Guardian Of Your Heart [ Markson | Omegaverse ]

XXXII

Capítulo 32

Bajaron juntos a la cocina, Jackson sacó del congelador lo que había quedado de su pastel de cumpleaños, ni él ni Mark lo habían comido porque cuando lo sirvieron aún estaban llenos del almuerzo.

Cortó dos rebanadas en forma de triángulo y las sirvió en dos platitos pequeños con una cucharita para cada uno.

A Mark parecía facinarle el pastel.

— ¿Está rico? — Preguntó Jackson y Mark asintió con la cabeza cerrando sus ojitos

— En casa solo podía comer un poco en mi cumpleaños... aunque a veces las cocineras me dejaban tomar algunos en secreto.

— ¡¿Espera, ¿No podías comer pastel?! — Jackson bajó de sus labios el vaso de agua que estaba bebiendo — ¿No te dejaban comer pastel? Eso es raro... ¿Por qué?

El ojiazul suspiró y miró al techo como recordando

— Mis padres no me dejaban comerlo porque...decían que podía engordar o que afectaría mi salud — Dijo encogiéndose de hombros y dándole una sonrisa triste mientras llevaba otra cucharada a su boca.

Jackson sintió un poco de pena. No sabía mucho sobre la familia de Mark pero a veces le daba la impresión de que sus padres lo cuidaban no porque fuera su precioso hijo menor, sino porque era una especie de mercancía invaluable. Se acabaron lo que se sirvieron y ambos estaban satisfechos y contentos. En especial Mark. Lavaron juntos los platos y ordenaron lo que habían utilizado.

— Oye... Mark... — Dijo Jackson guardando los platos en la estantería

— Dime

— ¿Es cierto lo que dijo Jaebeom?... ¿Sobre hoy en la mañana?

— ¿Qué cosa?

— Sobre que casi follamos aquí — Dijo frunciendo los labios y pasando su mano sobre la encimera — Lo siento, debió haber sido vergonzoso para ti.

— Lo fué, un poco... ¿No lo recuerdas? — Preguntó Mark arqueando una ceja.

— No realmente

— Entonces... déjame mostrarte como sucedió — Mark le sonrió con picardía, la verdad tenía aún un poquito de ganas de repetir lo que había pasado en la habitación — Yo estaba aquí parado preparando algo de desayunar y tu llegaste corriendo como loco y me abrazaste, lo que... bueno, no me pareció raro, pero luego te pusiste extraño y empezaste a decir que era tuyo y que nadie se me acerque.

— ¿En serio? — Suspiró Jackson un poco avergonzado — Fué por mis feromonas, lo siento.

— Espera, eso no es todo... — Mark tomó las manos de Jackson colocándolas en sus caderas y poniéndose de espaldas — Luego me recostaste aquí — El ojiazul se inclinó hacia adelante sobre la encimera, rozando sus nalgas en la entrepierna de Jackson

— ¿Mark?... — Jackson lo miró entre confundido y divertido. El olor de Mark golpeó la nariz de Jackson y su cuerpo estaba lo suficientemente cerca como para que el chico provocara al lobo. Y lo había logrado.

Jackson miró a los lados y afirmó su agarre en las caderas de Mark jalandolo para que sintiera lo que habia causado. Mark dejó escapar un chillido cuando sintió el bulto detras de él y vio los ojos de Jackson brillar.

"Mierda" pensó Mark, cuando volteó a ver los ojos de Jackson. Él solo quería provocarlo un poquito.

— E-espera, s-sueltame, N-no iba en serio — Intentó levantar su torso de la encimera pero no pudo — ¡J-Jack sólo estaba jugando!