CAPÍTULO 12

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CAPITAL DEL IMPERIO, YILING

Una semana atrás.


Había muchas cosas que Xiao Xingchen amaba, los lirios blancos, los dulces blandos y la niebla, amaba el jardín rociado por la brisa como el aroma fresco de la mañana, las luciérnagas y las noches estrelladas entre luna llena, amaba las sonrisas de los niños como jugar con A-Yuan, Xiao Xingchen amaba el verano pero también el invierno, amaba su infancia como los chistes de A-Qing y cada uno de ellos, tan valiosos por si solos eran amables muestras de que aún estaba vivo, era libre y feliz, como cuando era un niño, viviendo aun en la montaña divina a lado de su maestra, Xiao Xingchen no podía quejarse, el mundo mortal en apariencia no era tan diferente, las cosas que amaba estaban aquí, las personas que adoraba lo hacían y nada era mejor para Xiao Xingchen que despertar y descubrir que esto no era solo un sueño desesperado por libertad.

Este era el presente y nada se sentía mejor que ello.

Entre las muchas cosas que Xiao Xingchen amaba una de ellas era su trabajo.

La revisión de Yiling fue una especie de liberación que le hizo sentir de nuevo como cuando bajo de la montaña, muchas cosas habían pasado pero el regreso fue exitoso al igual que el banquete, la noche llego y sus servicios con Lan Wangji ese día habían terminado por el momento, debía de ir al despacho de Wei Wuxian, dar su reporte diario al emperador y después tomar un buen descanso tras el viaje, así que vestido con sus túnicas normales seguido por el séquito del Feng Xiao Xingchen se abrió paso cuando las puertas fueron abiertas.

La campaña de revisión a Yiling había terminado y la hora de la revisión final sobre los aspectos encontrados llego en forma de los informes de ambos séquitos como las campañas de batalla del imperio esparcidos sobre la gran mesa de Wei Wuxian, el despacho del emperador era una clara definición de Wei Wuxian, miles de informes, reportes y pergaminos que determinaban el funcionamiento adecuado de ese imperio decoraban la gran habitación, en el centro de la misma yacía Wei Wuxian frente a esos reportes revisando seriamente cada uno de ellos de pie, algo llamo la atención de Xiao Xingchen, era colorido y llamativo, una marioneta en la diestra de Wei Wuxian contrastando con las túnicas de emperador y en la esquina de la habitación la pequeña cama preparada para esas ocasiones mostraba un pequeño pie travieso tras la cortina especial, al parecer dormir a A-Yuan fue difícil, incluso un juego fue necesario el día de hoy, el emperador tomaba muy en serio su trabajo, pero mucho más su paternidad, fue cuando su mirada paso a ellos que una sonrisa adorno su rostro.

―Al fin llegaron, vamos, vamos, vengan aquí, tomen asiento y hablemos―.

Justo como era cada ocasión Xiao Xingchen y cada uno expuso su reporte, como se encontraba Lan Wangji, que tan bien aceptaba los alimentos y si en realidad parecía cómodo tanto con el hospedaje y el trato de la gente de Yiling, Wei Wuxian escucho en silencio, aceptando o sintiéndose reprendido ante algo que no le gustara pero siempre atento a las preferencias o actitudes de Lan Wangji, cuando el reporte de los cinco días termino Wei Wuxian se dirigió a la silla, bañado por la luna y manteniendo entre su mano el juguete de A-Yuan el emperador por fin hizo la pregunta que al parecer estuvo manteniendo en su pecho todo el tiempo.

―Entonces... ¿Ustedes que piensan?―.

― ¿A qué se refiere emperador?―contesto Xiao Xingchen.

―Vamos, chicos, sé que hicimos un trato, completa confidencialidad sobre lo que piense, diga o haga Lan Wangji, pero fuera de eso, ¿Ustedes creen que tenga una oportunidad?, vamos, MianMian, A-Su, Xiao Shishu, sean sinceros conmigo―.

El Omega y el Emperador: Primera Parte(Fanfic XianWang MDZS)Onde as histórias ganham vida. Descobre agora