Good Morning, Nam

Uno🍃

Primer día de clases.

Decir que estaba nervioso, era mentir. El omega no era así. Estaba decidido a llegar a la escuela y adaptarse a cualquier tipo de situación.

Ése día había amanecido lloviendo, pero a pesar de que muchos alumnos rezaron para que lloviera a cántaros, al final no lo hizo.

El castaño avanzaba vigorosamente entre los pasillos.

Ya había ido a la oficina del director para retirar sus horarios y completar algunos papeles.

Los maestros lo recibieron de una grata manera. Ya sabían de su historial de buenas notas y comportamiento, así que algunos maestros ya lo amaban porque quizás sería la clave para que el curso logrará subir las notas.

El timbre sonó anunciando la hora de entrada. Varios pares de ojos se posaron en el al momento de entrar en el salón. Sus miradas lo siguieron hasta que llegó a un asiento al azar para ocuparlo, al fondo y al lado de la ventana.

"¿Qué está haciendo?"

"Pobre, era muy guapo..."

"¿Qué crees que sea?"

"Esperemos que Kim no lo deje tan mal..."

Los murmullos llenaron el salón a la vez que el omega sacaba sus libros y acomodada sus cosas.

La puerta del salón fue abierto bruscamente y un imponente alfa de pisadas fuertes se abrió camino.

Los alumnos lo miraban en silencio intentando ser discretos y que el alfa no los notara.

Kim NamJoon.

Mejor conocido como el abusivo de la escuela con el que nadie querría meterse. Era cruel, despiadado y sin un poco de sensibilidad.

Sus notas eran tan malas como su actitud. Podría decirse que era el típico caso de chico malo que si llegase a terminar la escuela sería un milagro.

Se metía con quien sea. Sin importar que fueran omegas, betas o alfas. Nadie tenía derecho de superarlo o siquiera dirigirle la palabra.

Sus únicos amigos eran Min Yoongi y Jung Hoseok. Otros dos alfas que también parecían disfrutar del dolor ajeno. Ellos nunca intervenían cuando NamJoon le daba una paliza a alguien, y eso, es lo que a la mayoría de personas le molesta.

Ya había sido expulsado más de una vez, pero nadie sabía cómo hacía para regresar.

Algunos rumores decían que en primer año de secundaria, golpeó a uno de último año tan fuerte que su cara quedó desfigurada y no pudieron arreglársela.

Pero eso eran. Rumores.

El alfa se acercó hasta el omega siendo seguido por las miras de las demás personas.

Jin no le prestó atención hasta que su grave y rasposa voz se escuchó en el gran silencio que había.

—¿Qué haces ahí?

Su cabeza estaba agachada para poder verlo, mientras que el omega elevó la suya para ver de quien se trataba.

Tez morena, cabello rubio, labios gruesos, músculos marcados y una voz para morirse. Nada mal.

—¿Cómo?

—Quítate de ahí.

—Esto...¿Perdona?

­—¿¡Qué parte no entiendes pedazo de mierda!?—Gritó golpeando su mano contra la mesa, haciendo que el impacto hiciera saltar algunos lápices del omega.—Éste es mi lugar, QUI-TA-TE.