ERICK WILLIANS

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ERICK.

Escucho unos pasos aproximarse, se perfectamente de quien, o quienes, se tratan esos pasos. Alzo la mirada encontrándome con la de Sthel, la cual aparece en la cocina, seguido de Paul y Ashley, sonrió levemente al sentir la mirada de esta última clavada en mi.

-Vendrá en breve- Le doy una mirada rápida a Sthel y asiento.

Ella sigue su camino, seguido de Paul, el cual me da una mirada, completamente extraña para mi, Ashley va tras ellos pero en silencio  me levanto del taburete y me paro detrás de ella.

-Eres idéntica a Andrus- Susurre. Ella se detiene y me enfrenta, noto cierta confusión en su rostro, sonreí ante ello. -¿Cuantos chicos te tiras en un día?- Me fulmina con la mirada.

-¿Que haces aquí?- Su voz sono calmada, noto cierto nervios en ella. -Nadie te quiere en esta casa, ¿lo sabes cierto?- ¡Auch!, de alguna forma sus palabras me afectaron un poco. Ella se cruza de brazos a lo que sonreí sin gracia.

-Tu madre no opina lo mismo que Andrus y... Que tú- Digo lo último en un susurro, pero me arrepiento ya que ella podría malinterpretar, cosa que no quiero.

Alzo las cejas con sorpresa al ver como se gira ignorandome por completo...

-No tienes vergüenza- La escuchó decir mientras avanza.

Antes de que lograra salir, en un movimiento rápido, la tome de la muñeca, se giro hacia mí sorprendida y confundida a la vez. El grito de Sthel, llamándola, me altero un poco pero aún así no la solté. Ashley miro a sus espalda...

-Voy mamá- Grito.

-No, no tengo vergüenza- Ella me miro nuevamente, yo miraba sus labios, esos rosados... -Que bueno que lo sabes- Sin darle tiempo a nada, la bese, ella no me correspondió y luche porque lo haga.

Con sus brazos intenta separarse de mi, pero en un movimiento rápido rodeo sus caderas atrayéndola a mi pero eso no la detiene. Esta inquieta, menea su cabeza a ambos lados y eso me complica el seguir besándola, así que me rindo y la miro directamente a sus ojos oscuros.

-Eres una fiera- Le sonreí. La observo, su mirada viaja a mis labios y no puedo borrar la sonrisa de mi rostro al ver como se muerde el labio inferior.

Mujeres...

-Sueltame- Me sorprendo al escuchar su tono.

Frunzo el ceño y por alguna razón la imagen de Leonardo llega a mi menta. Me había enterado que ella y Leo... Era una estupidez.

-¿Porque con él?. ¿Porque Leonardo?- Digo. Ella me mira confundida y apenada.

La observo atento a su respuesta, ella solo me mira en silencio, abro la boca para decir algo más pero alguien me interrumpe...

-¡Mamá!- El grito de Andrus nos tomo por sorpresa a ambos. Ashley se tenso y en acto reflejo se alejo de mi.

¿¡Le molesta que la vean conmigo, pero le importa una mierda que la vean con Leo!?.

La miro con enfado, mientras que ella confundida.

La verdad no me molesta que ella este con algún chico. ¿porque ha de molestarme?. Ella no me pertenece. Pero si me molesta el hecho de que ese chico sea Leonardo, ¿¡Porque tuvo que escogerlo a él entre tantos!?¿No podía haber elegido otro!?. Esta bien que no quiera nada serio con Ashley, ni que la este tomando enserio... Pero ella de alguna forma me atrae y con eso me basta para quererla hacer mía. ¡Pero claro!, tuvo que entrometerse el muy idiota de Leonardo, ¿¡no podía haber sido otro chico, el cual no halla pertenecido a mi pasado!?. Lo siento por el muy capullo, pero creo que a Ashley me la doy yo. Tiene lo suyo. Lo siento por él.