Good Morning, Nam

Treinta y tres🍃

Cuando las vacaciones terminaron, SeokJin esperó atento por la respuesta de Namjoon, la cual nunca llegó.

Pensó que podrían hablar en la escuela, pero tampoco había asistido. Y en el trabajo brilló por su ausencia. Así que no pudo evitar pensar que de alguna manera, estaba evitandolo.

Pero claro, Namjoon tenía otras cosas más importantes en su vida que el omega, así que sólo se decidió por esperar pacientemente. Todo se aclararía.

Pese a ello, la preocupación aumentó cuando esos primeros dos días de ausencia se conviertieron en una semana, y luego en dos.
Ni sus mensajes o llamadas tenían respuesta, tampoco conocía la dirección del alfa como para ir a visitarlo y saber a qué se debía su tan abrupta desaparición.

Incluso hasta sus compañeros se preguntaban sobre él y si estaba enfermo o algo.

Tener ese lugar vacío junto al suyo le provocaba tanta desilusión.

Se habían peleado el primer día por quién se sentaría allí ¡Y ahora el maldito se ausentaba sin dar señales de vida, dejando ese lugar vacío!

Ohhh...definitivamente lo iba a oír...

Luego de asegurarse de que esté bien.

Para el final de la última semana, SeokJin había ido a entregar su trabajo a la sala de profesores para el concurso, cuando una conversación proveniente de la oficina del director llamó su atención.

—¡Este se ha convertido en algo inaceptable, Dong Wook!

El castaño se asomó a ver por la vidriera de la puerta, encontrándose con el profesor Lee siendo regañado.

—Si señor, lo siento señor...—Se inclinó dos veces, mostrándose muy arrepentido

—¿¡Cómo crees qué los padres nos tomarán cuando sepan que un sólo alumno trae tantos problemas!?

Lee sólo se mantuvo callado sin elevar su cabeza.

—¡Está más que claro que debí expulsar a Kim NamJoon ni bien tuve la oportunidad!—Suspiró como si ya estuviera cansado de tener siempre la misma charla—Ésta vez...—Habló ahora más tranquilo—Ya no habrá vuelta atrás. Kim NamJoon será expulsado permanentemente.

—¿Qué...?—El profesor se levantó incrédulo—Pero señor...

—Dime Dong, ¿No crees qué ya te haz preocupado lo suficiente por NamJoon? Lo haz defendido desde que pisó ésta institución

—Lo sé, sin embargo...

—Eres uno de los mejores profesores, ya no insista con algo que no tiene arreglo, mejor preocupate por cosas más importantes...tu familia por ejemplo. Tu segundo hijo acaba de nacer ¿No es así? NamJoon nunca ha valorado tu esfuerzo, mira nada más como te paga siempre

Un silencio sepulcral invadió la habitación. SeokJin estaba seguro de que había una buena razón por la cual el rubio no estaba asistiendo, e iba a entrar a decirle sus cuatro verdades al director en el momento que el profesor Lee fue firme en defender sus pensamientos.

—Yo nunca me rindo por nada del mundo, (Nombre).Lo sabes bien. Si tengo que intentar las cosas más de una vez, con gusto lo haré. Y Namjoon no será lo primero con lo que me rinda, ha estado presentando notables cambio este año. Sus calificaciones son muy altas y ya no se demuestra tan hostil como otras veces...Además, siquiera le haz dado la oportunidad de explicarse

Cuando el director pareció no tener una respuesta clara de inmediato, Jin decidió irse y dejar que el profesor Lee llevara el asunto por sus propios medios.