Coincidencias ♥ |Fanfic-Raura|

Cap. 54 Parte II

Laura no lo entendía. Entre más lo pensaba más confuso era, y en realidad ¿qué tenía que pensar? Aquello se había terminado.

Ni siquiera había podido comenzar.

¿Por qué Ethan quería hablarlo ahora? ¿Por qué siquiera había algo de lo que hablar?

—Eso se acabó.

—No...

—Sí. No me presenté a la cita, no llamé, se acabó.

—Pero es que ellos sí llamaron.

Fue como si el mundo entero se hubiera detenido de pronto, antes de que volviera a girar bajo sus pies, tanto, tanto y tan rápido que Laura se sintió mareada.

—¿De qué estás hablando?—preguntó Ross, con suerte para la chica que no podía encontrar las palabras correctas, ni su propia voz estancada bajo el nudo en su garganta.

Ethan suspiró, un suspiro largo y cansado. Cansado de haber ocultado aquello por tanto tiempo.

Pero ¿qué otra opción tenía?

—Fue el día de la reunión, o al menos el día que se supone que tenía que pasar.—comenzó, su voz temblaba mientras lo decía y él se preguntó si alguna vez dejaría de hacerlo. Aquella tarde se reproducía con tanta facilidad en su cabeza que parecía haber pasado ayer. Sábado, el tercer día después de la desaparición de Laura, el mismo que tenía marcado en el calendario como el día que firmaría con Slime Records. El momento que nunca llegó—Tenía permiso de cerrar antes, porque quería... salir a buscarte. Así que cerré y estaba a punto de irme cuando recordé que había dejado mis llaves aquí adentro. Cuando volví mi teléfono sonó. Era la gente de la disquera, preguntándome porqué te habías retrasado tanto y si acaso sabías lo serio que podía ser que llegaras tarde a la firma del contrato.
»Yo lo había olvidado por completo; con todo lo que estaba pasando lo último en lo que pensé fue en tu cita con ellos, y peor que eso, no pude siquiera inventar una excusa coherente para responder a sus preguntas. Me quebré. Tenía muchísimo miedo, pero al mismo tiempo quería darme esperanza, creer que regresarías a casa pronto sin nada más grave que unos cuantos rasguños. Así que se los dije, les dije que estabas perdida, que no te encontrábamos por ningún lado y que no había manera de que te hubieras ido por tu cuenta. Empecé a impacientarme, quería colgar e irme ¡y lo hice!, pero antes ellos prometieron regresarme la llamada más tarde.

Laura estaba abrumada. Era demasiada información para recibir en tan sólo unos minutos y lo peor era que apenas estaba empezando. La historia no terminaba ahí, lo sabía, podía sentirlo. Podía verlo venir en la mirada de Ethan, en la manera en la que este se mordía la mejilla.

Todo él eran nervios.

—Tardaron varios días en volver a contactarme,—siguió—incluso creí que lo habían olvidado también, pero entonces llamaron y me dijeron que, por la gravedad de la situación, querían darte la oportunidad de retrasar la reunión sin mayor problema.—tenía la mirada de Laura encima, no tenía ni que alzar la cara para saberlo, pero eso era lo que más odiaba, que no podía darle la cara, sin importar qué tan buenas hubieran sido sus intenciones cuando hizo lo que hizo—Iba a decírtelo, te juro que sí. Te llamé, pero no respondiste, así que llamé a Ross, y él me dijo lo que estaba pasando. Dijo que algunos días eran buenos, que otros no lo eran tanto, y que estaba siendo muy difícil para ti volver a la normalidad. Me di cuenta de que no podía poner esa presión sobre ti, Lau.—soltó, finalmente sintiéndose capaz de mirarla—No necesitabas preocuparte por nada más que no fuera tu salud en ese momento. Y yo sé que la música es tu sueño, mierda lo sé, y sabía que aunque yo sólo quisiera cuidarte no podía cerrarte esa puerta, así que seguí intentando.