Capítulo: 9

277 85 50
                                    

9:45 am.
Hace una mañana muy tranquila y decido que voy a llevar a Rocky a dar un paseo por ahí, algo más lejos que ir al parque, siempre lo llevo allí.

Visto unos jeans de mezclilla azules claros y una blusa naranja de tirantes.

Le pongo su correa roja y salimos después de desayunar.

Carlos me envía un mensaje antes de salir dándome los buenos días, le devuelvo el mensaje.

Buscando un contacto del trabajo me encuentro con el número de Jonathan.

<<He pensado en llamarlo muchísimas veces, más de las que me gustaría admitir, pero no lo he hecho>>.

Saco la desagradable idea de mi cabeza y camino con Rocky.

Primero vamos por el parque a que haga sus necesidades y después lo llevo a conocer a unos cachorros monísimos en adopción.

He decido traerlo aquí un rato porque siempre está solito en casa conmigo y cuando no estoy, a veces, lo encuentro jugando con la gata de la vecina Araiza, que entra por la enorme ventana de mi cuarto.

Un rato después vamos caminando por una acera, tenemos que cruzar la calle y agarro la correa doblándola para que Rocky no valla a salir corriendo.

Tenemos que esperar en la acera porque están transitando algunos carros y motos.

El eslabón que sostiene el collar de Rocky con la correa se rompe y este sale corriendo.

—Rocky— grito.
Cierro los ojos con fuerza y me tapo los oídos.

Mi cabeza no para de retransmitir el momento en que Rocky se soltó de la correa y salió corriendo, lo único que soy capaz de imaginar es que algún carro ya lo debe de haber atropellado y me pongo a llorar.

Oigo un chirrido de gomas y mis lagrimas brotan por mis mejillas.

Aún tengo los ojos cerrados con fuerza, siento una mano que me toca el hombro.

Abro los ojos y lo primero que veo es a Rocky en los brazos de..
Jonathan.

Instintivamente o no se porque diablos lo hice, cuando me doy cuenta lo estoy abrazando y Rocky me está lamiendo la cara con su lengüita.

Se siente tan reconfortante estar entre sus brazos, el calor que emana su piel invita a que te pases aquí toda la vida.

Retrocedo y me ofrece a Rocky, lo tomo y lo abrazo contra mi pecho sin apartar mis ojos de los suyos grises.

—Ya veo que tu perro tiene la misma costumbre que tú— dice y se limpia los pelos de Rocky de su camisa negra.
—Pues sí, mi perro y yo somos así, muchas gracias por recogerlo— digo y sonrió levemente.

—No me haz llamado ni una sola vez— dice en un susurro.
<<Mierda>>.

—Ni tú a mí— digo antes de poder procesar las palabras en mi mente.

—¿Tenía que hacerlo yo?— me responde sin quitar los ojos de los míos.

—¿Y tenía que hacerlo yo?— le replico —la que tenía la mano lesionada era yo, gracias por preocuparte, ya me han quitado el vendaje— añado y desvío mi vista a otro lado que no sean esos ojos.

—¿Qué haces tan lejos de tu casa?— me pregunta.
—¿Y tú qué haces tan lejos de la tuya?— respondo con otra pregunta.

Se sube en su moto y por un momento pienso que va a hacer lo mismo que una semana atrás, me giro para irme cuando:
—Sube— me dice serio y señala al asiento de atrás de su moto.

Le pongo la correa a Rocky nuevamente.
—No, gracias, he venido sola y me voy sola—digo y empiezo a caminar.

Me persigue con su moto.
—Deja de ser tan testaruda y sube— me grita.
—No quiero, no puedes irte de mi casa sin avisar después de un beso, pasarte una semana sin hablarme y después decirme que me suba en tu moto como si nada— le grito en el mismo tono.

Camino más deprisa y no siento más su moto detrás de mí.
Seguro se ha ido, la idea de que posiblemente se haya ido me deprime.

