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Caminaron en silencio por los pasillos de la mansión, Louis detrás de Harry con sigilo. El alfa se detuvo por unos segundos cuando pareció sentir la presencia de alguien más cerca, ocultando al omega detrás de el y preparándose para quién sea que apareciera detrás de aquella puerta.

—Si tienes que disparar, hazlo. Y si te digo que corras, lo haces.— dijo Harry rápido y serio, había un ruego silencioso en sus ojos verdes que hizo que Louis asintiera de inmediato.

La puerta se abrió y Harry alzó el arma listo para disparar.

—¡Oh Dios, estas vivo!— fue lo primero que escucharon y Louis largó todo el aire que estaba reteniendo, alegrandose cuando vió a Liam abrazar a Harry.

—No me permiten morir aún.— dijo mirando a su omega con cariño.

—Tenemos que salir de este lugar lo antes posible.— dijo Alex, que estaba parado en silencio observando a todos.— Los hombres de Samuel están por todas partes, si nos encuentran con Louis estamos perdidos.

En ese momento se escucharon disparos no muy lejos de dónde estaban y todos se pusieron a alerta, levantando sus armas y caminando con discreción hasta el final del pasillo, dónde un grupo de alfas los sorprendieron.

—¡Por fin los encuentro!— dijo una voz conocida que apareció detrás de Louis. Todos en la habitación se detuvieron.

Harry se puso frente a Louis, apuntándole a Samuel con el odio irradiando de el.

—Aléjate.— dijo prácticamente gruñiendo y Samuel sonrió dando un paso más cerca y sacando un arma para apuntarle al alfa, quién no se movió ni un centímetro ante la amenaza.

—Creo que tienes algo que estoy buscando.— dijo tranquilo, observando al omega.— Vas a entregarmelo por las buenas, o voy a dispararte.— agregó, quitándole el seguro al arma, alertando a Louis.

—No sé que quieres de el y tampoco me importa, pero vas a tener que matarme para ponerle un dedo encima.— respondió Harry enojado y sin dejar de apuntarle a Samuel, quién no dejaba de sonreír con malicia.

—Aún sigues con vida porque me gusta pelear contigo, eres un alfa terco y tienes un omega muy bonito bajo tu protección, pero mis hombres solo tienen que apretar el gatillo y todo terminaría.

Para este punto Liam tenía tres alfas encima, impidiéndole moverse y Alex estaba a un costado, observando con nerviosismo como su hermano era un completo psicópata. Y Louis tenía miedo, como nunca antes, por su cabeza pasó aquel momento en dónde le dijo a Harry por primera vez que lo quería, habían pasado por una situación parecida y el se había resignado a aceptar que algún día se saldrían con la suya. Quizás hoy era ese día.

—Iré contigo.— habló Louis a espaldas de Harry, sorprendiendo a todos los presentes.

—No, no irás a ningún lado.— respondió Harry impidiéndole el paso.

Louis lo sintió en su pecho, la desesperación, la tristeza y la ira del hombre que amaba, lo sentía tan claro que las lágrimas salieron sin permiso cuando tomó el rostro del alfa entre sus manos y juntó sus labios en un beso amargo pero tal vez el más sincero que había dado alguna vez.

—Te amo.— le susurró y Harry negó con la cabeza, tomando sus brazos para que no se moviera.— Lo siento.

Con las pocas fuerzas que tenía el el cuerpo se liberó del alfa y le apuntó con el arma que tenía en sus manos, caminando hacia Samuel, quién observaba todo con admiración. Recordaría la mirada del alfa toda su vida, la traición viva en sus ojos cuando dos hombres lo sujetaron a pesar de sus intentos por liberarse y llegar a su omega nuevamente.

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⏰ Última actualización: May 07, 2023 ⏰

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security ; larry stylinson. [omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora