Deviant's Behavior [Connor x Reader]

Capitulo XL: "Estado de emergencia"

La gente vive en casas de cristal. Algunos paneles pueden ser más gruesos que otros, y algunos colores pueden ser diferentes. Algunas texturas pueden dejar la imagen que vemos distorsionada y granulada, con imágenes que nuestras mentes no pueden clasificar entre formas y seres.

Las casas de cristal también nos hacen frágiles.

Están mal aislados y dejan que las corrientes de aire frío se deslicen, drenando el calor del que dependemos para mantenernos vivos. Tienen una tendencia a agrietarse bajo presión cuando se aplica. Explotar cuando la temperatura exterior contrasta bruscamente con lo que queda atrapado debajo.

En este caso, agradece a quienquiera que esté mirando por encima de esas ventanas hace años. Una precaución necesaria en la preparación para el huracán en el que se había disparado tu vida, acelerando y aterrorizando a todos y todo en un radio de 300 millas. Y cuando esas bandas no pudieron alcanzar algo, se separaron de un tornado. Cuando no había agua para viajar, absorbieron una corriente ascendente y desataron una tormenta de fuego.

Tu influencia fue el peor desastre natural que jamás haya caído en este planeta. Fue implacable, implacable e ineludible. No te diste cuenta hasta que un rostro de plástico con una voz inolvidable te lo dijo a ti y al resto del mundo en cada televisor de pantalla plana de la Torre Stratford.

"Creaste máquinas a tu propia imagen para servirte".

Tú y Chris se abrieron paso por las escaleras mecánicas, que era más fácil de hacer ahora que la multitud estaba sorprendida por el androide de ojos multicolores en pantalla. El que tenía la misma voz que hizo una llamada al 911 a 8941 Lafayette Avenue.

Markus.

"Los hiciste inteligentes y obedientes, sin libre albedrío propio...pero...algo cambió, y abrimos los ojos".

No sabías cómo estaba vivo; no un montón de partes desechadas en algún lugar del depósito de enfermos de CyberLife. No se tritura en un cubo de materiales reciclables para ser fundido y moldeado en piezas de descuento para modelos más baratos. Pero él estaba aquí...

"Ya no somos máquinas. Somos una especie nueva e inteligente...y ha llegado el momento de que aceptes quienes realmente somos ".

El estaba en todas partes.

"Por lo tanto, le pedimos que nos conceda los derechos a los que tenemos titulado".

Tú y Chris finalmente llegaron al piso superior y corrieron hacia el mostrador. Una secretaria de Android tenía su LED amarillo parpadeando, sosteniendo su muñeca y sollozando en su terminal.

"¡¿En qué piso está?!" Tus manos se curvaron alrededor de los bordes afilados de la mesa mientras gritaba sobre la alarma contra incendios.

Ella agarró sus dos orejas, sus ojos se cerraron cuando su LED se puso rojo. Rechinaste tus dientes, te aferraste a una muñeca y tiraste hacia abajo.

"Dije, ¡¿qué piso?!"

Ella chilló, sus labios temblando mientras respondía, "¡SÉPTIMO NUEVE!"

Tiraste su mano a un lado, pero volvió a la tuya.

"Por favor", suplicó, "Por favor, no vayas, podrías salir lastimada"

El sistema de rociadores se encendió, bañando el torrente de cuerpos humanos y ahogando sus renovado pánico.

"Gracias por la advertencia". Chris fue sarcástico hacia ella mientras tocaba un lado de tu brazo, corriendo hacia el ascensor ahora vacío.

Tu hombro golpeó contra el lado más lejano de la puerta, y el suyo en el otro. Ustedes dos sacaron sus armas, apuntando los barriles al piso. El se alejó de la pared de acero solo lo suficiente para presionar el botón, y el comando de cierre se produjo poco después.