Capítulo 14

3.1K 298 18
                                    

Pov.Anastasia:
Después de varias horas de tortura, mogollón de bolsas más y por fin el regalo de mi hermanito salimos del centro comercial. Al salir me quede plasmada al ver que ya había anochecido.
-¿Cuantas horas estuvimos ahí dentro?-pregunté mientras nos dirigimos al coche.
-Unas siete u ocho horas-dijo Kate indiferente y mis ojos se abrieron como platos.
-¡¿Que?!-dije sobresaltada.
-Es normal cuando vas de compras con Kate e incluso debes saber que salimos temprano muchas veces pasamos muchas más horas ahí dentro-me dijo Mia al ver mi reacción-Tranquila Edward esta bien, si hubiera pasado algo Christian ya habría llamado para avisar.
-Es verdad-Afirmo Kate-Además a mi hermano se le dan bien los niños.
-Eso espero-dije en un suspiro.
Montamos en el coche y Mia arrancó hacia la casa de su hermano mayor. En el trayecto Kate iba contándonos cotilleos que sorprendían a Mia pero que a mí me eran indiferentes ya que no conocía a ninguno de los que nombraba.
Al llegar a casa creó que nunca sentí tanta prisa para entrar. Nada mas aparcar Mia salí como un coete del coche y corrí hasta casa. Toque la puerta impaciente y minutos después Christian la abrió.
-Eey hola-saludo sonriente.
-Hola...¿Y mi hermano?-pregunte al ver que no estaba en sus brazos.
-Arriba durmiendo-me dijo y sentí una oleada de alivio recorrerme-Jugamos mucho con él hoy y el pobre quedo agotado. Lleva casi tres horas durmiendo.
-Wow...si que se cansó-comente entrando.
-Hermanito-salto Mia encima de Christian sonriente.
-Mia ya has crecido como para seguir haciendo esto-le dijo Christian aunque la acogió sonriente.
-El único que se a hecho viejo eres tu Grey, yo sigo siendo una baby bord-le dijo Mia sacándole la lengua antes de entrar a casa.
-Cuñadito-le saludo Kate algo más formal que su hermana.
-Hola Kate-le saludo él de vuelta.
Y así los cuatro entramos al salón donde los otros dos se encontrabam tirados en los sofás viendo la tele.
-Mi nene-grito Kate antes de lanzarse encima de Elliot y besarlo con pasión. Tanta pasión que daba asco la verdad.
-Mi bebé-grito Mia esta vez antes de repetir la acción de su cuñada y empezar a comerse a besos a Ethan dejándonos a Christian y a mí en una incomoda situación.
-Bueno basta de comeros las bocas que no estáis solos. Si queréis comeros iros a un hotel-les dijo Christian cortando el rollo-Es muy asqueroso ver como mi mejor amigo se come a besos a mi hermana y como mi hermano se come a mi mejor amiga.
-Eso es envidia Grey-le dijo Elliot sonriente con Kate encima de su regazo.
-¿Envidia?¿De dos payasos como vosotros?No me hagáis reír anda-les dijo Christian.
-Payasa tu madre chaval-le dijo Ethan.
-Eso ya lo sé-le dijo Christian indiferente tirándose en el sofá.
-Yo voy a ver a Edward y vuelvo-les dije escapando de ese ambiente personal y familiar que habían creado.
Subí a mi habitación con las bolsas de ropa que había comprado y las guarde en el armario al igual que el regalo de Eddie.
Cuando volví estaban los chicos poniendo cojines en el suelo y las chicas no las veía por ningún lado.
-¿Que hacéis?-pregunte curiosa.
-Los chicos se quedan a dormir aquí ya que a Mia se le ocurrió que seria buena idea que nos divertíamos un rato esta noche-me explico Christian-Esta con Kate en la cocina haciendo yo que se que.
-De acuerdo voy a ver si me necesitan en algo-les avise antes de salir del salón para dirigirme a la cocina.
