Doce

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A la mañana siguiente, cuando decidí ir a la escuela, me sentía totalmente inquieta y extraña. Odiaba a estos niños inmaduros y el drama adolescente en el que vivía, que todo lo que hacía era alimentar rumores con el fin de ganar amigos. 

No podía pasar desapercibida porque la gente murmuraba en cada paso que daba. Odiaba ser el centro de atención, pero desde que habíamos comenzado la escuela, me había vuelto de repente el foco de todos. 

Liam apretó mi mano y entrelazó sus dedos con los míos. Cualquiera pensaría que éramos pareja, pero solo éramos los mejores amigos del mundo.

No quería entrar a mi clase y darme de lleno con la realidad por lo que miré a Liam, tenía una mirada tan serena que me hizo tranquilizarme. Maite, a mi lado, mensajeaba por el celula,  pero sabía que también iba a apoyarme. Entramos, y lo primero que divisé fue el asiento final de clase, por lo general vacío, el de Harry. Esta vez no era la excepción, pero me sorprendí que a su lado, Zayn Malik estaba sentado desprovisto de interés. Del otro lado, estaba el muchacho rubio que siempre estaba con ellos: Niall Horan. Era un chico simpático, a diferencia de los dos mencionados y siempre estaba sonriendo así que sabía que si hubiera estado con esos dos, me hubiera caído bien.

Zayn me sonrió, pero yo volteé la cara rápidamente. Era de esos chicos de los que siempre te han dicho que te mantengas alejada. A diferencia de Harry, Zayn tenía algo oscuro con él, tal vez era una simple caratula, pero era lo que trasmitía. Nunca le había hablado porque nadie, a diferencia de Harry y Niall, se le acercaban, y no me interesaba hacerlo.

Las clases transcurrieron normales, dentro de lo que cabe. Aunque, sin saber por qué, cada cierto tiempo miraba hacia atrás. A ver si mágicamente ese asiento vacío se llenara y Harry me mirara con cinismo. 

El receso llegó tan rápido que ni lo sentí venir. Liam se acercó a mí y me dijo que tenía que ir a no-se-dónde para un trabajo de Inglés. Maite se fue al gimnasio, a practicar con las porristas y, a pesar de que no lo quise, me quedé sola... Bueno, no sola, sino con todas esas personas murmurando sobre mí. 

Fui al baño a lavar mi cara y me encerré en un cubículo para sentirme en paz, fue en ese momento cuando escuché la risa hueca de varias chicas entrando al baño. No estaba de humor para aguantar ningún comentario sucio sobre mí. 

— ¿La vieron? —escuché que una comenzó a decir, con rabia—. Te juro que no sé como Harry le hace caso, es horrible. No es para nada como todas las chicas que han estado con él. Ella no es sexy, ni siquiera es simpática y está gorda.

Me miré a mí misma y la rabia subió por mis entrañas. Yo... no... es decir, me miré de arriba abajo, yo estaba bien. ¿Qué diablos se creían?

— Creo que está gorda por su embarazo —algunas chicas chillaron—. Dicen que Harry la dejó embarazada, por eso no han venido ninguno de los dos a la escuela durante estos días. Supuestamente los padres de ella lo apresaron para que cumpliera con la manutención del chico,pero él no quiere.

Pero, ¿qué diablos se estaban inventando estas chicas? 

— Bueno, si Harry la ha dejado embarazada, no es problema de él, es de ella porque él es un ángel mientras que ella es... una perra.

Abrí mi boca para protestar y me preparé para salir, pero ya las chicas se habían ido. Inspiré y exhalé varias veces, tratando de calmar la rabia que sentía. Maldición, ¿cómo diablos podrían inventarse cosas tan estúpidas? Salí del baño y choqué con el mismísimo Zayn Malik, ¿qué diablos...? 

El chico sonrió hacia mí, ni siquiera quise prestarle atención, así que traté de pasar por su lado para ignorarlo, pero me tomó del brazo. 

— Suéltame —le dije, pero no lo hizo. 

— Gracias a Dios que saliste, por poco tenía que haber entrado a la fuerza y sacarte —respondió. 

Levanté una ceja y forcejeé para que me soltara, pero... ¿qué se creía este estúpido? 

— Suéltame —Zayn solo rió y empezó a caminar arrastrándome a su lado. No quería causar una escena por lo que luego de un tiempo me aquieté y él me llevó hasta el campo de fútbol detrás de la escuela. Empecé a asustarme, pero él aflojó su agarre. Podía escapar si quería, aunque la curiosidad pudo más conmigo. 

Vi a Harry practicando con la pelota de fútbol. Zayn se encaminó a las gradas, conmigo pisandole los talones pues ya me había soltado. Se sentó y miró al campo de fútbol, yo también lo hice. Harry parecía molesto practicando solo, corría demasiado rápido de un lado al otro, golpeaba la pelota como si estuviese rabioso. Mis ojos solo lo enfocaban y me pregunté que le pasaba para que actuara de esa manera. 

— Es un buen chico —me dijo Zayn sin mirarme—. A pesar de que haga estupideces muchas veces, es un buen chico —me pregunté de qué hablaba, pero supe que era de Harry. Parecía como si fuera su padre—. Tú también eres una buena chica, pero estás rodeada de todas las personas incorrectas aunque crees que son las mejores del mundo —me miró fijamente, su mirada me intimidó—. Y ustedes no pueden vivir el uno sin el otro —me dijo, pero volteó su vista a Harry que seguía corriendo, mirando al suelo, como si no se cansara nunca. 

— No se de qué hablas, Zayn.

— Pensé que no sabías mi nombre —me mostró sus perfectos dientes en una sonrisa. Se paró y mis ojos dieron a parar a los suyos—. Harry es la persona más obstinada del mundo, pero hay una sola persona en el mundo que puede sacarle el malhumor —me quedé mirando a Harry que cada vez más perdía la fuerza para seguir corriendo, Zayn bajó de las gradas y me gritó: — Si vas ahora, te darás cuenta de quién es esa persona y ve, antes de que se desmaye —llamé a Zayn varias veces, pero él siguió su camino. Me quedé ahí parada viendo como Harry poco a poco bajaba el nivel de velocidad hasta que paró. Cuando cayó al suelo, mis piernas comenzaron a correr por sí solas hasta que me encontré frente a él en el suelo. Me agaché hasta su altura, respiraba pesadamente con los ojos cerrados.

— Harry, ¿estás bien? —abrió los ojos para mirarme. No era el odio, era la mirada que me había dado cuando tuvo fiebre esa noche. Mi corazón latió con fuerza cuando volvió a cerrar los ojos y lo moví de nuevo, los volvió a abrir y me dio una sonrisa, pero mi corazón paró cuando dijo, por fin: 

— ¿Recuerdas cuando éramos niños?

____

HOLAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!! 

*fiestas de cinco segundos*

¿Por qué creen que Zayn dijo eso? ¿Por qué creen que se comporta de esa manera extraña? ¿En qué pasos anda Liam? Y holaaaaaaaaaaaaaaaaaaa... HARRY LE PREGUNTO SOBRE CUANDO ERAN NINOS!!! :D

My feeeeeeeeeeeeelings!!! :D 

Bueno... seguiremos viendo estos asuntos en los próximos capítulos...

P.D: Recuerden al número 17 que Harry golpeó.


Editado. 6 de Agosto, 2020.

Mi perdición | Harry Styles | COMPLETA |Место, где живут истории. Откройте их для себя