Lynn x Lincoln (4/?)

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Y los recuerdos quedan...

I

Nada era lo mismo, ya no era la misma ciudad en la que alguna vez pasaron los que ellos consideran los mejores momentos de sus vidas. Pareciera como si se hubieran puesto de acuerdo en mermar la poca felicidad.

Lincoln abrió la puerta con mucha facilidad, hasta las tan recordadas falencias de la casa ya no estaban presentes. Con un gesto hizo que Lynn entrara antes que él.

La chica ya no podía estar segura si aquel lugar fue el nido de tantos momentos alegres y tristes. El que les hayan dado la oportunidad de ver el lugar es la mejor muestra de que el tiempo puede ablandar corazones.

—¿Así es como termina, debilucho?

—No puedo estar seguro.

—Dime que tienes un plan, ¿sigues siendo el hombre del plan, no?

No sabía si responderle, no quería destruir más la poca esperanza que ella misma se creaba en ese instante. No podían hacer nada, aunque así quisiesen.

—Lynn... ¿una carrera hasta al segundo piso?

La mujer de cabello marrón y gris sonrió, sabe que eso siempre la hace recordar esos momentos donde la competencia lo era todo. Subió sin darle ventaja.

II

Lucy en persona se presentó ante ellos para darles las llaves de la casa a la cual no regresaron por obvias razones. Ellos la tomaron con mucho agradecimiento, a pesar de que a su hermana no le haya gustado verlos juntos. Pero ellos tenían derecho.

Lynn en esos momentos no sabía si haber venido fue lo mejor, Lincoln también estaría en las mismas al ver que su antigua habitación volvió a ser un almacén.

No podía creer que la vieja habitación de ella y Lucy fuera un almacén de partes de las literas que alguna vez todas ellas usaron. Se notaba que las termitas arrasaron con la mayor parte de eso.

Las demás habitaciones estaban más que vacías, pareciera que ni un alma hubiera vivido en aquel lugar.

—¿Qué es este lugar? —había algo extraño en su voz— ¿Dónde estamos?

—Lynn, ¿estás bien?

—¡No, no estoy bien! —empezó a llorar y rápidamente se cubrió el rostro— ¿Nos merecemos este castigo?

Realmente no quería responder a eso. No lo quería hacer. Pero por ella tenía que hacerlo.

—Recuerdas que te dije: "Podrás ganar campeonatos y todo los deportes o disciplinas en las quisieses, pero... si íbamos a estar juntos... ibas a sentir la verdadera pérdida" —la tomó del rostro—. Yo sé que esto es difícil, pero ya es en vano sentir remordimiento y cualquier pena.

—E-Es que n-no es justo... —se recargó en el pecho de él— pareciera que se vengan de nosotros... siempre nos odiaron.

La tuvo que abrazar por varios minutos hasta que se sintiese más calmada. Esto fue lo más incomprensible para ambos. Venían entusiasmados en poder sentir el pasado, pero... no era como se esperaba.

—Revisemos el ático y después el sótano, ¿quieres? —hizo que ella lo mirara al rostro.

—D-De acuerdo —se podía notar su desconsuelo.

III

Subir fue muy tedioso porque la entrada estaba asegurada por el tiempo en que nadie quería tener algo con esa estancia de aquella residencia. Lincoln le cedió el pase a Lynn.

Colección de One-Shots: Loudcest y No Loudcest...Where stories live. Discover now