Cap. 48 - Cajita de Sorpresas

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Amelia estaba un poco atribulada, dándole veinte vueltas al asunto de venirse a vivir a Puerto Rico, e imaginándose otras veinte posibles reacciones de Luisi a esa propuesta. En su mente corría tener plan a, plan b, plan c y hasta la z si era posible. Dado su trabajo, había desarrollado ese pequeño pero a veces gran defecto de sobre pensar o analizar las cosas para así prepararse posibles escenarios, y que no la tomen desprevenida. Sin embargo, el haber hablado con Naya le hizo bien a sus nervios nerviosos que andaban revueltos esa noche. Quería que todo saliera bien.

Mientras Luisi hablaba con su familia, Amelia salió disimuladamente un momento a las afueras del local.

-"Buenas noches, dama, es usted Amelia Ledesma?" preguntaba un joven con su guitarra en mano.

-"Sí soy yo! Recibí su mensaje y salí lo más pronto que pude. Tienen todo listo?" preguntaba ansiosa.

-"Sí ya estamos. Cuando usted guste. Comenzamos nosotros con Las Mañanitas y usted nos sigue luego con la otra canción?" preguntaba aquel chico elegantemente vestido de charro mexicano.

-"Sī, hacemos eso"afirmaba Amelia.

Los caballeros comenzaron a tocar los primeros acordes de Las Mañanitas mientras se abrían paso entre los invitados. Amelia les acompañaba con algo de nerviosismo y timidez. Dudaba si fue buena idea el ponerse a cantar frente a toda esa gente cuando solamente lo hacía mientras se bañaba o en una fiesta de amigos con kareoke. Ya era muy tarde para arrepentirse.


Hoy por ser día de tu santo te venimos a cantar.
Que linda está la mañana en que vengo a saludarte
Venimos todos con gusto y placer a felicitarte.

El mariachi se iba acomodando en el centro de la pista al ritmo de aquella melodía icónica de los cumpleaños mientras Luisita caminaba hacia ellos sonrrojada con aquella sorpresa.

El día en que tu naciste nacieron todas las flores -(Amelia miraba a Luisita con una sonrisa de lado a lado confirmando esa línea de la canción)-
Y en la pila del bautismo cantaron los ruiseñores.

Estas son las mañanitas que cantaba el rey David
A las muchachas bonitas se las cantamos así
Despierta mi bien despierta, mira que ya amaneció
Ya los pajarillos cantan la luna ya se metió.

Toda la gente de la fiesta cantaba a todo pulmón aquella ranchera de celebración y aplaudieron al finalizar.

-"Damas y caballeros, buenas noches. Somos el Mariachi Los Camperos y queremos felicitar a la cumpleañera! Un aplauso para ella por favor!" exclamó aquel chico con su guitarra.

-"La siguiente canción es una muy especial y va dedicada sola y exclusivamente a la cumpleañera. Y aunque no somos una banda, le haremos el honor a la canción. Espero que la disfrute, señorita" dijo muy cortés quitando su sombrero de charro y haciendo un saludo en reverencia a Luisi. Amelia por su parte se paraba al lado de él con el micrófono en sus manos.

Luisi tenía una cara de asombro al ver lo que Amelia estaba haciendo. Su corazón latía a toda velocidad, tanto así que sentía que se le salía del pecho. La emoción la embargaba de sobremanera.

Entre MaresWhere stories live. Discover now