Sigo caminando y siento unos pasos detrás de mí, es él.

Toma la correa de Rocky y me carga sobre su hombro.
<<¿Está loco o qué?>>.
—Eres un puto maniático— le grito y pataleo para que me suelte.

Se monta y me monta en su moto, me pone a Rocky encima, tengo el amago de bajarme pero se gira y me coge de las caderas para que no me vaya.

Su toque en mi piel produce corrientes desde mi espina dorsal hasta un lugar con el que no estoy muy familiarizada.

—Deja de comportarte como una niña y agárrate que te vas a caer— me dice en un tono de voz ¿normal?

<<Ya ni se, es tan difícil deducir de que humor está>>.

Con una mano sostengo a Rocky para que no se me caiga, me toma la otra y la coloca alrededor de su cintura.

Arranca y al aire fresco me abraza la cara, se siente tan libre montar en estas cosas.

Intento con todas mis fuerzas no acercarme e inhalar su olor, pero fallo en el intento.

Los 30 minutos de carretera desde donde nos encontrábamos hasta mi casa pasan volando o al menos esa es la impresión que me ha dado a mí.

Me bajo de la moto y pongo a Rocky en el suelo, me giro sobre mis talones, no quiero verlo, bueno si, pero quiero que piense que no.

—Deja a esa bola de pelos en tu casa y vuelve, quiero llevarte a un lugar— me dice.
—No voy a ir contigo a ningún lugar— le respondo aún de espaldas a él.

—Muy bien, aquí te espero, sino vienes dentro de 10 minutos te voy a buscar— me dice y por el tono que usa creo que está hablando en serio, pero yo también, no voy a ir con él a ningún lugar.

Entro y hago caso omiso de su amenaza. Entro en mi habitación y rápidamente miro por la ventana, aún está ahí.
<<¿Va en serio?>>.

Le quito la correa a Rocky y me cambio de ropa, me pongo: una falda negra que me llega por la mitad del muslo y la misma blusa que ya traía puesta.

Vuelvo a mirar por la ventana y su moto sigue estando ahí pero él ya no.
<<¿Dónde está?>>.
Me asomo un poco más y lo veo en el portal presionando el botón del timbre.

Tomo mi bolso y salgo corriendo.

—¿Quién es, Emma?— pregunta mi madre desde la cocina.
—Es Carlos, mamá. Voy a salir con él— me excuso.
—Vale hija, diviértanse— me grita desde la cocina, abro la puerta y salgo.

Va hacia su moto y lo sigo.
—¿A dónde vamos?— le pregunto.
—Te voy a llevar a mi lugar favorito— dice y lo veo sonreír por el espejo retrovisor.
No puedo evitar sonreírle de vuelta.

Me monto detrás de él y me alcanza el casco para que me lo ponga, lo hago, me agarro con las dos manos de su cintura para nuevamente volver a adentrarnos en la libertad que se siente andar en esta cosa.
_______________________________
Nota de la autora📖:
Holaaa, ¿todo bien?, espero que sí❤️.

Espero que el capítulo haya sido de su agrado☺️.
Si fue así me ayudarías mucho dejando ⭐️ y si gustas comentar tus partes favoritas sería de gran ayuda e inspiración para mí.

También recuerden que los estaré leyendo y dándole ❤️ a sus comentarios. Los amo muaaa💋⭐️❤️un beso enorme.

❤️Recuerden que hay actualizaciones todos los fines de semanas❤️.

Si encuentran algún error o falta de ortografía a lo largo de el capítulo, favor de hacérmelo saber lo mismo al privado o en este hilo de comentarios📖.

Redes sociales en donde puedes saber más sobre la autora o sobre esta historia:
-IG personal: karlaoleidyct06.
-IG sobre mis historias: escritora_romance06.

Roma: Al derecho y al revés, es amor © #1 [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora