Parte Diecisiete.

1.4K 77 63
                                    

Días raros y los de diciembre, al parecer cualquier momento se presta para hacer balances del año que tuvimos. Para colmo, no fue un año para nada usual, todo lo contrario.

Se respira un aire pesado y hay una incertidumbre terrible. Nadie se anima a predecir algo del año que viene, es que proyectar el año 2021 mete miedo, pero esperemos se dé la mejor manera.

En España la situación se empieza a estabilizar poco a poco, claro que las bajas temperaturas no ayudan en nada. En Argentina, en cambio, estamos rozando los treinta grados todos los días y el aire del verano trajo una especie de relajación en la gente, la cual nos pone en alerta nuevamente. Esperemos no repetir la misma situación de España, que después del verano todo se complicó nuevamente.

Ok, vamos a lo importante; Lali y Peter. En el caso de ella, el cansancio por fin se empieza a notar, en los últimos meses además de la serie trabajó fuerte para su cuarto disco en horarios poco habituales. Cuando preparas algo con tanto entusiasmo y esfuerzo la motivación te va llevando y no sentís cansancio, pero una vez que estrenas o "parís" lo que estabas preparando, de repente viene un cansancio tremendo. Y Lali estaba en ese momento exactamente, solo que no puede tomarse vacaciones aun, ni siquiera volver a pisar su país ni su casa, ya que le quedaban varias jornadas más de grabaciones de esta serie, que además de cansada la tiene bastante entretenida.

En el caso de Peter, estaba casi en el mismo período que ella, finalizando las grabaciones de la serie para Netflix. Pero la diferencia, es que él estaba fresco como una lechuga. Por más de que los horarios sean largos, y junto a los protocolos la cosa se haga más densa, estuvo meses esperando este momento.
Claro que todo ese tiempo encerrado fue recontra productivo, pero cuando toca salir a trabajar de lo que amas y con un sol radiante todos los días, lo disfrutas a full. Y claramente, un apasionado como nuestro niño de lunares, estaba disfrutando a más no poder.

La relación de ellos seguía medio estática, a Lali le había resultado medio chocante que Peter le deje de hablar por WhatsApp de golpe. Hace dos días ella había intentado retomar esa charla porque realmente tenía ganas, él le dijo que estaba en un asado y no podía contestarle en ese momento. Le había llamado la atención un poco, pero no quiso seguir indagando demasiado.

La realidad es que Peter vio las fotos de ella con el muchacho español, el Director de la serie para colmo, y le causó un "no sé qué". Claro que no lo angustiaba ni mucho menos, pero esa sensación nuevamente. No entendía muy bien si en estos meses él había entendido algo que en realidad no sucede o qué, aunque en el fondo sabía que ella estaba con alguien allá, porque es lo más obvio después de estar tantos meses soltera en otro país. De hecho, él también tiene sus cosas, pero... no sabe, algo le causó y en ese momento no pudo disimular.
También, le pidió a Gastón que sea el encargado de ponerla al tanto de las noticias de ACTA, cosa que siempre fue su tarea. Tenía la mejor excusa: poco tiempo por estar fuera de la casa grabando por horas.
Lo extraño y obvio, era que Gastón también está grabando una serie, y tiene el mismo tiempo, o menos que Peter. En fin, no tenía mucho más justificativo, solo... ¿celos?

Claro que a Lali le llamaba poderosamente la atención este comportamiento, porque Peter no suele tener esas actitudes de pendejo, todo lo contrario, siempre fue el maduro de la relación. Ni hablar después de más de diez años, y ni hablar... sabiendo que hoy en día sólo los ata una relación de compañeros, amigos y ex. ¿No?
Ella sospechaba algo de todo esto, pero no tenía ni en el tiempo ni las ganas de hacerse la cabeza con algo, que tal vez, solo sea eso: falta de tiempo.

Peter también tenía los momentos para reflexionar sobre lo que pasó este año, de hacer balances; cosas buenas y malas, positivas y negativas, cosas que le faltaron hacer y otras que pudo adelantar, en fin. Entre ese sinfín de cuentas claramente aparecía ella. Porque sí, no fue un año más en la relación de ellos, no sólo pudieron volver a retomar el diálogo, sino también encontraron la mejor excusa (ACTA) para volver a forjar una especie de relación medio rara, medio tóxica también, pero no era la misma de antes, claro que no. Esta vez ellos son adultos, en cierto punto se estaban volviendo a conocer, conocer a estas personas de casi treinta años, aunque en el fondo las cosas no habían cambiado demasiado, sobre todo en el amor que hay en el medio de ambos.
Hay cosas que no cambian, aunque pasen años en el medio, personas y un millón de situaciones. Ellos del pasado... y ellos del presente. ¡Qué paradoja!

Puntos SuspensivosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora