Un Paso

Siempre igual...

-¿Os conoceis?-preguntaron mi primo y su hermano al mismo tiempo.

-¿Estais saliendo juntos?-preguntó su hermano extrañado, hasta el momento James nunca había salido con ninguna chica y no había llevado a ninguna a casa, por eso le debía extrañar tanto, pero, eso no tenía nada que ver con que estuvieramos saliendo juntos, solo nos habíamos hecho amigos.

-¿Qué? ¡no, claro que no!- exclamó disgustado. Sabía que estaba enfadado con su hermano, aunque no quiso decirme el motivo, y yo tampoco quise presionarlo para que me lo contara, estuvimos hablando sobre muchas cosas, nuestra vida, nuestros problemas, pero parecía que el tema de su hermano le molestaba mas que cualquiera de los otros. Sin embargo no era necesaria esa afirmación tan rotunda, me molesto un poco.

-¿de que os conoceis?- me preguntó mi primo al oido, yo solo me encogí de hombros, no me apetecía responderle ahora, estaba prestandole mas atención a la discusión de James.-¿Es cierto que estais saliendo? no me habías contado nada.-susurró Keith, sin embargo llego a los oidos del pelirrojo, quien en mi parecer reacciono muy mal.

-¡No estamos saliendo! ¡no somos nada! ¡simplemente nos conocimos por casualidad y ya esta! ¿Por qué saldría con alguien como ella?- explotó enfadado. yo no pude evitar sentirme dolida, sabía que no era gran cosa, sabía que a la gente le podría desagradar mi físico por lo delgada que estaba y que era considerada una persona extraña, pero él me había dicho que le gustaba como era... que la sociedad es demasiado igual y es mas interesante ser diferente... pero al parecer él era una copia mas, un hipócrita...

-¡James! ¡que estes enfadado conmigo no tiene nada que ver con que te comportes de esta forma, eres un crío, tan solo eres un mocoso inmaduro!- le contestó su hermano gritandole tambien. James estaba a punto de llorar por la rabia que le causaban sus palabras, sin embargo las aguantaba apretando los labios y los puños hasta el punto de que se le quedaran blancos.

-Claro que tiene que ver...-murmuró bajando la cabeza.-todo tiene que ver... Sí, soy un crió, un mocoso inmaduro como tu dices, pero yo por lo menos digo lo que pienso... y soy sincero con la gente... con la gente que quiero...- dijo antes de salir de allí con los ojos cristalizados, poco después se oyo la puerta de la casa cerrandose con un portazo y la habitación se quedo en un incomodo silencio sepulcral.

-Lo siento... siento que hayais tenido que presenciar esto... como vereís tengo algunos problemas con mi hermano... perdon. Vuelvo... vuelvo ahora, por favor mientras tanto ir estudiando y colocando las cosas.- nos dijo saliendo de la sala un momento, Malcon salió detras de él depués de lanzar a sus amigos una mirada significativa.

-Yo...-dije con una voz aspera que no parecía ser la mía.- tambien voy a salir un momento...-susurré.-regresaré pronto.-indiqué saliendo de allí a paso acelerado. Mi primo me siguió hasta la puerta.

-Scarlett, lo siento, no sabía que iba a pasar nada de esto, no tenía ni idea, sino no te hubiera traído...-se disculpó.

-no te preocupes, tu no tienes la culpa.-le dije.-por favor, dejamé un momento sola, vuelvo a entrar en un rato.- le pedí, él me hizo caso y me dejo allí mientras él volvía a entrar, yo salí de la casa y comencé a correr cuesta abajo con toda la velocidad que pude. Cuando me di cuenta estaba en una especie de parque, lleno de arboles y campo, me introduje en la zona mas frondosa que encontre y rompí en llanto, hacía mucho que no lloraba así, pero lo necesitaba para desahogarme, ya estaba harta, siempre igual, en cualquier sitio era igual, nunca cambiaría, ya fuera en Japón, Inglaterra, España o China.

"¡Gorda! ¡Marginada!" "¡Anorexica! ¡Bulimica!" "Maldita Emo" "Me das asco..." 

comencé a escuchar en mi cabeza todas esas voces, la gente insultandome, las burlas, los comentarios ofensivos de los cuales nunca me podría librar, pero él que mas me había hecho daño desde entonces... fue el de James "¡no somos nada!" "¿Por qué saldría con alguien como ella?"