El Omega y el Emperador: Primera Parte(Fanfic XianWang MDZS)

CAPÍTULO 40

REINO DE YUNMENG JIANG-LUANZANG GANG

REINADO DE LA DINASTÍA WEN

6 años atrás

La primera vez que Chenqing vio a Lan Wangji fue a través del hechizo cuervo.

Era pequeño, frágil y vestido casi siempre con túnicas sencillas, mientras un extraño velo cubría la mitad inferior de su rostro, dejando que solo los ojos fénix de un tono claro fueran visibles, como aquellas elegantes y curiosas cejas desafiantes.

Era extraño, inexpresivo e inusual.

Y aun así llamaba tanto la atención de Wei Wuxian.

Como alguien que nunca había comprendido la pasión de los hombres, y el amor que nacía en los corazones por un individuo que no fuera de su familia, Chenqing no pudo evitar mirar curioso cuando Wei Wuxian dejaba de lado el campo de guerra, muerte y sangre, se sentaba en los escalones de ese viejo y descuidado palacio y usaba aquel hechizo para mirar a un niño que hacia lo mismo todos los días.

Lavar la ropa y mirar a Anhelo con curiosidad.

Era un canal bastante aburrido, pero interesante, porque esa simple y aburrida vista hacia lo que ya casi nada conseguía en Wei Wuxian.

Lo hacía verse como el niño que aún era.

El mirar como los ojos de Wei Wuxian se alejaban del rojo, brillando como si por fin las estrellas se acordaran de su mirada, el cómo esos resecos labios se curveaban hacia arriba y el calor en su corazón crecía, eso, era algo fascinante y esperanzador.

Como si ese simple chiquillo, con el simple hecho de salir de esa cueva y lavar ropa cada día a la misma hora, le recordara a su señor que se sentía estar vivo.

Que se sentía amar.

Y aunque Chenqing jamás había sentido aquello que los hombres llamaban amor romántico, aunque jamás se había interesado en ello, el ver a Wei Ying amar a Lan Wangji lo hizo sentir muy feliz.

Porque esa parte de Wei Wuxian, esa pequeña y hermosa parte de su corazón, le recordaba a Chenqing que aún no era tarde.

Que su A-Ying aún era humano.

Que aun podía ser feliz.

Y nada sería mejor para Chenqing que verlo cumplir sus sueños aun si algunas cosas no se hacían del mismo modo.

Así que, sentado en el regazo de Wei Wuxian, buscando alejar ese asqueroso frio muerto del cuerpo vivo latiente de Wei Wuxian como siempre, Chenqing disfrutó del cálido latido acelerado en el pecho del muchacho, ante la simple imagen proyectada en aquel espejo, de un pequeño Lan Wangji batallando con una prenda blanca.

Ah, Wei Ying era tan lindo enamorado, Chenqing disfrutaba tanto de esa vista.

Pero eso no significaba que no pudiera molestarlo un poco.

―Wei Ying, cambia de canal, ya me aburrí―.

―No lo hare―.

―Pero, Wei Ying, lavar esa túnica le llevara diez minutos o más, en ese tiempo podríamos ver más cosas, como los omegas o betas femeninos y masculinos de Gusu―.

―El único omega que quiero ver es Lan Zhan―.

―No tienes por qué sentir miedo de querer saber cómo se ven, a mí no tienes que mentirme, sé que una de las cosas que querías ver en Gusu eran esos chicos, después de todo, alfa, beta, omega, para ti no hay diferencia―.