˗ˏˋ Kazōmi Ohga ෆ ReLIFE ˎˊ˗

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            Según los cálculos de (TN), debería de sacar poco más de cincuenta puntos en el examen de Matemáticas. Hoy les entregarían ese examen, y mentiría si dijera que no está nerviosa, no es una chica estudiosa ni nerd, pero sacaba buen puntaje para ser la tercera del salón con mejor calificación en el semestre pasado, Kazōmi y Kariu estando primero que ella.

           Pero lo que vino no se lo esperaba nadie. (TN) recibió el examen, de cierta manera no le sorprendía pero...

          "¿¡QUÉ!? ¿¡Cómo... Cómo pude sacar solamente 0.5 en el examen!? ¿¡Soy la única con calificación tan baja!?". Volteó hacia atrás. Sentada atrás de los siempre estaba sentado Kazōmi, para su fortuna estaba distraído con el tal Arata. El pelinegro alzó su examen.

          "¿¡Cuatro!? No, no, no". Miró a An, ella por lo general sacaba mala calificación, y si a (TN) le fue así a ella le iría peor ¿no?

           "¿¡Dos!?". Sentía su visión borrosa y el corazón le latía más rápido. Sería sólo cuestión de tiempo para que Kazōmi le preguntara sobre su calificación. Siempre lo hacía, para saber cómo iba y comparar calificaciones, ¿ahora qué le diría? ¿se burlaría de ella? Eso la lastimaría bastante, el rubio después de todo era su crush, sentiría bastante vergüenza, más de la que ya siente ahora mismo.

—¡(TN)! —le llamó An sacándola de sus pensamientos— ¿...(TN)? —dijo con un tono diferente de preocupación.

—¿Por qué lloras? —preguntó Kazōmi.

           (TN) se tentó las mejillas y efectivamente estaban mojadas, estaba llorando y no se había dado cuenta, con razón sintió la vista nublada. Ahora era el centro de atención de entre An, Arata, Kariu y, sobre todo, Kazōmi. Ella se levantó torpemente, estaba muy nerviosa y temía que en cualquier segundo se soltara llorando a mares. Agarró su mochila con un movimiento rápido y brusco, el sentir las miradas de ellos sobre ella provocaron que sus movimientos fueran aún más torpes que cuando tomó el rápidamente examen, en un intento para que nadie lo viera, se le cayó dejando expuesta la penosa calificación. Obviamente miraron el examen y no era necesario que mirara el rostro de sus compañeros para saberlo, fue fácil con sólo oír el suspiro de sorpresa que dejaron escapar. (TN) sintió como su cabeza se ponía más caliente. Se agachó y agarró el examen ahora sin tener cuidado, no le importó que lo haya arrugado. Salió del salón apresuradamente metiendo a fuerzas el examen, que ahora era una bola de papel, en su mochila.

           Bajó la mirada andando por los corredores de la preparatoria. No quería tener que escuchar los "¡(TN)! ¿qué te pasó?", "tú no sacas ese tipo de puntaje", "¿por qué reprobaste tan feo?". Se sentía patética por llorar por algo así, parecía que hacía de una simple calificación el fin del mundo. Pero no podía evitarlo, ella siempre había sacado calificaciones buenas, de ochenta a cien, ¿cómo pudo tener tan estrepitosa caída? Sentía que se le caía la cara de vergüenza.

           Estaba tan concentrada apenándose de sí misma que no se dio cuenta de que Kazōmi la llamaba hasta que él la agarró del brazo para llamar su atención. (TN) sintió su rostro enrojecerse y sentir un nudo en el estómago; le hablaba y se llevaba bien con él, pero no quería escuchar lo que tenía que decir sobre su calificación.

—Te acompaño, (TN) —dijo el caminando al lado de ella; no era la primera vez que se iban juntos, de hecho lo hacían frecuentemente ya que vivían por la misma dirección. (TN) no dijo nada, sólo aceptó—. Uhm... sé que no querrás hablar de esto pero--

—No, no quiero hablar —bajó la mirada y apresuró el paso.

—¡Espera, espera! No... Yo quería ofrecerte ayuda, como un tutor.

            (TN) siguió andando, el rubio ta la había alcanzado. Le daba mucha vergüenza, pero si acepta podría pasar el examen y además pasar más tiempo con él. Asintió con la cabeza.

—¿C-Cuándo empezaríamos? —preguntó aún con la voz un poco distorsionada por haber llorado.
—¡Hoy mismo! —tomó la mano de (TN) y trotó hasta la casa de la chica.

           Kazōmi y (TN) pasaron unas horas en el estudio. No era necesario que ella le presentara al chico a sus padres, ya lo conocían, tuvieron que hacer una mentira blanca porque (TN) no quería decir la verdadera razón por la que el rubio estaba ahí, obviamente.

           (TN) sintió que le entendía mejor a su amigo que al profesor, bueno, Kazōmi sí le explicaba las cosas incluso le tenía paciencia, cosa que su maestro no hacía. En las veces que el chico le dejaba ejercicios para comprobar que entendía lo que le enseñaba, él se tomaba la libertad de escribir algo en una hoja de su cuaderno, de vez en cuando lanzándole sonrisas que derretían el corazón de (TN) sin que él tuviera la más mínima idea de lo que esos gestos le hacían sentir.

           A la hora que tenía que marcharse le dio la hoja.

—Te dejé algo escrito en tu cuaderno para que comprendas mejor las cosas, —dijo cuando ya estaba en la entrada principal para irse— espero que te sirva.

           Le guiñó un ojo, aunque (TN) creyó habérselo imaginado. Kazōmi se despidió y se fue. La chica fue a su habitación a revisar la hoja. Estaba doblada algo que se le hizo un poco inusual, ¿por qué no sólo dársela normal? (TN) decidió que sólo fue una manera extra de distraerse mientras que ella hacía los ejercicios.

Desdobló la hoja y decía:


"(TN).

Quiero decirte al oído tantas cosas preciosas que estoy sintiendo por ti.

Que te quiero, que te adoro.

Tú eres la mujer que he soñado, que me haces muy feliz.

Que cuando no estás, me falta el aire.

Eres la razón de mi existir.

— Kazōmi Ohga"


           (TN) se enrojeció tanto que parecía que tenía calentura. ¿Cómo era esto posible? Kazō-kun era bastante despistado cuando se trataba de gustarle a alguien y no parecía el tipo de persona que se declara primero. No sabía cómo reaccionar, su crush de hace años se le había confesado por medio de una carta, siempre creyó que a Kazōmi le gustaba Kariu, y que nunca se fijaría en alguien como ella.

           Era una carta corta, pero la guardo como a un tesoro.



Por si no lo sabían, la canción del Marcianito se llama "Nunca me Faltes" de Antonio Reales

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Por si no lo sabían, la canción del Marcianito se llama "Nunca me Faltes" de Antonio Reales. xd

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Publicación: mar. 01, 2017

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