Capítulo: 36✔️

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Estoy tan nerviosa que siento que no quepo dentro de mí

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Estoy tan nerviosa que siento que no quepo dentro de mí. No me lo puedo creer, me voy a fugar con Jonathan, con mi novio. Siento un dolor terrible al recordar que voy a dejar a mis padres atrás, a mi abuelo, pero espero firmemente algún día me entiendan y comprendan que las relaciones no se fuerzan, por lo mismo, lo que no nace no crece.

De repente, la puerta se abre y, asustada, llevo las manos a mi pecho. Sin embargo, me tranquilizo al darme cuenta de que es mi abuelo: —¿Tan feo estoy? —ríe ligeramente y se acerca hacia mí.

No, no digas eso, abuelo, eres hermoso.

—Claro que no —me acerco a él para abrazarlo. Muy probablemente sea la última vez que lo haga. No quería llorar pero con esto último se me ha estrujado el corazón.

—Me enteré de lo de la beca, estoy muy orgulloso de ti por haber logrado eso —besa con ternura mi cabello y suavemente me toma del mentón, obligándome a mirarlo y notando las lágrimas que brotan de mis ojos—. No quiero verte triste por tu situación actual. Mi niña, la vida está llena de giros inesperados, pero recuerda que cada vez que llueve escampa y el sol sale para todos. Te quiero mucho y nunca olvides que estaré a tu lado siempre.

—Gracias, abuelo. Te quiero mucho y siempre te llevaré conmigo, pase lo que pase —le digo mientras lo abrazo, sintiendo un nudo en la garganta.

 Te quiero mucho y siempre te llevaré conmigo, pase lo que pase —le digo mientras lo abrazo, sintiendo un nudo en la garganta

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12:30 am. (31 de diciembre).

Después de que mis padres terminan su revisión nocturna de mi habitación, saco todas las sábanas guardadas en el armario y empiezo a atar nudos entre el final de una y el comienzo de la otra. Han retirado las escaleras del jardín; supongo que se han dado cuenta de que Jonathan solía subir por ahí cuando dormíamos juntos. Lo que ellos no saben es que ya ni siquiera eso puede evitar que me vaya con él.

El mensaje de Jonathan avisando que está afuera esperando por mí despierta en mí una sensación indescifrable de calidez y adrenalina. Busco una hebilla de cabello en mi gavetero. Finalmente, con un poco de suerte, consigo abrir la ventana. El aire fresco de la noche me golpea en la cara, trayendo consigo el aroma de la libertad que anhelo.

Roma: Al derecho y al revés, es amor © #1 [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora