Capítulo XV

28 5 2
                                    

Preludio, Segunda fase

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Preludio, Segunda fase.

--¡¡No!!, ¡¡Déjenlo ir!!-- Las últimas palabras de la joven parecieron ser en vano.

La bestia oscura había batido su espada en dirección a la cabeza de aquél caballero albino que sacrificaría su propia vida con el fin de asegurar a la joven de las profecías.

Parecía ser que aquella tensa atmósfera de muerte había llegado nuevamente frente a la joven dictada y la siguiente víctima de aquél silencio sepulcral sería su mismo compañero y protector.

Sin embargo.

Un estruendoso grito se hizo presente en el ambiente como el aullido emitido por una manada de lobos bajo la luz de la luna, el mismo grito que hizo a los árboles y al propio suelo temblar, las bestias con grandes cuernos y robustas patas habían retrocedido instintivamente, hasta que un siguiente sonido los devolvió al mundo, el mismo sonido que hacía el acero de la hoja al chocar contra otro objeto extremadamente afilado, la espada de aquella bestia había sido detenida centímetros antes de llegar a la cabeza del albino.

Fragmentos de acero salieron despedidos al aire y la espada se había partido por la mitad por obra de algo desconocido, algo que se dejó ver en aquél mismo momento en el que el cuerpo cansado de aquél caballero se precipitó a tierra.

La chica se había liberado de aquella atadura en un parpadeo, ella misma había detenido aquella espada con el dorso de su mano derecha, la mano que en el momento de entrar en contacto con aquél frío metal debía haber dejado de existir, sin embargo.

Aquella mano no era normal, era considerablemente más grande que la otra, era de un color completamente blanco como el armiño, parecía brillar aún sumido en la inmensa oscuridad, esa mano no tenía lo que podía ser considerado como dedos sino más bien afiladas garras plateadas, las mismas garras que habían quebrado aquella espada con el choque, la mano blanca yacía levantada mientras los fragmentos de la hoja caían al suelo.

La bestia oscura retrocedió, el horror que antes formaba parte de aquellos jóvenes ahora formaba parte de las bestias, una a una fueron retrocediendo, la joven con la blanca mano yacía de espaldas frente al albino tirado en el suelo.

--...--

Siguiendo las órdenes de su Rey, con respecto a acabar con la existencia del Trueno Blanco, la bestia del medio se armó de valor y su pies emitieron aquél eco sobre la piedra, sin espada, la bestia atacaría a la joven.

Pero un segundo rugido que conmocionó todo a su alrededor llegó y se infiltró en cada sector de aquél sombrío lugar paralizando a las bestias mientras las hojas de los árboles cayeron y las aves nocturnas se elevaron al aire, pronto, las pisadas de aquellas bestias fueron audibles con gran prisa, una a una, fueron huyendo, presas del terror ante aquél rugido que superaba incluso a cualquier otra criatura de grandes fauces que habían visto antes.

El Trueno Blanco.Where stories live. Discover now