Zhao Xiulan vio el hígado de cerdo que Liu Lanlan le entregó y se rió:
—¡Lanlan, tu pareja es muy amable contigo! Pero como esto es un regalo de tu pareja, puedes guardarlo para ti. Si no puedes comerlo hoy, puedes comerlo mañana, tengo suficiente comida aquí.
Liu Lanlan sonrió tímidamente, es verdad que su pareja era muy amable con ella. Si había algo bueno, se lo daría a ella primero sin importar nada.
Es el tipo de persona que gana diez yuanes y está dispuesta a gastarlo todo en ella.
Incluso si su pareja no es prometedora, es campesino y no tiene un trabajo tan bueno, Liu Lanlan está dispuesta a estar con él.
Mientras este hombre la ame y la cuide como una perla en sus manos, el resto no es importante.
—Xiulan, tómalo, llévalo a cocinar, puedo comerlo por la noche. Además, tu habilidad en la cocina es tan buena que definitivamente sabrá mejor —dijo Liu Lanlan, y directamente metió la cuerda de paja atada con el hígado de cerdo en la mano de Zhao Xiulan.
—Está bien, Lanlan, entonces me lo llevaré y lo prepararé para ti. ¿Quieres sopa de hígado de cerdo o salteado? —dijo Zhao Xiulan, sin más opción que aceptar.
—¡Haz lo que quieras, siempre que sea delicioso! —Liu Lanlan tenía mucha confianza en las habilidades de Zhao Xiulan.
—De acuerdo, haré un hígado de cerdo salteado, sabe bien y es un buen aperitivo para servirle al capitán —respondió Zhao Xiulan.
—Claro, Xiulan, depende de ti.
Después de saludar a la familia de Liu Gensheng y pedirles que fueran a cenar dentro de una hora, fue a casa de los Jiang y les informó la hora a la que debían llegar. Con eso hecho, regresó a su casa para empezar a preparar la cena.
Sacó dos jin de carne y un pescado del espacio.
También tenía algo de tocino y salchichas en casa que podían usarse para cocinar, y con el hígado de cerdo de Liu Lanlan, habrá muchos platos de carne para la noche.
En cuanto a los platos vegetarianos, no tenía que preocuparse por su escasez teniendo una huerta llena de verduras.
Mientras se ocupaba de cocinar, Zhao Xiuzhu estaba a cargo del fuego.
Mientras observaba el humo que salía de la cocina y el olor de la comida, Zhao Weiguo se sentó en el patio y sintió una indescriptible sensación de felicidad.
Era bueno tener a su hija de vuelta, la comida era más sabrosa, la casa estaba más animada y había más armonía familiar.
La familia Jiang y la del jefe de equipo llegaron casi al mismo tiempo.
Para entonces, Zhao Xiulan ya tenía la comida servida en la mesa.
Debido al clima caluroso, movieron la mesa al patio, para que todos pudieran comer entre la brisa fresca y la sombra del árbol.
Al ver que toda la familia del líder del equipo había venido, pero Zhou Xiaocui no, Zhao Xiulan preguntó a Liu Lanlan:
—Lanlan, ¿por qué no ha venido tu cuñada?
Liu Lanlan hizo un puchero, pensando en el alboroto de su cuñada, se quedó sin palabras.
Obviamente, era una ocasión felíz ser invitados a cenar por Zhao Xiulan, pero de repente se portó mal y dijo que no quería venir.
No sabía porqué seguía disgustada con Zhao Xiulan.
Aunque la trataran con cortesía, ella no lo apreciaba.
