security ; larry stylinson. [omegaverse]

31

Harry había estado ausente todo el día, no podía concentrarse en absolutamente nada si su cabeza se encontraba en otro lugar, muy lejos de allí.

Entre todos habían logrado armar planes y extrategias para permanecer tranquilos el mayor tiempo posible hasta que logren averiguar aunque sea una mínima cosa de quién los estaba atacando. Necesitaban ganar tiempo, debían mantenerse ocultos y esperar a que el enemigo no ataque antes que ellos. No sonaba como un buen plan pero, no tenían otras opciones mejores.

-Bien, espero que hayan entendido todo lo que hay que hacer.- dijo Mark cerrando la carpeta frente a el y todos asintieron.- Algunos socios de confianza se han ofrecido a ayudar con la investigación, conocen a Magnus y a su hijo Samuel, también a que Robert nos ayudará desde Rusia y Margot desde México.- todos se miraron entre sí, no sabiendo si aquello realmente era un buen plan. Fue Liam el que decidió preguntar.

-¿Eso no es peligroso?- preguntó con duda y Mark pudo sentir la pesada mirada del ojiverde sobre el.

Se atrevió a mirarlo devuelta, el alfa no estaba de acuerdo con hacer público aquel problema, podía notarlo.

-Son todos de absoluta confianza, saben que no pueden traicionarme.- respondió con seguridad y se puso de pié soltando un largo suspiro.- Debo irme, espero que todo les haya quedado más que claro.- se despidió soltando lo último con un tono más duro que antes con su mirada fija en Harry.

Luego se retiró de la casa con sus dos guardaespaldas que lo habían estado esperando en la puerta desde que habían llegado. Cuando escucharon la camioneta partir, todos soltaron un suspiro pesado.

-Esta loco, no puede ir contándole esto a todo el mundo, es peligroso.- dijo Matt preocupado, el no podía contradecir a Mark pero la verdad era esa, era realmente peligroso.

-No lo entiende, jamás lo entenderá.- dijo Charles desde el otro lado de la mesa, el llevaba más tiempo trabajando con el alfa y lo conocía más que los chicos que se encontraban allí con el.- No le importará la opinión de nadie, si el lo hace, encontes para el está bien, no hay peligros ni equivocaciones.

-Es un idiota.- soltó Harry aún con la mirada dura y su voz sonando más grave de lo normal, aún estaba enojado. Cada cosa que hacía Mark lo ponía aún peor.- Y encima no se da cuenta.- agregó.

-Debemos seguir sus órdenes y hacer nuestro trabajo diez veces mejor que antes, si más gente sabe de esto, más peligro corre su hijo.- dijo Lucas también sonando serio y todos asintieron de acuerdo, incluso Harry.

-Lucas tiene razón, no debemos dejar que Louis pague por las ideas estupidas que tiene su padre.- respondió Liam soltando un suspiro cansado.

-A partir de ahora solo confiamos entre nosotros, en nadie más, ¿De acuerdo?- dijo Harry observando a todos asentir.

[...]

Cuando llegó la hora de la cena, el rizado supo que Louis no iba a bajar a comer, asique preparó todo en una bandeja para subirlo a la habitación. Debían hablar, o al menos el iba a tratar de explicarle porqué había dicho todas aquellas cosas que había escuchado. Había estado inquieto el resto de la tarde porque sus cuerpo entero picaba por subir las escaleras y hablar con Louis, en el fondo de su pecho podía sentir que el omega no estaba bien y eso le dolía, necesitaba calmarlo y aclarar aquel mal entendido.

Cuando estuvo frente a la puerta, tocó suavemente antes de entrar y encontrar todo a oscuras. Para su suerte, pudo llegar a la mesita de luz sin tropezar con nada y dejar allí la bandeja con comida y también encender la luz.

Su corazón se contrajo al ver a Louis en el centro de la cama, casi perdido entre la cantidad de mantas que lo cubrían del frío. Se sentó en el borde de la cama y apoyó su espalda contra el respaldo de madera, tratando de hacer el menor ruido y movimientos posibles para no asustar al omega. Lo observó detenidamente por unos largos segundos antes de posar una de sus manos sobre su espalda y moverlo con delicadeza para despertarlo.