Cap 7 | Tendré que castigarte.

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Dedicado con mucho amor a SunnyLigthMG gracias por leerme y todo el apoyo 💖

Narrativa Vegetta

El sol comenzó a entrar por la ventana impactando en mi rostro haciendo que despertara.

Restregué mis ojos con algo de pesar, estaba agotado.

Sentí unos brazos rodear mi cintura.

Al bajar la vista vi a un Rubén desnudó al igual que yo, cubierto únicamente por unas sábanas moradas, la cual apenas le cubría el torso, dejando ver el inicio de su "V".

Él estaba mirándome fijamente, pero al notar que lo mire cerró los ojos con un rubor muy notable, haciéndose el dormido.

Sonreí tiernamente.

Comencé a acariciar sus mejillas suavemente, notaba que quería sonreír por la pequeña mueca que hizo al intentar ocultar eso.

Sin mencionar que empuñaba muchos los ojos, al parecer por el gran esfuerzo de quererlos mantener cerrados.

Con cuidado quite su brazo de encima de mi y en un rápido movimiento yo estaba sobre el con ambas piernas rodeándolo, mis manos aprisionando las suyas a los lados de su cabeza, la sábana deslizándose por mi cuerpo hasta caer por completo por el brusco movimiento, dejándonos totalmente desnudos.

El abrió los ojos mirándome con asombro y examinando todo mi cuerpo hasta detenerse en mi miembro el cual estaba duro por el calambre mañanero.

Sonreí al ver como sus mejillas se tiñeron de rojo y mientras mordía su labio no despegaba sus ojos de esa parte.

Me agache hasta quedar mi cara entre su cuello y hombro, comencé a dejar besos por todo su cuello y clavícula, escuchándolo soltar uno que otro suspiro.

-Eres un osito muy malo, primero fingir estar dormido y luego mirarme de esa manera tan descarada - mi vos salió más grave de lo habitual pero noté que le gusto porque sentí como se removió haciendo que nuestras pollas chocarán - tendré que castigarte.

Dicho esto me levante un poco y con algo de dificultad me estire hasta abrir el cajón que estaba junto a la cama de Rubius.

Saque de ahí dos pañuelos de aquel cajón, sabía que el los ocupaba para cubrirse la cara cuando estaba en la "hermandad oscura" pero yo tenía otros planes para ellos.

Tome una de sus manos y las amarre a uno de los extremos del respaldo de la cama con aquel pañuelo, y una vez repetí la misma acción con su otra mano, comencé a devorar sus ricos labios.

Él no se resistía, de hecho hasta creo que lo estaba disfrutando.

Baje mis besos por todo su cuerpo, dándole atención a sus rojos pezones haciendo que los gemidos rápidamente inundaran la habitación.

Cuando llegue a su polla no lo pensé mucho para meterla en mi boca y succionarla como si mi vida dependiera de aquello, daba leves mordidas o grandes lamidas por todo este, mientras Rubius gemía implorando que lo desatara, diciendo que el también quería jugar.

Tome sus piernas y las abrí mientras pasaba mi polla por el contorno de su entrada.

Pare en seco al escuchar como gritaban el nombre de Rubius desde la parte de abajo de su casa.

Rubius y yo compartimos la misma mirada de vergüenza y algo de temor que nos encontraran en aquella posición tan.... ¿Comprometedora?

Como pude y con toda la rapidez del mundo desaté sus manos y comenzamos a vestirnos.

Al terminar escuche como gritaban el nombre de Rubius al parecer muy cerca de la puerta de su habitación.

-¡Despierta Puerco! - gritó cierto psicólogo mientras habría la puerta de una patada y al verme hizo una sonrisa muy pícara.

-Pero mira como les gusta las salchichas mañaneras, ¿eh puercos?

Al terminar de decir aquello no pude evitar casi ahogarme con mi propia saliva, mas al ver la cara totalmente roja de Rubius, quien aun se miraba algo molesto por no haber acabado con aquello.

-Es que eres tonto... - dijo mi osito mirando hacia otro lado - ¿igual, a qué viene eso de venir tan temprano? - volvió a interrogar.

-Ah claro, casi lo olvidó, Lolito organizó una parrillada en su casa con todo y fiesta de piscina, y como ninguno de los dos contesta el discord por estar jugando a los conejos decidimos decirlo personalmente y pues aquí me tienes deseando no pisar ni tocar nada blanco.

Al terminar la cara de Rubius fácilmente podría confundirse con una fresa.

Y joder yo si me comería toda esa fresa.

-Será mejor que corras por tu vida - Soltó Rubius antes de salir a todo paso corriendo detrás de Auron, con un cojín en mano mientras el otro reía.

Son como niños

Comencé a levantar las cobijas del suelo de la habitación, pero al recoger una, vi que había una pequeña caja bajo aquella cama, que llamó mi atención.

La saque y al abrirla había una pequeña bolita verde junto a un reloj del mismo color.

Tome dudoso aquel objeto y al presionar un botón de aquel reloj se encendió mostrando unas barras de niveles y porcentajes y hasta opciones que no lograba entender demasiado, presione otro botón de aquel reloj y este comenzó a vibrar en mis manos.

Sentí mis mejillas encenderse al darme cuenta de aquel juguetito que parecía ser de este osito que no hacía más que sorprenderme con lo mucho que le gustaba este tipo de cosas.

Una deliciosa idea repleta de deseo y morbo lleno mi mente imaginando distintos escenarios en los cuales Rubius no caminaría por unas dos semanas o más y todo esto tratando de controlar mi bestia que pedía que devorara aquella fresa.

Tendré que castigarlo.

Depresión[Rubegetta]Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