Al entrar las encontré haciendo palomitas y poniendo chucherías en bols.
-Ana ven ayudanos-me llamo Mia y eso hice.
Me acerque a ellas y me puse a abrir paquetes junto a ellas.
Después de tener listos los aperitivos volvimos al salón con los demás que se encontraban preparando el reproductor de DVDs.
-¿Que vamos a hacer?-pregunto Kate curiosa.
-Hemos pensado en ver una película-contesto Ethan.
-Oh perfecto entonces elijo yo-dije Mia emocionada.
-No,no ni pensar que tu nos pones a ver mariconadas-se negó retundamente Elliot.
-Pinta tu de maricón ya tienes-se burló Christian.
-Me lo dice don Sensible-le dijo éste.
-Bueno a ver par de críos dejad de hacer el imbécil que Edward parece más maduró que vosotros dos juntos-les dijo Kate y a decir verdad Edward no estaba lejos de ser más maduró que estos dos a este paso.
Me senté en el suelo y espere a que de decidieran por la película que más les gustaba mientras yo recapitulaba mi vida.
Cuando salí a la calle ese día pensaba volver con la misma respuesta. Cuando entre al bar esperaba un rechazo. Cuando me desmaye pensé que estaba muerta. Cuando desperté desorientada pensé que me habían secuestrado. Cuando me ofreció trabajo Christian pensé que sería muy cansino pero veo que no doy en ninguna por lo negativa que soy.
Pagué todo lo que me debía la arrendadora anterior, pude conseguir un trabajo nuevo, le podido comprar a Edward todo lo que necesita además de un regalito, he podido comprar ropa nueva y encima vivo como una reina en lugar de como una ama de llaves gracias a Christian Grey.
Creo que Christian Grey es lo más cercano a un ángel por su gran corazón y lo más parecido a un dios griego respecto a su sexy cuerpo.
Siempre solía decir que el karma me odia y que toda la mala suerte del mundo se a acumulado en mí pero desde que me desmaye delante de Christian Grey todo esta dando un gran cambio en mi vida. Creo que fue lo mejor que me a pasado desde hace muchísimo tiempo.
-Eeeooo tierra llamando a Ana-dijo Mia delante de mí moviendo su mano a modo saludo delante de mí.
-Oh perdón ¿Decíais algo? Es que estaba un poco distraída-dije con una sonrisa.
-¿En serio estabas distraída? Wow no nos habíamos dado cuenta, no lo hubieras dicho ahora no lo sabríamos para nada-dijo irónico Elliot que se llevo un golpe en la cabeza de parte de Christian.
-¿Ana estas bien?-me preguntó Ethan algo preocupado.
-Si, claro muy bien tranquilos es solo que me distraje pensando un poco. Eso es todo-le conteste con una sonrisa.
-¿Y en que pensabas?-me preguntó Mia.
-Oye cotilla no tienes que saber también lo que piensa eeh-le dijo Kate.
-Bueno te estábamos preguntó si quieres ver Divergente-me dijo Christian para cambiar de tema.
-Oh claro si es la que habéis elegido no me importa-conteste.
Y minutos más tarde nos encontrábamos viendo como Beatríz dejaba de ser Beatríz para convertirse en Tris en las manos de Cuatro, quien tiempo atrás había sido Tobías Eaton.
La película iba transcurriendo pero para ser sincera yo había dejado de prestarle atención hace mucho. Ya la tenía vista de hace mucho y en estos momentos no estoy para películas.
No me siento cómoda invadiendo la privacidad de esta familia. Yo no soy parte de ellos, soy una simple ama de llaves y no merezco lo bien que me están tratando.
Sin interrumpir me levanté de donde estaba sentada. Los chicos no notaron nada ya que estaban muy concentrados viendo la película o manoseando a sus chicas. Las chicas estaban igual pero nada más levantarme los ojos de Christian fueron directamente a mis ojos.
