JUEGO DE AMOR DEL TIRANO

CAPITULO 96

"¡¿Tú... realmente te confabulaste con cultivadores fantasmas?!"

Qian Wu miró incrédulo a Chen Ranzhu, este hombre era un gran discípulo de la Secta Espada del Pabellón Liuguang, siempre conocido por su rectitud y decencia, ¿cómo podía ir junto con un cultivador fantasma y la apariencia de ser un lobo?

Chen Ranzhu levantó las cejas y miró a Shang Dong, sonriendo con cara amable: "Senior, no tienes razón al decir eso...."

Qian Wu pensó para sí, ¿podría ser que hubiera entendido mal, que Yuanzi no se había confabulado con este cultivador fantasma, y que había sido el propio cultivador fantasma quien había hecho la jugada?

NT: No se por que Mo Guilan me aparece como Fang Feizi y Chen Ranzhu me aparece como Kong Yuanzi. No se si es un apodo o un término Chino de su estatus lo cual para no dificultar la lectura solo respetare el de Yuanzi... imagino que por ello Yu Birei no lo ha encontrado por que todos le dicen a Chen Ranzhu "Yuanzi" pero Mo Guilan me aparecía como Fang Feizi. No pude encontrar el significado y lo omitiré para no confundirles.

"¿Cómo puedes decir que estamos coludidos? Claramente somos una fuerte alianza".

Diciendo eso, Chen Ranzhu incluso tuvo la audacia de alcanzar y enganchar su mano alrededor del cuello de Shang Dong, usando esta ola de intimidad para estimular despiadadamente a Qian Wu, pero desafortunadamente, Shang Dong lo esquivó sin piedad y sólo pudo soltar su mano con un grito.

Sin embargo, Shang Dong miró fijamente a Qian Wu sin cambiar su rostro, ni siquiera le dirigió una mirada de soslayo, temiendo que este tipo ganara una pulgada. Mira, sólo le ayudó un par de veces, y ahora quiere ensuciarse las manos.

¡Qian Wu estaba tan furioso por sus palabras que quería vomitar sangre! No esperaba que este Yuanzi tuviera realmente un problema, afortunadamente al principio pensó que Mo Guilan no era una buena persona, esto era malo.

"Entonces, ¿dices o no dices?" Chen Ranzhu amenazó de manera zorruna.

"Lo dire..."

¿Podría Qian Wu no decirlo? Sólo con mirar a ese insondable cultivador fantasma, sabía que si no daba una explicación adecuada hoy, temía que su pequeña vida terminara.

Chen Ranzhu está satisfecho hasta el extremo, de verdad, ¡en estos días todavía son los malos los que están en demanda!

Como pensaban, efectivamente había un reino secreto en las afueras de la Ciudad Bai Lu, pero el mayor valor de ese reino secreto era que era un reino dentro de otro reino, y Qian Wu sólo lo había conocido por casualidad. Fue en este reino dentro de otro reino, en el que Chen Ranzhu y su grupo habían entrado donde se había producido la lucha interna. Porque el pequeño reino secreto escondía un tesoro llamado Horquilla del Fénix Blanco, del que se rumoreaba que era un tesoro dejado atrás por la Divina Doncella Celestial, y que podía usarse como tesoro mágico protector al retirarse, y podía transformarse en un largo damasco de Fénix Blanco al entrar.

Si uno pudiera obtener este tesoro y refinarlo, sería una gran oportunidad.

Por desgracia, más de una persona había entrado en el reino secreto, y con Chen Ranzhu había siete discípulos del Pabellón Liuguang en total, así que no había forma de que la horquilla de fénix blanco fuera a parar a una sola persona. Si quería recuperarla, tendría que pagar un pequeño precio.

Mo Guilan, llevaba mucho tiempo con los ojos puestos en ese tesoro, y cómo no iba a soportar la idea de que algo que había llegado a sus manos volviera a salir volando, así que tendió una trampa y mató a todos los discípulos que la acompañaban. Por desgracia, no era lo bastante fuerte como para interceptar y matar a Chen Ranzhu, sino que éste escapó herido y desapareció. No tuvo más remedio que marcharse primero, y cuando regresó a la secta, montó un gran espectáculo, echando toda la culpa a Chen Ranzhu.