Entre Mares

Cap. 13 - Lo Mismo

Luisita se lanzó a los labios de Amelia. No pudo contenerse. Se dejó vencer por el corazón y no por la razón.

Fue un beso suave, delicado, con precaución, como quien está explorando terreno por primera vez, pero cargado de mucho deseo. Deseo de saber más de ella, de conocerla, de saber si podría ser correspondida.

Amelia por otra parte, la tomó desprevenida. No se esperaba ese movimiento de la rubia, ni mucho menos un beso.

Luisi sintió la reacción de la morena y se separó.

-"Amelia, perdón, discúlpame, no debí hacer eso." dijo cabizbaja y avergonzada.

-"Luisita...yo..." comenzaba a decir pero fue interrumpida.

-"Lo se, no digas nada, fue una estupidez de mi parte, una total falta de respeto, no debí nunca hacer eso. No te conozco y no me conoces, y probablemente estoy invadiendo tu espacio personal. Es más, yo nunca había hecho una cosa como ésta, nunca me había pasado esto, y yo de verdad..." decía tratando de explicarse y disculparse.

-"Luisita!!"! dijo alzando la voz para que detuviera todo lo que salía por esa boca. "Que no hay problema" y con los ojos trataba de decirle lo que sentía en ese momento.

-"Cómo que no hay problema? No entiendo" le dijo extrañada y confusa.

-"Eso, que no hay ningún problema en que me hayas besado, porque yo estaba deseando lo mismo, pero contrario a ti, a mi me faltó valor. Parece que me falta valor en varios asuntos" le dijo sonreida. "Pero te confieso que mi reacción fue por la sorpresa, me cogiste fuera de base, no porque no me haya gustado." le dijo a la vez que se acercaba a la rubia y le correspondía de la forma en que debió hacerlo.

Acarició con ambas manos la cara de Luisita y se acercó a besarla.

Luisita recibió ese beso con alivio, ternura y dulzura. Sentía como todo en su cuerpo se estremecía con el mínimo roce. Amelia sentía lo mismo. Cómo volvían esas sensaciones que desde hace tiempo no había sentido.

Se separaron y juntaron sus frentes dándose un momento para recobrar el aire, las pulsaciones y los sentidos. No dudaron en abrazarse. Un abrazo que decía "te encontré y no te dejaré ir". A penas comenzaba un camino, una historia.

-"Yo creo que no sentí bien ese beso. Como que, no se..." le decía Luisita queriendo otro, pues se dio cuenta que una vez ya probado los labios de Amelia, no quería dejar de besarlos.

-"Ahhh...cómo que no sabes?" dijo acercándose otra vez a la boca de Luisita que estaba hecha un flan.

-"Pues sí... mira es que fal..." Amelia no la dejó terminar y aterrizo nuevamente en ella, solo que esta vez ambas lenguas estaban conociéndose y explorando cada rincón, saboreándose la una con la otra.

Un momento muy intenso entre ambas, definitivamente.

-"Y ahora? Mucho mejor?" le preguntaba en un susurro.

-"Oh, si, si... muchísimo, pero muchísimo mejor" le dijo riendo. "Aunque creo que..." le dijo como analizando el momento.

-"No, no, no ya se por donde vienes".

-"Vente!" dijo Luisita agarrándola de la mano e interrumpiendo el sublime momento. "Vamos a lanzarnos otra vez, pero esta vez tú primero! Jaa! Veremos si me ganas!"

-"Prepárate que voy con todo" le dijo alzando su ceja.

Así estuvieron lanzándose un par de veces, nadaron, flotaron observando el cielo azul cubierto de enormes bambúas. La complicidad asomaba entre ambas. Ya era casi medio día entre una cosa y otra.