CAPÍTULO XIV- INVITACIÓN

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MAX

Sale de mi oficina como alma que lleva el diablo dejando tras ella una estela  de su  perfume, respiro profundamente para absorberlo todo, me acomodo la erección en los  pantalones, nunca conocí a una mujer tan terca y desesperante como ella, ninguna me había retado antes de una manera tan descarada como  Das Kätzchen, me gusta tener el control, eso es algo que las mujeres con las que salgo tienen muy claro, en mi naturaleza está el ser dominante, pero ella me la pone dura cada que no me obedece y ni siquiera se da cuenta del peligro que correr con su terquedad, mi autocontrol pende de un hilo cuando estoy cerca de ella, tomó una sabia decisión al salir de mi oficina, porque estuve a nada de empotrarla en la pared o encima de mi escritorio y cogérmela, enseñarle lo que provoca cuando no me obedece y que afrontara las consecuencias.

Tenía unas ganas endemoniadas de callar esa bonita boca de alguna manera, ya sea a besos… o con mi polla.

La maldita Kätzchen  me hace querer romper todas mis reglas.

»No follar con nadie de la oficina». Me recuerdo.

Solo me hace falta follar con alguien, desde que me drogaron y robaron no he cogido con nadie, eso debe ser, necesito un buen revolcón para dejar de pensar pendejadas.

Pero hoy no puedo, tengo que buscar a alguien que cuide a Steven, no quiero dejarlo solo en mi departamento, necesito que alguien lo saque a pasear durante el día.

Si no tengo sexo pronto me terminaré volviendo loco.

* * * * *


Ha pasado una semana desde que Das Kätzchen  entró a mi oficina por primera vez, desde entonces me he mantenido alejado de ella, lo único con lo que no puedo luchar es contra la necesidad imperante de mirarla todas las mañanas en su escritorio, fuera de eso me he mantenido al margen de todo lo relacionado con ella.

La semana pasada, Isaac anunció formalmente su retiro frente a la junta, solo los altos rangos tenían que estar presentes en esa reunión, me descolocó de sobremanera que Das Kätzchen estuviera ahí en la asamblea, iba en compañía de Enzo, ella se veía confundida también, pero pude notar que absorbía toda la información que se trató tocante a la firma, tengo entendido que ella trabaja en algunos casos a la par de Enzo, no la están tratando como a los demás abogados cuando entran a trabajar a la firma, no me refiero a que haya favoritismo, sino a que así justamente se empezó a capacitar a Matías cuando empezó a trabajar aquí, no entiendo a dónde quiere llegar Enzo con todo esto, pero me parece muy raro.

Ahora me preparo para ir a una junta en donde estaremos presentes los socios para tratar sobre un caso importante que está llevando la firma, estás juntas se hacen para mostrar los avances del caso y hacer una retroalimentación para analizar los enfoques que se están tomando en cuenta.

Tomo las cosas que necesito para la reunión y me dirijo a la sala de juntas, entro al lugar y…  la veo, ¿qué está haciendo aquí? Tomo asiento y reviso en mi iPad cuál es el caso en concreto, es un caso en contra del director general  y dueño de una de las empresas automotrices más importantes del país, el caso está a cargo de Enzo, eso explica porque está aquí Das Kätzchen.

Ya casi están todos presentes solo falta Enzo, es raro que aún no esté aquí siempre es puntual en todo, incluso en las juntas siempre llega mínimo diez minutos antes, miro mi reloj, faltan cinco minutos para la hora señalada. Miro a  Das Kätzchen  que está sentada justamente frente a mí, luce nerviosa por la tardanza de su jefe, está revisando no sé qué cosa en su propia iPad y la muy maldita está chupándose el labio, empiezo a creer que lo hace de manera inconsciente, la observo, luce adorable leyendo el aparato y arrugando la ceja mientras se chupa tentadoramente el labio, luce jodidamente sexy y lo peor es que ni siquiera pretende serlo, es algo que se le da de manera natural.

— Está  buena la nueva ¿Verdad? — Daniel un idiota socio de la firma me saca de mis cavilaciones.

— No sé, no le he prestado atención— contesto con indiferencia.

En eso,  el teléfono de Das Kätzchen suena y ella se levanta a tomar la llamada.

— Cómo puedes no prestarle atención a semejante mujer, mírala nada más— este imbécil ya me está colmando la puta paciencia, por qué tiene que estar mirándola.

Antes de que le diga a este imbécil que se calle, Das Kätzchen entra otra vez a la sala de juntas y se dirige a audiencia.

— Buenas tardes, el licenciado Sanz no podrá asistir a esta reunión el día de hoy, pero yo estaré en su representación, si les parece podemos empezar, ahora mismo.

Los  presentes asienten afirmativamente, yo me recuesto en el respaldo de mi silla, pongo el codo en el reposabrazos y apoyo los dedos en mi mandíbula para observarla.

Está parada frente a los abogados más despiadados y mejor preparados del país, por algo la firma es la mejor, pero ella permanece estoica, no  hay rastro del nerviosismo de hace un momento, sabe manejarse, se puso una coraza impenetrable que solo muestra su fortaleza, pasión y fiereza.

Explica todo lo relacionado con el caso y sus avances, los presentes le lanzan preguntas tratan de acorralarla, de intimidarla,  pero ella no se deja amilanar, es evidente que conoce el caso como la palma de su mano y está más que preparada.

PUDE HABER SIDO YO [+18] COMPLETA ✓Where stories live. Discover now