Stranger《 》 Min Yoongi (COMPLETA) ✔

TRIGÉSIMA NOVENA NOTA

TRIGÉSIMA NOVENA NOTA

Traje brochetas de cordero, fue mi forma de probar discretamente si comía. Todos amaban las brochetas de cordero. Antes lo había visto ingerir líquidos, nada de sólidos.

Yoongi se negó siquiera a dar un mordisco del rico potaje que le ofrecí aludiendo estar libre de sentir hambre. Con los líquidos resaltó era distinto, alude necesitarlos sobre todo por costumbre ya que el agua terrestre reemplazan cierto producto presente en su planeta. Son parecidos, aun así tienen cierto componente distinto. 

Le hice saber del  buen nivel de comida que logramos desarrollar en todos los años de humanidad. Ante su negativa usé el argumento que estaba en el planeta azul para conocer a los humanos y parte importante de nosotros era tener alimentos balanceados, por lo que era su deber conocer el combustible que daba energía al cuerpo humano, su correcto funcionamiento. Incluso dije que existían personas que basaban sus emociones en base de estar hambrientos o satisfechos luego de unos exquisitos aperitivos.  

《Su proceso alimenticio es tan básico. Debieron preocuparse más por la medicina que el sabor de la comida. Si lo hubieran hecho no la necesitarían. Ni siquiera la fauna en mi planeta esta tan atrasado》

Estaba orgullosa de la creación de los diversos platillos que la humanidad puede ofrecer. Cada  país del planeta tierra podía ofrecer una gran variedad de comidas con los recursos que producían, usaban los ingredientes producidos en sus tierras cosechadas por sus agricultores, distribuidas a sus regiones en camiones, llegando a un mercado donde alguien compraría lo necesario para alimentar a los suyos, cocinaría las recetas de sus antepasados que irían  mejorando. En cada bocado la tradición de un pueblo se transmitía, dejando la identidad de sus naciones plasmados en ellos. Con la globalización la experiencia podía ser compartida. Así de valiosa era la comida. Nada simplificada. Nada subdesarrollada. En un plato una gran historia podía ser contada. Yoongi desconocía todo lo que implicaba. 

Acabé aplastando una de las brochetas contra su boca, sin tener alternativa mordió el trozo de la carne. Los sabores inundaron su paladar y pudo conocer una de las mejores cosas que tenemos en este mundo. Yoongi disfrutó de las brochetas de cordero. Acabo una, luego se hizo cargo de la segunda y llegó la tercera. Los acompañamientos de vegetales también los devoró. 

Le expliqué sobre la existencia de las personas que aún apreciaban demasiado el terreno de sus cultivos. Le conté mi experiencia cuando viaje por el norte del país, el cariño de los abuelos  hacia sus campos. 

《Criticaba sus escaso desarrollado en estos años, quería que hubieran seguido nuestros ritmo y el de muchas otras civilizaciones. El proceso por el que están pasando en parte de su evolución. Su forma de aprender y aportar al universo. Entiendo porque otros seres del espacio vinieron visitaron a sus antepasados y no les quitaron la gracia de conservar sus tierras y trabajarlas. Fue lo contrario. Les enseñaron que podían trabajar en conjunto. Respetándola, incluso adorándola. Adoraron la tierra y los elementos que les brindaban vida, pero olvidaron esas enseñanzas. Como has dicho unos pocos lo hacen en la actualidad. Un camino largo de viva puede quedarles pero sus acciones están llevándolos a la decadencia. Cuando se den cuenta sea ya será tarde》

 Las consecuencias de esos daños pueden verse en el presente, por toda la faz de la tierra brotaban las señales. La indiferencia con el medio ambiente seguía sin ser atendida con emergencia. Esta vez lavando los platos procuré utilizar la menor cantidad de agua posible.

Cuando retorné Yoongi estaba recostado en el sofá. Ahí se me ocurrió que si le era posible  comer sin tener la necesidad podía dormir del mismo modo. 

《Ni siquiera voy a intentarlo. Me es absurdo intentar siquiera dormir》

Poniéndome pesada logré que cerrará los ojos, presionó tan fuerte los ojos que era evidente lograr que duerma sería un rotundo fracaso. 

Hice lo que me hubiera gustado mi madre hiciera por las noches, acaricié su cabello como si se tratará de un pequeño niño. Yoongi abrió los ojos al contacto y volvió a cerrarlos. 

Recibió mis caricias dejando las protestas. 

《Nadie antes me ha tocado de la forma que estás haciendo tú. Mi sentir es complicado de explicar》

Podía decir lo mismo pero lo guardé para mí.

《Las caricias en Bantang están extintas, ni siquiera los que encuentran su compañero ideal pueden compartir caricias. La necesidad de mostrar su afecto se perdió hace tanto, por eso estamos pretendiendo volver a traerla. Incluso con la gran oposición que existe, muchos piensan que es un retroceso. Si me preguntan creo que nos hemos estado perdiendo tanto, tanto que el universo debe estar avergonzado de nosotros》

Mis dedos siguieron hundiéndose entre sus cabellos después de ello. 

Yoongi concilio el sueño con mis caricias. 

Aun cuando estuvo dormido seguí con las caricias.