Le sonreí tímidamente antes de salir corriendo del salón y subir a mi habitación.
Nada más entrara cerré la puerta a mis espaldas y le senté en la cama al lado de mi hermano. El pequeño estaba durmiendo con una cara angelical respirando acompasadamente.
Unos toques en la puerta me distrajeron y antes de que esa persona abriera la puerta ya sabía de quien se trataba.
-¿Ana estas bien?-me preguntó mi ángel guardián a pesar de que el resto lo llame demonio.
-Si, estoy bien tranquilo-le contesté sonriendo tímidamente.
-¿Porque te has ido de esa manera?-me preguntó acercándose a mí lo que me ponía nerviosa.
-No es nada tranquilo-le contesté restándole importancia a la cosa.
-No estaré tranquilo hasta que me digas la razón-me dijo él acercándose más a mí. Notaba como mi respiración empezaba a alterarse y como los latidos de mi corazón se alteraban a cada paso que él daba hacia mí.
-En serio no es nada solo me pareció oir a Edward llorar y decidí venir a ver si había despertado-mentí mirando al suelo ya que no era capaz de mentir y mirarle a la cara.
Mis ojos permanecían en el suelo pero de pronto Christian se arrodillo delante de mí ya que yo estaba en sentada en la cama y de esta manera estaríamos en la misma altura y alzó mentón con su dedo para que le miré a los ojos.
-No me mientas Ana-me dijo serio mirándome a los ojos.
Mis ojos son como el reflejo de mi alma lo que me convierte en un libro abierto para la gente y sumándole a eso lo mal que miento todo el mundo se da cuenta de que oculto algo o no digo la verdad completa pero en cambio los ojos de Christian no transmiten nada más que frialdad.
Sus ojos son una barrera para el resto al contrario de los mios pero por alguna extraña razón cada vez que mis ojos conectan con ellos me pierdo en ese gris que hiela hasta los huesos pero que se esta convirtiendo en mi color favorito.
-No estoy mintiendo-logré susurrar casi audiblemente hechizada por su mirada.
-Dime que te pasa o te beso-me dijo él dejándome helada.
-¿Que?-medio grite atónita.
-Que me digas que cojones te ocurre Anastasia-me repitió él.
Seguro que mi mente se a inventado lo último. Sí, seguro que es eso porque vamos¿Como alguien como Christian querría besar a alguien como yo?
-Ana quiero que confíes en mí y me digas que es lo que te ocurre para que te pueda ayudar-me pidió mirándome fijamente. Mi corazón estaba apunto de salirse de su sitio y cuando la mirada de Christian dejo mis ojos para dirigirse a mis labios juro que dejé de respirar por unos segundos hasta que su mirada me pidió una respuesta.
-No puedo decirte ahora Christian, entiende que esto no es fácil para mí por favor-le dije jugando con mis dedos nerviosa y bajando un la mirada-Agradezco un montón todo lo que habéis hecho por mi tu y tu familia pero necesitó un espacio para mí por favor.
-De acuerdo-me dijo suspirando y levantándose-Descansa yo te disculparé con los demás si no quieres regresar abajo por hoy.
Dicho esto se dio media vuelta para dirigirse a la salida.
-Christian-lo detuve justo cuando estaba por salir.
-Dime-me incito a hablar girándose para mirarme.
-Muchas gracias-le agradecí de corazón y él simplemente sonrió antes de salir.
Solo sonrió pero esa sonrisa movió mil cosas en mi interior sin siquiera pretenderlo.
NO ME MATÉIS
Siento muchísimo no haber publicado en tanto tiempo pero es que los estudios me están consumiendo todo el tiempo y ando ocupadisima.
Lo que quiero recordar es que nunca nunca abandonaré una historia sin darle un final como es debido.
Voy a actualizar los fines de semana cada que pueda.
Gracias por seguir leyendo mis historias.

Pasados EntrelazadosWhere stories live. Discover now