Decepción

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Capítulo XVII

Al igual que una bomba de tiempo, Sangwoo sentía su pulso acelerarse conforme los minutos pasaban. Había avanzado deprisa, alejándose así de la casa del omega, ya que había sentido un escalofrío recorrer su cuerpo entero. Sin fijarse en las señales de alto o en las luces intermitentes de los semáforos, condujo con extrema rapidez para poder llegar a su casa. Sentía que su nariz le picaba al igual que su garganta, y eso era porque había respirado por un largo rato el repentino y desagradable aroma del omega que se encontraba a su lado. El chico se encontraba cabizbajo, envuelto con la sábana percudida que cubría por completo su cuerpo, dejando a la vista sus pequeñas y delgadas piernas laceradas.

Sangwoo había quedado perplejo ante la cruel imagen del chico. El alfa no sabía muy bien cómo interpretarlo, pero una furia crecía dentro de su estómago. Sí, se sentía muy enojado al ver que algún alfa idiota se le había adelantado, sus planes ahora estaban arruinados.

Detuvo el vehículo al comprobar que había llegado a su casa. Sus dos manos no soltaron el volante y con el rabillo del ojo contemplaba al omega que había sacado de su casa.

«¿Por qué diablos he traído a Bum aquí?», se preguntó Sangwoo al volver a percibir aquél aroma a podrido.

El alfa tapó su nariz y su boca con su mano derecha para poder abrir deprisa la puerta y salir del vehículo. Sus piernas caminaron lentamente hacia el lado del copiloto para poder abrir la puerta y hacerle señas al omega para que saliera del auto, pero el chico no respondió. Bum estaba quieto, tenía la cabeza gacha mientras jugaba con sus dedos con la sábana que tenía entre ellos. El omega respiraba pausadamente, mordía con ansiedad su labio inferior como si tratase de abrirse la carne para poder saborear su propia sangre. Sentía un hueco dentro de su pecho, quizás haya sido angustia, pero se sentía diferente, sentía que algo le faltaba y no sabía exactamente qué era.

Sangwoo giró los ojos fastidiado, torció los labios para poder coger uno de los delgados brazos del chico y sacarlo a la fuerza del auto. El alfa cerró la puerta aguantando siempre la respiración, ya que debido al aroma que despedía Bum, no había sido capaz de aguantarlo por un segundo. El omega dejó escapar un chillido de sorpresa al sentir el tacto del alfa, sintió que los crueles dedos del hombre se sumían a su piel como aguja al satín.

Sangwoo cerró el automóvil, volvió a tomar el brazo del chico para poder avanzar hacia la pequeña reja de herrería que estaba situada justo en la entrada de la casa. Ambos hombres pasaron el jardín para llegar a la entrada principal en donde el más alto puso la contraseña para abrir la puerta. El alfa empujó al chico adentro de su vivienda para que de esa forma no le estorbara para poder cerrar. Sangwoo puso ambas manos sobre su cara para frotársela mientras que Bum se había quedado parado en la entrada sobre el tapete que cubría el piso de madera. Sus dos grandes ojos grisáceos se enfocaron en la expresión de horror del alfa y por un momento le inquietó, ya que nunca había visto así a su compañero antes.

—Sangwoo... —comentó en voz muy baja, casi como un susurro.

El alfa subió su cabeza para poder contemplar al chico que tenía frente a él. El castaño no podía creer lo que había hecho, por un momento se había arrepentido por la acción tan apresurada que había tomado, pero al recordar el frágil cuerpo de Bum tirado y sin ninguna protección, su propio instinto le ordenó que debía de protegerlo, y además; estaba aquella mordida.

—¡La mordida! —exclamó Sangwoo sorprendido llevando ambas manos hacia el cuello del chico.

Bum se alejó al ver que el alfa se abalanzaba hacia él, sus pies tropezaron por culpa del escalón que había en la entrada y no pudo el evitar caer sobre el piso de madera. La sábana que llevaba encima se abrió, revelando de inmediato su cuerpo pálido lacerado; las marcas de la hebilla de un cinturón aun estaban presentes, eran como pequeños bultos rojos que se habían esparcido estratégicamente sobre sus piernas.

Killing Stalking Omegaverse fanfic (Miedo)Where stories live. Discover now