Capítulo 33: Conciencia

41 2 1
                                    

No he querido escribir en mi diario, sobre todo estar con mi carcelera, Celeste. Pero, no puedo culparla. Fue sincera conmigo y siempre estaré agradecido con ella por toda la contención que me ha dado. Además, sé que Necroty está decepcionada de mí, pero ella debe entender que tengo sentimientos, a pesar de ser un gato negro. He estado tan deprimido que no paro de llorar, ni de pensar. 

Si hubiera podido, habría abandonado mi trabajo por otro que me permitiera estar cerca de mi familia. No todo es trabajo, dinero y aventuras amorosas. Debí valorar lo que tuve, cuando lo tenía. Ahora, todo se ha ido y no paro de gritar. No quiero, ni pienso dejar de hacerlo. 

Estuve conteniendo mis pensamientos y mis palabras, durante tanto tiempo. No permitiré que nada ni nadie vuelva a cuartear mi libertad. Al leer estas palabras, me vas a odiar o serás capaz de entenderme. Cualquiera de las dos opciones son válidas, pues no estaré en éste mundo, cuando las hayas leído. No podrás decirme cuánto me odias o cuánto me comprendes. 

¿Sabes? La peor decisión de la humanidad ha sido ceder su conciencia a un Dios que no existe. Sólo era el invento de los dictadores que manipulan la conciencia de las personas, hablándose a sí mismas. Cuando rezas, tu Dios no entrega las respuestas, sino que eres tú mismo quien resuelve tus problemas. Sin embargo, eres tan ciego que no te das cuenta de ello. La Iglesia es la prisión de las almas perdidas que buscan el por qué de sus vidas. 

La bases de una institución que se denomina a sí misma "santa" están podridas. Nació en el barro y seguirá sumergiéndose en él, porque las personas que la componen basan todo en mentiras, riquezas y apariencias. Utilizan los rezos de la gente como uno de tantos pseudo-fundamentos para justificar lo injustificable. 

¿Te digo algo? Dejar de creer y tener el poder de tu propia conciencia es un acto revolucionario, ya que va más allá de la política y de todo lo que conoces como ideología. Comandarás tu propia vida y harás el verdadero bien al mundo. No tendrás la vista nublada.

La naturaleza fue reemplazada por el desarrollo y el progreso, pero la sociedad desconoce que la Tierra nunca ha sido de ellos. Ella está recuperando su lugar, progresivamente. Si los humanos son realmente imbéciles, provocarán un calentamiento global que no tendrá retorno. 

La verdad, espero que llegue para que vean la destrucción de sus imperios basados en la codicia que los políticos llaman países. Aquellos seres que vendieron sus almas a Dios, no tienen la conciencia suficiente para preocuparse del planeta, ya que centran sus vidas en los problemas. Arman un abismo con ellos y no son capaces de salir. 

Es cierto. Perdí mi familia. Me afecta demasiado. No puedo parar de llorar y lo mejor sería arrancarme la vida, con el objetivo de terminar con el tormento que me han impuesto. Pero, he recuperado mi conciencia, adquirí nuevos valores y tengo la fuerza suficiente para enfrentar a la madre de los demonios. Debes temer a quién no tiene nada que perder y ella sabrá qué es el verdadero horror...

No volveré a caer, hasta que haya perdido mi alma. Pues, mi conciencia ya no me la arrebatará nadie. 

Vincent Peterson

Diario de un Gato Negro: Las desventuras de VincentWhere stories live. Discover now