Mi perdición | Harry Styles | COMPLETA |

Cuarenta y tres

De nuevo, denle las gracias benditas a Aurelyn que apuesto a que si en su casa hubieran minutos, estuviera llamandome para que completara todo el asunto de la novela de un tiro. 

Quedan siete capítulos...

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— Harry, no creo que...

Sus manos comenzaron a jugar con mi sujetador, la otra mano comenzó a acariciarme la mejilla. Cerré mis ojos dejándome llevar por las sensaciones que me producía su contacto. Me besó los labios una vez más y luego se separó. Se quedó quieto, sus manos no se movían y su boca no tocaba la mía.

— Abre los ojos —me dijo suavemente. 

Lentamente los abrí para encontrarme con esos ojos esmeralda que me podían mandar a un manicomio.

— Necesito que me mires —murmuró lentamente con esa bonita boca. Creo que la cordura se había ido a un lugar muy lejos de mi cabeza—. Necesito que me digas si esto es lo correcto para ti, para los dos.

Y, de repente, con eso me trajo al mundo real. 

— Harry...

— Ya lo sabía —me dio una sonrisa suave y se colocó a mi lado, lo único que se escuchaban eran nuestras respiraciones bailando una canción alocada—. Te esperaré, de todas maneras. Esperaré a que estés lista.

Mi corazón se detuvo y lo abracé suavemente. 

— Te amo, Harry —fue lo único que dije y sus brazos se tensaron a mi alrededor. Sus manos comenzaron a temblar y empezó a acariciar mi cabello lentamente.

No era la primera vez que le decía que lo amaba, pero... esto se sintió diferente. 

— Yo también te amo, Carly —murmuró suavemente a la vez que presionaba sus labios sobre mi sien. 

. . .

Harry se fue a su casa unas horas después de que teníamos la tarea completa y él tenía su estómago lleno. Me dijo algo sobre no dormir conmigo y tenía mucha razón en no hacerlo, pues como estaban las cosas, no era correcto. 

No pude dejar de pensar en lo que había pasado porque se sentía bien, de muchas maneras. Sus labios sobre los míos, sus manos viajando por mi estómago, enredándose en mi pelo. Sus manos en mi mejilla, sus labios contra mi cuello, las palabras que me susurraba al oído. 

Tomé una almohada y la apreté. Quería gritar porque al mismo tiempo se sentía incorrecto. Porque no estaba preparada, porque tenía miedo y por millones de razones que iban a la par con lo que estaba bien, no sabía que hacer. 

Tomé mi celular y revisé el whatsapp. 

Yo:
Hola, mejor amiga que me abandona por su novio :p

Le hablé a Maite y a los pocos segundos me respondió.

Bestie♥:
¿No será al revés?

Yo:
Puede que lo sea, pero te amo. 

Bestie♥:
Yo más!<3 ¿Cómo van las cosas con Harry?

Yo:
Eh... de eso iba a hablarte, pero es mejor por teléfono. Coje la llamada.

Corrí a buscar el telefono inalámbrico y de nuevo subí a mi habitación para tirarme en la cama a hablar tranquilamente.