˗ˏˋ Roy Mustang ෆ FMAB ˎˊ˗

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           Un pequeño Roy le daba palmaditas en la espalda a una niña que recién había conocido en ese momento; encontró a la chiquilla siendo víctima de bullying por parte de dos bravucones que eran un par de años mayor que ella. El azabache que caminaba por la zona, viéndose imposible de ignorar dicho suceso, se acercó a espantar a los niños quienes salieron corriendo después de recibir unas cuantas amenazas por parte de Roy.

—Ya... Ya pasó —intentó consolarla, se sentía algo incómodo en ese ambiente, la menor no dejaba de llorar y no tenía idea de qué hacer, incluso pensó en solo dejarla ahí e irse.

—E-Es que... ¡Waah! —no era capaz de terminar ninguna de las oraciones que había intentado formar por culpa sus lloriqueos.

           Un poco inseguro por la situación, puso su mano encima de la cabeza de la niña y la movió para que volteara a verlo.

—Escucha —dijo con un tono levemente irritado—, prometo que te protegeré siempre que estés en peligro, ¿de acuerdo? Así que deja de llorar.

           La niña paró su llanto cuando escuchó la promesa del azabache, era la primera vez que alguien se preocupa tanto por ella además de sus padres. Por otro lado, Roy no era realmente consciente del peso de sus palabras, se podría decir que en ese momento incluso prometió aquello solo para que la nena se calmara y dejara de romper sus tímpanos con su ruidoso llanto. Aunque el niño no sintiera en un cien porciento lo que declaró, desde ese día empezó a juntarse con la pequeña, principalmente porque ella era quien lo buscaba.

           Sin que ninguno de los dos se diera cuenta, su amistad creció con el paso de los años viéndose casi a diario hasta que la ya no tan pequeña (TN) tuvo que partir hacia una aventura en busca de aprender un tipo de alquimia en especial, había aprendido lo suficiente por su cuenta ya, pero era hora de avanzar más.

           Pasaron los años, la chica generalmente le mandaba cartas a Roy hablándole sobre sus avances (especialmente cuando consiguió convertirse en Alquimista Estatal) y lo emocionada que estaba en verlo de nuevo y salir por ahí como en los viejos tiempos. No fue hasta un día en el que, en vez de mandarle una carta, se comunicó con él por teléfono para darle la grata noticia de que regresaría a Ciudad Este pronto y, además, le tenía una sorpresa, aunque el azabache ya se imaginaba de qué se trataba.

           En un día con mucho trabajo como cualquier otro, la puerta de la oficina de Mustang se abrió de golpe con un fuerte ruido seguido de un grito de júbilo.

—¡ROOOY! —exclamó la joven con alegría y entró a pasó firme y apresurado hasta estar enfrente del escritorio del hombre al que buscaba, sacó su reloj que la certificaba como Alquimista Estatal enseñándolo en alto— ¡Reportándome! ¡Cuanto tiempo sin vernos! —el coronel tardó en responder unos segundos, intentando procesar su colorida entrada mientras que los demás miembros de su unidad los miraban con confusión.

—Vaya, bienvenida -finalmente habló esbozando una sonrisa ladeada—. Definitivamente ha pasado mucho tiempo.

 Definitivamente ha pasado mucho tiempo

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LෆVE TRIP ──Anime One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora