No Te Enamores a Distancia [NTEAD]

Capítulo #24:

Capítulo #24: "Mal día para existir"

Carolina Flores

El sol golpea mi rostro. Así que abro mis ojos molesta.

Miro con mala cara a la cortina y me doy cuenta que ayer me olvidé de cerrarla que por esa razón ahora estoy sufriendo.

Me levanto frustrada y la cierro con fuerza. Me siento en la cama. Mi teléfono vibra avisándome de la entrada de un mensaje.

Lo leo desde fuera:
Hola Carolina, Favio hoy no tuvo escuela, no tiene que venir a trabajar hoy.

No se si reír o llorar. Es una sensación rara. Porque a mi me gusta trabajar, cuidar a Favio me gusta, pero bueno también me gusta quedarme en casa, leyendo, escribiendo haciendo cosas que me gusta.

Así que con esa sensación voy al baño. Al ponerme de pie. Mi cabeza sufre un mareo raro que hace que casi caiga al suelo. Me quedo pegada a mi closet sujetando mi cabeza. No entiendo la sensación.

Cuando me recupero voy camino al baño. Primero lavo mis dientes, mi cara y veo algunos granos pequeños y rojos formándose en mi rostro. Me entran ganas de llorar y no se de donde viene esa frustración.

Mi celular vuelve a sonar y lo reviso.

Buenos días preciosa, ¿cómo dormiste?

"Bien"

Un poquito más frío y me tienes que poner al fuego para derretirme.

Eso me hizo reír como idiota. Porque en realidad no lo hice con esa intención.

"Perdón, estoy bien cariño, tú ¿como estás?"

Espero varios segundos antes de que llegue su respuesta.

No, ya no cuenta. Ya fuiste fría.  ¿Por cierto vamos a ir a comprar el regalo de tu hermana?

"Oh, si"

Dentro de poco será su cumpleaños así que habíamos quedado en ir a comprarlo juntos.

Te adoro.

La sensación de sensibilidad se estableció en mi cuerpo.

Me siento en el inodoro para cambiar mi ropa y bañarme.

Pero... cuando estoy al punto de escribir.

Veo mi ropa interior manchada con sangre.

Oh no, oh no. No quiero. Esto es horrible. Por eso estoy tan débil hoy. Coloco una canción aleatoria en mi Spotify y abro la ducha.

"También te adoro"

<Necesito Cariño>

Me comienzo a bañar en segundos, dándome una larga ducha, una demasiado larga. Si yo pagara el agua estaría quejándome.

Cierro mis ojos.

<DAME CARIÑO>

El agua caliente cae por mi cabello, juego con mi cabello lavándolo. Todo mi cuerpo me supera en estrés así que intento concentrarme en estar tranquila.

Me quedo dentro de la tina con agua caliente intentando relajarme. Mi cuerpo descansa levemente.

—Una noche más y copas de más. Tú no me dejas en paz, de mi mente no te vas. Aunque sé que no debo pensar en ti, bebé, pero cuando bebo, me viene tu nombre, tu cara, tu risa y tu pelo — canto a todo pulmón —Dime dónde tú estás, que yo por ti cojo un vuelo. Y a Yonaguni le llego.