Killing Stalking Omegaverse fanfic (Miedo)

Instintos

Hola a todos nuevamente. Muchas gracias por esperar, se tardó un poquito porque muy amablemente, la usuaria, Vicmar62, me hizo el favor de revisar el capítulo y corregir algunas cosas que no se leían muy bien. Agradezco mucho su ayuda y todos los consejos que me ha dado. Muy amablemente me ha compartido una guía de buena ortografía, redacción y gramática que le dieron en una de sus materias en la universidad. Me ha dado el derecho de compartirlo, así es que estaré iniciando otro proyecto bajo la supervisión de ella para poder compartir la muy útil guía. 

Agradezco nuevamente a todos aquellos que se pasan a leer, comentar y votar. Muchas gracias, lo aprecio mucho. Sin más demoras, espero que disfruten del capítulo. 

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Capítulo XIX

El calor aumentó considerablemente dentro del auto de Sangwoo. Seung Bae podía sentir con facilidad su piel húmeda por culpa del sudor que resbalaba deprisa por la parte trasera de su cuello. El chico aprovechó en más de una ocasión, el poder limpiarse la humedad que sentía debajo de sus labios, retiró con parsimonia el sudor con uno de los costados de su mano derecha sin dejar de ver al alfa que conducía con la vista fija sobre el camino. En ninguna ocasión, desde que había entrado al auto, Sangwoo hizo el intento de voltear la mirada para poder clavarla justo en el rostro malhumorado del moreno. 

Seung Bae pensó que aquella pelea dentro de la universidad había finalizado, jamás imaginó que el castaño quisiese seguir con aquella disputa tonta, de todos modos, él ya tenía la promesa de Bum de ir juntos al extranjero, así es que no le importaba mucho que digamos. 

El moreno colocó una mano sobre su frente al pensar de pronto en su intercambio, ya que Hee Jin inundó de repente sus pensamientos, y eso fue lo que le provocó el torcer los labios en forma de molestia y rechinar sus dientes disgustado.

Sangwoo había podido detectar una leve anomalía en el olor que provenía de su acompañante. El alfa intuyó de alguna forma, que Yang ya sabía el porqué estaba dentro de su auto, ya que al ver que había abordado con tanta facilidad sin siquiera rechistar, le haría su trabajo mucho más sencillo. Pero en parte era extraño, ya que sí Yang se imaginaba lo que había sucedido, nunca se hubiese atrevido a subir, era casi como una condena a muerte para él. 

Sangwoo colocó su mano derecha sobre la palanca de velocidades para poder cambiar y disminuir la rapidez con la que había estado manejando durante todo ese tiempo. 

—¿Dónde están tus lentes? —preguntó desinteresado al percatarse que el hombre en más de una ocasión, había tratado inútilmente de subir con la punta de sus dedos un objeto inexistente; era una manía que tenía cada vez que sentía que el plástico comenzaba a deslizarse hacia abajo con la grasa que había depositada sobre su tabique nasal. 

—Yo los estrellé por equivocación —contestó un tanto confundido, ya que Sangwoo no había ido por él sólo para poder hablar de los objetos que le hacían falta. Sabía que toda su vida, su rostro, siempre se había caracterizado por esconderse delante de aquellos anteojos de pasta gruesa y oscura, y quizás Sangwoo apenas lo había notado.

—¿Por qué? —preguntó sin despegar los ojos de enfrente.

—Un accidente —vociferó un tanto molesto.

—Ya veo —confirmó con el mismo desinterés de un principio. 

Seung Bae permaneció callado, con el ceño fruncido y los labios apretados. Estuvo a punto de gritarle a Sangwoo y salir del auto, aunque este estuviese en marcha, no le importaba mucho a decir verdad, ya que aquél comportamiento tan extraño, era lo que le hacía sentirse incómodo y en cierta parte molesto.