Capítulo 39: El cuchillo de la bota

1.6K 132 52
                                    

En la nota de autor os dejo información sobre "¿SOLA?".

|Narra  ________|

He perdido la noción del tiempo. No sé desde cuándo llevo aquí encerrada. Solamente me dejan salir una hora al día y acompañada de cinco guardias armados hasta los dientes. Por lo menos me dan buena comida y me proporcionan ropa. Solamente he visto una vez más a Jackson y fueron cinco minutos porque lo único que tenía que hacer era cambiarme el esparadrapo de la nariz. Por suerte, esta última ya se me ha curado del golpe que me asestó el puto guardia.

Durante todo este tiempo en El Olimpo he estado planeando el asesinato de Mason. Hay algunos días que se presenta y me obliga a ir a su despacho para hablar. He estado fingiendo que me gusta este sitio y he tenido que actuar como si no odiara a todos y cada uno de los hombres de Mason. Poco a poco, va confiando en mí. Debido a esto último, me ha dicho que vaya hoy a hablar con él, a solas, a su oficina.

Creo que hoy va a ser el día. Hoy pienso matar al hijo de puta que le dio fin a la vida de Eva, de Ellie y de Abraham.

Me doy una larga ducha porque sé que, después de lo que voy a hacer en un par de horas, será la última. Observo mi armario, el cual han rellenado con ropa, y escojo unos vaqueros claros y una camiseta blanca. Me coloco las botas, situando el cuchillo en el lateral para tener fácil acceso. Como tengo el pelo corto, no tarda nada en secarse.

Llamo tres veces a la puerta y me abre un guardia apuntándome con el arma. 

- Mason me ha dicho que vaya a su despacho. - Digo, fingiendo una sonrisa. Odio tener que actuar como si no le desease la muerte a todas y cada una de las personas que viven en El Olimpo.

El hombre asiente con poca gana y me deja pasar. A continuación, cierra la puerta y me sigue por el pasillo, apuntándome de manera sutil con su metralleta. Avanzamos por el estrecho camino hasta llegar a una puerta de metal con un cartel en la mitad de la misma. Esta señal contiene las siguientes palabras escritas en negro: "Despacho del Elegido". Todo muy poco narcisista, nótese el sarcasmo. 

Me acerco hasta la puerta y es el guardia quien llama por mí. Oigo unos pasos hasta que la entrada se abre. Mason me mira con una amplia sonrisa dibujada en su repugnante rostro. Le indica con la cabeza al hombre que me ha acompañado que nos deje solos y me hace entrar en la oficina. Tomo asiento en una silla de cuero que está en frente de una mesa de madera de roble.

Dentro de este sitio da la sensación de que el apocalipsis es tan solo un cuento chino. Como si el mundo ahí fuera continuara siendo completamente normal.

Mason se sienta al otro lado de la mesa y junta ambas manos encima de esta última.

- Últimamente estás muy feliz. - Dice Mason. - ¿Ves como no era tan complicado hacerse a la idea de que este es tu nuevo hogar?

Guardo silencio porque temo decir, en caso de que abra la boca, algo que arruine mi plan.

- He estado esperando estas tres últimas semanas a que te terminaras de acomodar. - "¿Ha pasado tanto tiempo?", pienso nada más oírle decir la frase.- Pero veo que estás lista. - Analiza mi rostro, como si estuviera buscando algo.- Aquí, en El Olimpo, podrías vivir como una reina. Ya has visto la buena comida y la ropa que te hemos estado proporcionando. Al igual que las instalaciones.

- Gracias por todo eso. - Digo, una vez más, fingiendo una amable sonrisa.

- Supe en cuanto te vi atacar a mis hombres en La Zona R que tendrías un sitio asegurado en mi comunidad. - Me comenta, tumbándose hacia atrás en su fabulosa silla de cuero negro. - Si decides unirte a mí, te doy mi palabra de que tendrás todo lo quieras. - Me extiende la mano.- ¿Qué me dices?

Actúo como si de verdad me lo estuviera pensando.

- Acepto. - Extiendo el brazo para poder estrecharle la mano.

Mason estalla en carcajadas y se levanta de golpe. Dando un fuerte golpe a la mesa con ambas manos.

- ¡Esto hay que celebrarlo! - Se dirige a un estante sofisticado y empieza a sacar botellas de alcohol y vasos.

Es el momento.

Mason sigue hablando mientras yo saco con mucha agilidad el cuchillo de mi bota. Me levanto en silencio y me acerco con disimulo hasta el hombre, quien sigue contándome lo contento que está porque haya aceptado su oferta de mierda. Escondo el cuchillo detrás de mi espalda y llego hasta Mason.

- ¿Quieres ver qué preparo? - Pregunta divertido, sin despegar la vista de la mezcla que está haciendo.

- Sí, me ha entrado curiosidad. - Respondo.

Agarro a Mason, sin que este se lo espere, con toda mi fuerza, y le clavo el cuchillo en medio del pecho. Retuerzo el arma para hacerle más daño.

- ¿Sientes la impotencia de no poder hacer nada, hijo de puta? - Le susurro en el oído, escupiendo más veneno que palabras

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¿Sientes la impotencia de no poder hacer nada, hijo de puta? - Le susurro en el oído, escupiendo más veneno que palabras.

- Zorr...

Le tapo la boca porque alguien ha llamado a la puerta. Unos segundos después, alguien la abre con una fuerza inmensa. Veo a diez guardias entrar con un aparato para romper la entrada de metal. 

- ¡Cogedla! - Me separo de Mason de inmediato y trato de esquivar a los guardias. Uno me agarra con fuerza del pelo y me lanza contra el suelo. 

Alguien me asesta un rodillazo en el abdomen, otro un puñetazo en la mejilla. Recibo un golpe tras otro hasta que todo se empieza a ver borroso debido al dolor que recorre todo mi cuerpo. Trato de enfocar la vista en el cuerpo de Mason, pero ha desaparecido. Hago un intento inútil por levantarme, pero alguien me estampa la cabeza contra el escritorio.

Y ahí se acaba todo.


-----------------------------------------------------------------------------------------------

¡Nuevo capítulo!

Veréis, he estado corrigiendo las faltas y editando de manera profesional tanto "Santa Claus viene a visitarte" como "¿SOLA?". Cuando termine de corregir esta última os recomiendo, encarecidamente, que la volváis a leer. He añadido muchísimas cosas que, lo notaréis si la habéis leído hace mucho tiempo, dan un toque más realista a la historia.

También, si no habéis leído "Santa Claus viene a visitarte" y os gusta el terror, os agradecería muchísimo que os pasaseis a leerla.

De todos modos, en el tablón de mensajes os he dejado información sobre TODAS mis historias y los días de publicación.

Un besazo,

Mire.

DESPUÉS (2ª temporada de ¿SOLA?)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora