la noche?! No pude dormir preocupada por ti. —Le escupe con enfado.

—Te dije que me dejaras tranquila, que necesitaba estar sola. —Ella lleva unas gafas de sol que impiden ver sus ojos.

—¿Y eso que? No puedes pasar la noche quién sabe dónde, eres mi esposa.

—Soy de tu propiedad, lo que me faltaba. —Sonríe de medio lado, mientras niega.