Capítulo 169. La Verdad Duele

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Raaz estaba enojado ante la idea de la doble vida de su hijo fuera de su familia, haciendo cosas que ningún niño debería intentar hacer. Lo que más lo enfureció no fueron todas las mentiras que Lith le había dicho, Raaz ya estaba mucho más allá de ese punto, sino cómo habló sobre luchar hasta la muerte como si fuera perfectamente normal.

Respiró hondo de vez en cuando para controlarse. Su hijo necesitaba desahogar el dolor que lo carcomía desde adentro. Raaz siempre podría regañarlo más tarde. Por desgracia, Tista no era tan fuerte como su padre.

Ella comenzó a llorar junto con Lith, necesitando la ayuda de Phloria para poder pararse.

-¿Por qué hiciste todas esas cosas? -Ella soltó.

» Hubiera preferido pasar hambre antes que permitirte tomar tantos riesgos. Unas pocas comidas y algunas monedas extra nunca valdrán la pena para tu vida. ¿Y si algo te sucediera?

Tista sólo habló con preocupación, la revelación había sido demasiado impactante para que ella la aceptara en silencio. Sin embargo, para los oídos de Lith, sus palabras sonaban ingratas como si estuviera escupiendo sobre todos los sacrificios que él había hecho y la ayuda que Protector le había brindado.

-¿Por qué, preguntas? -Ya estaba acostumbrado a la tos, mantuvo la voz baja y siseante para que no lo volviera a interrumpir. No ahora que encontró a alguien más a quien culpar.

» ¿Ya te has olvidado del frío? ¿De lo enfermiza que eras y de las corrientes de aire de nuestra casa durante el invierno? Todos teníamos tanta hambre que Orpal y Trion robaban huevos del gallinero y leche del establo siempre que podían.

» Rena solo tomaba de la despensa lo que necesitaba para evitar desmayarse de hambre. Nuestros padres lo sabían y solo podían fingir que todo estaba bien, ¡pero no! ¿Por qué crees que Orpal siempre se estaba metiendo con nosotros?

» Alguien tenía que hacer algo, ¡simplemente fui yo! Si no fuera por Protector, ni siquiera estaríamos aquí. ¿Cómo te atreves a quejarte en retrospectiva, ahora que estás sana y bien alimentada? ¡Deberías dame las gracias y afligirte por él!

» ¡Deja de ser una bebé y crece, maldita sea! Todo en la vida tiene un precio. La única razón por la que puedes permitirte ser tan ingenua y despreocupada es porque otros siempre lo han pagado en tu lugar. Si yo hubiera muerto en ese entonces, hubiera habido más comida para el resto de ustedes. Era una situación en la que todos salían ganando.

Lith estaba tan enojado que logró levantarse y abrir los ojos, mirando a Tista con odio. Phloria tuvo que abrazarla con fuerza para mantenerla tranquila. Tista nunca había visto a Lith enojado con ella, ni había presenciado la mirada de bestia loca que usaba en los demás.

Ella siempre había sido la princesa de su hermano. La forma en que le hablaba y actuaba con ella estaba destrozando el corazón de Tista.

Raaz lo golpeó la frente con tanta suavidad que Lith apenas notó el golpe.

-Considérate abofeteado, joven. -Dijo con un tono triste pero firme.

» Lamento todo lo que pasaste. Debo haber sido un padre horrible para hacerte sentir la necesidad de sacrificar tu infancia para darnos una vida mejor. Nunca podré perdonarme por eso. Es deber de un padre cuidar de sus hijos, no al revés.

Se enjugó una lágrima silenciosa de su propia mejilla y volvió a golpear la frente de Lith.

-Sin embargo, lo que le acabas de decir a tu hermana fue cruel. Sólo los dioses saben si ella seguiría viva sin todos los cuidados que le diste. No hay nadie en la familia que haya pasado por alto tus esfuerzos, especialmente Tista.

Mago Supremo: Volúmenes 4 y 5Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin