XII. Bésame

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¿Qué... acaba de pasar?

A pesar de la insistencia de Dazai, Chuuya fue el único que terminó cocinando para ellos, y mientras comían, pensaba. Y se dio cuenta de algo. Incluso después de todo de lo había pasado, en realidad Dazai nunca lo había besado. La primera vez, en su habitación, fue Chuuya quien lo hizo. Y la segunda vez,  después de la perseguirse en la calle.

...También había sido él.

Y no es como si Dazai no lo tocara. De verdad, el chico se volvía francamente empalagoso algunas veces, pero nunca así.

Ese pensamiento permanece en el fondo de la mente de Chuuya cuando van a la casa de Oda; Dazai se recargaba en él mientras estaban sentados en el sillón mirando una película de zombies —la favorita de Oda— y aquello lo carcomía por dentro.

Por su mente pasaron un millón de posibilidades. De hecho, el jamás había estado con nadie más antes de Yuan. Tal vez... ¿no era bueno en eso? ¿era diferente, ahora que estaba con un chico? ¿se supone que debería estar haciendo algo diferente?

¿Estaba haciendo algo mal?

Esa era una gran posibilidad. Cuando se besaban, Chuuya jamás sabía qué hacer con sus manos, si debería hacer el primer movimiento, simplemente se movía a tientas en eso.

Dazai era diferente. Siempre estaba relajado, seguro de sí mismo, y probablemente había besado a muchos otros chicos antes—

Un agujero comenzó a formarse en su estómago al caer en cuenta de que, probablemente, todos ellos eran mejores que él.

Ahora, de verdad, de verdad deseaba ser uno de esos zombies a los que les estaban arrancando la cabeza en la pantalla.

El camino a casa fue lento, algo que Dazai no pasó por alto.

Entraron en la casa, y una vez cerrada la puerta, Dazai le dio un golpecito a Chuuya entre las cejas. "¿Qué ocurre?"

Chuuya frunció el ceño, sobándose la frente. "No sé de qué est—"

"Incluso si en verdad odiaste la película o hay algo que esta mal, dímelo." interrumpió el castaño mientras ladeaba la cabeza."

"No es nada." murmuró el pelirrojo, alejando la vista de otro. "Lo estás pensando demasiado."

Intentó alejarse como si quisiera subir las escaleras, pero Dazai lo detuvo sosteniendo su muñeca.

"No creo que lo esté haciendo."

"Bueno, es sólo que—"

"Ni siquiera sabes qué es—"

"¡Ah! ¡Así que sí hay algo!"

"Estaba siendo estúpido" gruñó el pelirrojo.

Y es esto último lo que hace a Dazai fruncir el ceño. Le gusta molestar a Chuuya hasta que el pelirrojo esta al borde de un ataque, pero nunca le ha gustado cuando hablaba de él de esa manera. "Lo que sea, no es estúpido."

Chuuya exhala y se ve avergonzado. Considera inventar una excusa, pero Dazai tiene un don para averiguar cuándo esta mintiendo, así que no tiene mucho caso. "Después de esa noche— nunca hemos hablado de eso... bueno..."

El castaño levanta una ceja. "Bueno— ¿Qué—?"

"Si somos o no..." Chuuya se aclara la garganta. "Si nosotros somos— Si eres mi—"

"No te estoy entendiendo."

El pelirrojo finalmente lo escupe con frustración. "¿Quieres besarme?"

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