XXX

874 123 20
                                    

Capítulo 30.

Mark se ocultó detras de la pared, para intentar calmar su corazón que latía rápido y ni siquiera él sabía la razon "Solo aclaras las cosas con el y te vas, no es tan difícil" se repetía, tomó aire y corrió con cuidado la puerta de vidrio, no iba a mentir, estaba nervioso. El aire frío golpeó en sus mejillas y recorrió su cuerpo mientras atravesaba lentamente la puerta.

Cualquiera que viera a Jackson pensaría que era un modelo con su esculpido cuerpo, su hermoso perfil y su cabello alborotado, sin darse cuenta Mark chocó con una maceta pero la atrapó antes de que ésta cayera, el ruido hizo denotar su presencia. Jackson giró su cabeza encontrándose con la esbelta figura de Mark, que le quitó el aliento, se veía condenadamente guapo con esa camisa y esos jeans. Se obligó a quitarle los ojos de encima, gruñó bajito, casi para sí mismo, mientras le daba un gran sorbo a la botella que tenía en las manos acabandose más de la mitad del contenido.

— ¿Qué haces aquí Tuan? — Dijo en una voz grave y ronca mirando al cielo.

— Yo solo... Youngjae me dijo que estarías aquí — Jackson no contestó, solamente suspiró ruidosamente. Youngjae y JB habían planeado todo — Jacks-

— ¿Qué, Mark? — Lo interrumpió de manera brusca mientras Mark jugaba nervioso con sus manos. No sabía como preguntar, se quedó en silencio.

Jackson se sentía lastimado, había pasado dos semanas prácticamente rogándole por atención. No iba a hacerlo más. Mark primero le debía una disculpa.

— Yo solo... —El tono de Jackson le hizo notar que estaba enojado aunque él no entendía por qué, si con el que posiblemente estaban jugando era él mismo — Pa-para empezar, ¿Por qué estás tan enojado? — Jackson bufó y mostro una sonrisa de incredulidad ante las palabras del ojiazul

— ¿Es enserio, Mark? Esto tiene que ser una maldita broma

Jackson se bebió hasta la última gota de la botellita y la tiró a un tacho que tenía al lado. Por suerte a los lobos el alcohol no les afectaba tan rápido, necesitaba por lo menos diez botellas para sentirse siquiera un poco mareado. Decidió que lo mejor era irse de ahí, caminó pasando por el lado del ojiazul golpeando su hombro. Podía parecer un tipo rudo y despreocupado pero no dejaba de ser un chico despechado de diecisiete.

Esto no estaba saliendo como Mark lo había pensado. En un impulso lo tomó del brazo evitando que Jackson atravesara la puerta.

— Jackson — Lo detuvo buscando la mirada del pelinegro con ojos suplicantes. Se quedaron en silencio mirándose hasta que Jackson habló

— ¿Por qué ahora? — Mark lo miró sin entender — Has estado ignorandome por dos malditas semanas, ¿Por qué ahora?

— Yo...

— ¿Qué necesitas? Porque al parecer solo me hablas cuando quieres algo.

— Eso no es cierto, yo... Lo siento...

— Si, Tuan, como sea

— ¡Estoy disculpándome! ¿Qué quieres? ¿Que me arrodille? Además tu debes haberla pasado muy bien yendote de fiesta ayer.

— ¿Fiesta?

— ¿Estuvieron buenos tus revolcones?

— ¿Revolcones? — Jackson soltó su brazo del agarre de Mark — Vete al diablo Mark, no estoy de humor para soportar tu mierda.

— ¿No vas a negarlo? ¡Entonces es verdad!

— ¿Qué?

— ¡Que estabas jugando conmigo! — Gritó el ojiazul — ¡¿Por qué?! — El cielo empezó a nublarse mientras Jackson lo miraba con el seño fruncido — ¡¿Te parezco tan idiota?! — La lluvia empezó a caer empapando a ambos chicos. Las lágrimas en los ojos de Mark amenazaban con caer al igual que las gotas a su alrededor.

Guardian Of Your Heart [ Markson | Omegaverse ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora