I'm (Not) A Hero (Pausada Hasta Nuevo Aviso)

Capítulo 34

                      [Aiden's POV]

                        [Actualidad]

Entonces el hombre posó su mano sobre mi hombro y mi alrededor volvió a cambiar: De pronto me encontraba en una habitación con dos puertas; una enfrente y otra detrás de mí. Las paredes estaban pintadas con tonos granates y negros, mientras que las puertas eran de una madera muy oscura. Por alguna razón, el aire estaba muy cargado y me estaba costando respirar.

— Por aquí —me indicó el camino—. Y ni siquiera intentes levantar la mirada.

Entonces entramos por la puerta que teníamos delante, y al hacerlo me encontré con un amplio espacio y unas cuantas escaleras un poco más lejos.

Nada más entrar por la puerta sentí que mi cuerpo se volvía más y más pesado, por lo que no pude evitar caer sobre mis rodillas. Apenas podía respirar... y en la habitación había un aura que me provocó que comenzase a temblar sin control.

— Amo, necesito que valore algo —dijo el hombre que me había llevado hasta allí mientras miraba al frente.

En ese momento decidí mirar con quién estaba hablando: alcé la mirada todo lo que mis fuerzas me permitieron y, al hacerlo, me encontré con una gran nube de oscuridad entre la cual no se podía ver absolutamente nada: lo único que podía distinguir eran dos brillantes ojos rojizos.

De pronto, el hombre que me había llevado hasta allí me propinó una patada, lo que provocó que me cayera al suelo sin poder evitarlo.

— Te he dicho que no levantases la mirada: Te encuentras ante el Señor del Inframundo, muestra un poco de respeto.

— No pasa nada —dijo una voz entre toda aquella oscuridad—. Hace tiempo que he oído hablar sobre este chico, y puede resultar interesante utilizarlo.

Aquella era una voz grave y firme, lo
suficiente como para estar seguro de que no se trataba de alguien demasiado joven: seguramente perteneciese a alguien de unos treinta y muchos o cuarenta y pocos años.

—¿Qué me recomienda hacer, amo? —preguntó el hombre.

— Préstale una armadura y que pelee con vosotros, puede que incluso llegue a ser útil —dijo la voz.

— Entendido —respondió el hombre—. Me lo llevaré ahora mismo de aquí y lo prepararé todo lo antes posible.

— Antes de que os vayáis —nos llamó la voz—. Si todo sale bien y consigue hacer un buen trabajo, dale esto como recompensa.

Entonces una especie de tarjeta salió volando hacia nosotros, la cual el hombre agarró al vuelo.

En ese momento me arrastró hasta el exterior de aquella sala y cuando recuperé las fuerzas volvimos a la tienda de campaña en la que estábamos antes.

— Toma —me dijo el hombre tirándome una armadura al lado—. Póntela lo antes posible, tenemos mucho que hacer.

Decidí hacerle caso, así que me puse la armadura. A pesar de que parecía muy pesada resultaba muy ligera, permitiéndome moverme sin limitaciones.

— Te explicaré cómo funciona esto —dijo el hombre—. Para empezar, esta armadura te protegerá en gran medida contra ataques de oscuridad pero no te vuelve invencible, por lo que debes ir con cuidado

—¿Ataques de oscuridad? —pregunté confuso—. No creo que muchos [Héroes] vayan a utilizar ese tipo de técnicas.

— Calla y escucha —me dijo la mujer de las gafas desde detrás de mí.