—¡Bien, ve! ¡O no podrás verlos cuando salgan a trabajar esta tarde!
—¡Bien!
Zhao Xiulan acompañó a Jiang Cheng a la casa de los Jiang. Jiang Cheng sólo trajo algunos pequeños regalos a la familia Jiang esta vez, no comida.
En el pasado, si hubiera sabido que su novia tenía un espacio, podría haberlos traído, pero ahora ella le había explicado que no necesitaba traer comida y otras cosas desde Ciudad Lu, podía simplemente tomarlas de su espacio.
Además, había traído mucho dinero y boletos, se los dejaría para que pudieran comprar comida.
¡Además, aún no habían terminado los suministros que Zhao Xiulan les envío anteriormente!
Cuando llegaron, la familia Jiang acababa de almorzar, y al ver a Jiang Cheng, saludaron emocionados.
—Jiang Cheng, ¿estás aquí? Buen chico, hace mucho que no vienes, ¿has comido ya? Si no, te prepararé algo de comer. —La Sra. Jiang tomó la mano de Jiang Cheng con calidez.
—Segunda abuela, comí en la casa de Xiulan, ¡no te molestes! —respondió Jiang Cheng inmediatamente.
—¡Eso es bueno, eso es bueno! —respondió la Sra. Jiang con una sonrisa. Ya que había comido en casa de Zhao, la comida debió ser buena. ¡Su comida no tiene comparación con la de Zhao Xiulan!
Jiang Cheng entró en la casa de la familia Jiang, les dio sus regalos y luego charló con la pareja de ancianos, ambos estaban muy interesados en los preparativos de su boda.
Es una pena que la casa de la familia Jiang esté lejos en la ciudad de Lu y no puedan asistir a la boda allí. Afortunadamente, ellos y Zhao Xiulan están en el mismo equipo de producción, al menos pueden asistir a la boda aquí. Estaban muy felices de poder asistir a tal evento.
Finalmente, un descendiente de su familia sentará cabeza.
Desgraciadamente, sus propios nietos aún son jóvenes, así que no saben cuándo podrán ver casarse a Jiang Xiaoya y Jiang Tiedan.
Después de charlar un rato en casa de la familia Jiang, Jiang Cheng regresó a casa de la familia Zhao.
Por la tarde, ambas familias saldrán a trabajar. Era una época de mucho trabajo agrícola, así que aunque hacía calor fuera, tenían que salir y no podían quedarse en casa. Comparada con la gente del campo, que trabaja bajo el sol, la gente de la ciudad tiene un trabajo mucho más fácil y cómodo.
Jiang Cheng se quedó unos días en casa de Jiang, y cuando no había nada que hacer, Zhao Xiulan lo llevó a visitar a sus abuelos en el condado.
Por otro lado, el alcalde Shen le ayudó a organizar un trabajo a través de sus conexiones. Después de recibir una respuesta, le pidió que fuera a su oficina para obtener los documentos.
Zhao Xiulan estaba muy feliz de ver que su trabajo se resolvió e inmediatamente respondió a su notificación.
Al verla acercarse, el alcalde le entregó los documentos de trabajo relevantes con una gran sonrisa:
—Camarada Zhao Xiulan, mi compañero de clase ya me respondió y están muy felices de aceptar un talento sobresaliente como tú. Este es un documento. Cuando vayas a ciudad de Lu más tarde, ¡solo lleva este documento e preséntate a la Oficina de Granos!
Zhao Xiulan tomó el documento y su entusiasmo fue más allá de las palabras. Esta vez, obtuvo un gran trabajo.
El trabajo en la Oficina Municipal de Alimentación de Lu era un trabajo de los gordos, y si no hubiera sido por la ayuda del magistrado Shen, no habría podido conseguirlo por sí sola.
