ALTO CONTENIDO EN SPOILERS DE LA PRIMERA PARTE "¿SOLA?".
Cuatro años han transcurrido desde que _______ Hatson fue dada por muerta por su anterior grupo.
Todo su pasado está basado en una mentira.
_______, junto a su nuevo equipo, tratará de olvida...
Jackson no quiso esperar a recuperarse del todo, por lo que al día siguiente nos pusimos en marcha. El viaje duró una hora, como predijo Jackson. Nos bajamos del coche y puedo ver lo tenso que se encuentra Jackson. Lleva mucho tiempo sin ver a su gente así que entiendo sus nervios. Yo estuve años sin saber nada de mis seres queridos.
- Jackson, todo va a ir bien. - Le dije, tomándole del brazo.- Sé lo que se siente.
- ¿Y si están muertos? Mason ha podido cobrarse la venganza. - Responde mi compañero. Me cuesta verle sin su fachada de tipo confiado.
- Tío, le lanzaste una puta granada. A saber si está muerto. - Trato de animarle.- Además, estoy segura de que ya habrá venido a buscarte y habrá visto que no estabas. ¿Qué razón tendría entonces para matarles si no estás tú para verlo?
Jackson me sonríe, un poco más aliviado. Nos situamos, Jackson, Ezekiel, Richard y yo, en frente de una enorme puerta metálica. Unas murallas de metal protegen el interior de la comunidad, al igual que El Reino. Un hombre castaño asoma su cabeza por una torre que está al otro lado de la muralla y que es un poco más alta que la misma.
- ¿Qué queréis? - Pregunta el desconocido, apuntándonos a todos con un rifle. Richard hace el amago de sacar su arma, pero Ezekiel lo detiene. El castaño nos examina a todos hasta que se topa con Jackson.- No me jodas.
Desaparece de nuestra vista y, segundos más tarde, la puerta metálica se abre. El castaño asoma, una vez más, la cabeza por el hueco.
- Jackson, ¿enserio eres tú? - Pregunta el vigilante.
- No, soy un fantasma. - Bromea Jackson y le miro mal.- Claro que soy yo, Jordan.
El tal Jordan sale a abrazar a su viejo amigo y no puedo evitar pensar en La Zona R. Me muero por volver a verles a todos. Aunque falten algunos.
Jordan nos permite pasar. Los Santos es una comunidad increíble. Hay filas de casas de piedra, huertos, establos, granjas, parques... Esto parece el paraíso. La gente nos mira, bueno, miento, mira a Jackson.
Avanzamos por las calles. Nos detenemos varias veces porque la gente se acerca a abrazar a Jackson para decirle lo mucho que le han echado en falta. Después de una corta caminata, nos plantamos en frente de una casa de piedra. Las cortinas están echadas por lo me es imposible contemplar el interior del edificio desde fuera.
- Yo tengo que irme, así que ahora te encargas tú. - Le dice Jordan a Jackson.- Me alegro de que estés de vuelta.
Jackson le sonríe. Este último llama a la puerta de la casa y, unos segundos más tarde, la misma se abre. Una mujer preciosa, de unos treinta años, con el pelo cortado un poco más arriba de los hombros y este siendo de un castaño clarito, nos recibe. La anfitriona se queda boquiabierta al ver a Jackson.
- ¡Jackie! - Exclama antes de tirarse a sus brazos. Se quedan un par de minutos así y miro a Ezekiel, quien sonríe abiertamente.
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