La Vengadora

Capítulo 10

Finalizada la Audiencia, después que los cuatros osados desaparecen a través de la puerta, escoltados como criminales, es momento de que se abra la Sesión de Debate.

Jack Kang se encuentra ahora en frente de nosotros, atrapando cada par de ojos que encuentra con su mirada.

—Que la honestidad se refleje en sus opiniones, estimados veraces.

Siempre me gustaron los debates. Cualquiera puede ponerse de pie, sin importar la edad o el puesto, y opinar sobre el tema en cuestión. Puedo sentir la adrenalina recorriendo cada centímetro de mis venas.

Para mí, hoy es un debate especial. Siento una necesidad de ayudar al resto de los osados y, con ello, también ayudar a Celeste.

Pero la decisión no depende de mí.

Depende de lo que todos mis colegas veraces desean decir.

Y, entre ellos, hay muchos matices.

—Estamos en medio de una guerra. Debemos darnos cuenta que nuestra posición es demasiado importante como para ser ignorada. Decidir nuestro bando definirá si sobreviviremos.

—Eso es una estupidez. ¿Una guerra? ¿Sobrevivencia? Hay que estar bastante paranoico para pensar en semejantes ideas. Estamos exagerando. Solo estamos siendo testigos de un rozamiento entre dos facciones que no es de nuestra incumbencia.

—¿Rozamiento?¡Eso sí que es lo catalogaría como una estupidez! ¡Hay armas de por medio! ¡Hay cadáveres! ¡Esto podría terminar muy mal para todos nosotros!

—No, no y no. Abnegación proveía de mano de obra para la ciudad. Sin ellos, estaríamos prescindiendo de un recurso fundamental y nuestro sistema caería en pedazos. El hecho de pretender eliminar a una facción demuestra un acto subversivo.

—Hay una guerra en camino. Tenemos la verdad en frente de nuestras narices.

—Les recomiendo a todos que busquen un diccionario y definamos juntos la palabra guerra.

—¿Darles techo a Osadía? ¿Qué tal si estamos frente a una trampa? ¿O una manipulación por parte de ellos?

—Me veo en la obligación de recordarle a mi compañero que la simulación antes presentada ha tenido el propósito de desmentir teorías conspiratorias como esa.

—¿Y si no son ellos, sino sus compañeros quienes lo planean? No podemos saberlo.

—Han sido testigos de la mayor parte de los hechos. Vimos en las pantallas que el grupo que se dirigía a Erudición ya está allí. Creo que podemos sacar cierta ventaja de su presencia si los tenemos con nosotros.

—La creación de facciones tiene múltiples propósitos. Uno de ellos es crear un espacio donde los individuos con las mismas capacidades puedan convivir en un ambiente, con armonía. Si dejamos que los osados ingresen a nuestra sede, nuestra convivencia puede verse afectada.

—La Sede de Verdad no es un espacio público. No podemos simplemente darles comida y espacio donde dormir solo porque no tienen a dónde irse.

—Necesitamos igualdad de condiciones. Si ellos van a quedarse, necesitamos que nos provean de sus habilidades. El manejo de armas y el aumento en la vigilancia podría ser el precio para su estadía.

—Osadía es peligrosa. Pueden usar esas armas en nuestra contra.

—O podrían usarlas a nuestro favor.